Limerencia |C.Weasley Smutfic| |+18|

IV: Hospital

Airam asistía a la doctora que se encargaba de tratar la quemadura del pelirrojo, parte de su brazo y espalda estaban muy mal.

Ninguna entendía como es que el Weasley aún seguía consiente, le habían inyectado morfina para disminuir el dolor, pero estaban seguras que no era de mucha ayuda, ningún paciente lograría permanecer semi consiente.

Airam limpiaba el área más grande tratando de evitar una infección futura.

Sabía que Charlie era bombero por lo que eran normales ese tipo de lesiones, pero lo que le extrañaba es que no llevara el traje que solían usar, Simona y la peli azul que llego con esos atinaron a explicar que lograron quitarse los uniforme antes de partir al hospital, pero la morena no parecía muy convencida, ya preguntaría después.

Estuvieron alrededor de dos horas tratando las quemaduras de tercer grado de Charlie Weasley, lograron colocar gasas y demás medicamentos calmando el dolor, pero debería de llevar un tratamiento y estar doce horas más en observación así que la doctora dio la orden para que lo pasaran a una habitación.

Otra cosa que le extraño a Airam, y que al parecer paso desapercibido por la doctora es que la piel parecía seguir quemándose por dentro hasta después de unos minutos. Trato de no prestar atención, probablemente todo era producto de su imaginación

El dolor recorría el hombro y espalda de Charlie, estaba acostado boca bajo para no rozar sus heridas, la medicina muggle estaba muy atrasada, en San Mungo lo habrían curado de inmediato y dado de alta en menos de lo que él decía basilisco.

Soltó un suspiro de frustración, tenía que ir a atender al dragón o causaría más destrozos.

—Vas a quedarte doce horas aquí —escucho la voz de Simona a su lado—, en observación o algo así le llamaron los muggles...

—¿No podríamos alterar sus recuerdos para que me vaya de aquí?

Estaba frustrado por no poder moverse bien, enserio que odiaba la medicina muggle.

—No-o —Simona sonreía viendo a su amigo —, Razvan y yo volveremos al santuario, una enfermera estará al pendiente de ti — la castaña parecía muy divertida con la situación —...estoy segura que te tratará muy bien.

Charlie puso los ojos en blanco, recordaba ser atendido por dos mujeres, pero ni siquiera puso atención en sus rostros, y sabía que Mona quería que saliera con alguna mujer, pero ninguna llamaba su atención.

Bueno había una que sí, una morena que definitivamente tenía toda su atención.

—Mona, al menos dame la varita —pidió frustrado —, quiero salir de aquí.

—Te la daré mañana, cuando regreses al santuario —agrego con una voz cantarina —, diviértete, Charlie.

El pelirrojo bufo al escuchar como cerraban la puerta, esos dos malditos se irían de ahí sin él.

Ni siquiera le dieron su varita.

¿Qué se supone que hiciera en esa estúpida camilla de hospital?

✹✹✹

Airam toco dos veces la puerta, pero al no recibir respuesta se imaginó que estaría durmiendo, seguramente estaría aún demasiado cansado después de las curaciones.

Y como sospechaba, al entrar pudo observar al Weasley durmiendo tranquilamente, se encontraba sin playera y su espalda estaba cubierta por unas cuantas gasas. Se acercó para tocar con suavidad el hombro que no estaba lastimado.