La cobra

Capítulo 9

*Narrador Omnisciente* 

     Al día siguiente (T/N) llegó más feliz que nunca a la escuela. Por las nuevas normas pasó por el control obligatorio, la revisión de mochilas, etc. Su rostro feliz contrastaba enormemente con su vestimenta negra habitual así que atraía más de una mirada. 

     En su búsqueda de Halcón vio como este, dos más de cobra Kai, Demetri y dos más de Miyagi Do se miraban como con ganas de matarse. Estaba a punto de ir e interrumpir en eso pero antes de si quiera dar un paso una profesora interrumpió y según lo que haya pasado los chicos finalmente se encaminaron a clases. 

     Cuando ya vio que la profesora se alejaba, caminó rápido hacia Halcón y al estar frente a él casi se lanzo para abrazarlo. Primero correspondió al abrazo pero después al recordar las palabras de Dylan y lo que había pasado hace unas noches con ella la aparto con un poco de miedo, bastante disimulado. 

-¿Qué haces? Tu hermano podría enterarse. - (T/N) solo sonrió y volvió a abrazarlo. - ¿Pasó algo bueno? 

-Pues sí, pasó que mi hermano me dejó volver a hablarte, y algunas otras cosas buenas. - A penas escuchó eso Halcón se aferró más a la chica e incluso la levantó olvidando por completo que habían personas que podían verlos. Una de esas personas que los veían era Demetri, que además estaba acompañado por Sam.

-Se te nota. - Le dijo la chica. 

-¿Qué cosa? 

-Solo te diré que será mejor que no intentes nada con ella, no solo por que sea una cobra Kai, si no porque al parecer ya es "propiedad" de uno. - Demetri hizo cara de no entender a lo que se refería y ella solo ladeo la cabeza para que mirara. Giró la vista nuevamente y vio como Halcón besaba a (T/N), la besaba con sincero cariño y eso le hizo un cierto daño a Demetri, pero no lo demostró. 

-No sé de lo que hablas Sam. - Dijo yéndose hacia su salón. 

-Oye - Habló (T/N) apartándose de Halcón. - tenemos clases. 

-Podríamos saltárnoslas ¿no crees? - Sugirió con una sonrisa coqueta. 

-Eli.

-... De acuerdo, ¿te veo en el receso entonces? 

-Por supuesto. - Se dieron un beso corto y luego cada uno se fue por su lado por las clases que tenían separados. 

     (T/N) llegó al salón de informática donde tenía la primera clase en conjunto con Demetri. Lo buscó con la mirada y lo encontró en el mismo lugar en el que siempre se sentaba, fue para sentarse a su lado, lo saludó pero para su sorpresa él la ignoró. Pensó que no la había escuchado, pero no insistió, ya que cuando pasaba eso era porque estaba sumido en pensamientos suyos. 

     Las primeras clases de cada chico transcurrieron normalmente exceptuando la de Demetri y (T/N), ella había tratado de hablar con él cada cierto rato, pero él no decía nada y solo miraba al profesor o a la pantalla de la computadora. Nadie se imaginaba ni en sus pensamientos más locos que justo antes de que tocaran la campana para el primer receso, frente a la escuela, estaba caminando un rubio de ojos grises con una cicatriz en la ceja, observando y escuchando atentamente. Cuando tocaron la campana la vista del rubio se quedó fija entre el patio y la entrada, hasta que vio lo que quería ver. (T/N) salió al patio con el chico con cabello rojo tras ella, pero había alguien más, alguien que había visto la noche anterior, caminaba frente a la chica, y al parecer esta intentaba hablarle. 

-He peleado con peores. - Susurró entre dientes para si mismo y de inmediato comenzó a caminar hasta el patio de la escuela. Cuando ya estaba lo suficientemente cerca como para estar seguro de que ella lo escucharía habló. - ¡Cobra! - Gritó llamando la atención de los tres. - ¡Te dije que sabía donde estabas preciosa!