Capítulo 3

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     Halcón llegó a la habitación de (T/N) siendo arrastrado por esta, cuando entró se sorprendió de ver todo tan... blanco y negro, se sentía en una de esas películas antiguas que además eran mudas. Se quedó observando un rato la habitación de la chica hasta que notó que estaba abriendo una especie de fondo falso en uno de sus cajones. 


-¿Que haces? - Preguntó acercándose a (T/N).

-Ya te dije lo que mi hermano le hizo a mi karategi, si lo encuentra de nuevo es capas de llevárselo y triturarlo. - Respondió mientras guardaba en el fondo falso su karategi. - No entra a mi habitación, pero es mi hermano y sé hasta que punto debo confiar en él... y al parecer le caíste bien, ¿Eli? 

-Si bueno, no creí que presentarme con mi nombre del dojo sería buena idea, así que mi nombre real entró en escena. - Comento esto mientras se paseaba por la habitación hasta que llegó frente a una repisa con algunos trofeos. - ¿cuántos torneos son?

-Fui a varios, pero esos solo son algunos de los que tengo.

-¿Y el resto? - Esta pregunta hizo que los ojos de (T/N) comenzaran a cristalizarse un poco pero lo detuvo de inmediato. 

-Con mis padres, o no lo sé, tal vez ya los vendieron en alguna casa de empeño. 

-Ósea solo-

-Solo vivo con mi hermano, mis padres son unos malditos alcohólicos... bueno no, eso es mi madre, mi padre además es un drogadicto de mierda que vendería lo que fuera por obtener su dosis... seguro mis trofeos ya los vendió. 

-Por lo menos tienes estos que demuestran lo buena que eres, y seguro pronto tendrás otros una vez que nos manden a otro torneo... ¿medallas? - (T/N) miró de reojo su cajón. - ¿allí hay una verdad?

-No es importante.

-O ¿enserio? - Se acercó rápidamente al cajón sin darle tiempo de reaccionar a (T/N), lo abrió y vio la medalla que tanta repulsión le daba a la muchacha. - Segundo lugar.

-Sí... es un asco.

-No esta mal realmente, ¿fue tu primer torneo o algo así?

-No... mi último antes de llegar aquí... me torcí el tobillo pero le insistí a mi sensei para que me dejara pelear la final y eso conseguí, un mísero segundo puesto... la dejé ahí porque me da asco recordarlo así que devuélvela. - Arrebató la medalla de las manos de Halcón y la volvió a guardar.

-Lo siento... pero, con un tobillo torcido el segundo lugar no esta mal.

-Para mi sensei si lo estuvo, y aunque mi hermano no me hubiese prohibido seguir con el karate mi sensei me hubiera roto la pierna antes de dejarme entrar de nuevo a su dojo.

-¿Tan duro era con ustedes?

-No, solo lo era conmigo... literalmente al día siguiente me dijo "tu tobillo no fue excusa, tú me pediste subir así que si te enorgulleces de un segundo lugar das asco, no vuelvas o te romperé la pierna"... era un hijo de puta como ningún otro, pero aún así lo respetaba por alguna razón. - La conversación fue interrumpida por la repetida vibración del teléfono de la chica. - Guau.

-¿Qué?

-Muchos de mis antiguos amigos del dojo me preguntan si acaso ya los reemplacé con solo una persona, y uno que otro me pregunta si eres mi nuevo novio. - Le dio un ligero golpe a Halcón pero este se veía nervioso por eso último. - Debes admitir que rodear mis hombros con tu brazo no es que de a entender que somos solo amigos. - Dijo sonriendo pero al instante de volver la vista al teléfono la sonrisa se borró. 

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