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Epilogo

Vinnie Hacker
Soy Vinnie Hacker, 17 años, vivía en Seattle antes de mudarme a Los Ángeles con mi mejor amigo Kio , él y yo fuimos transferidos por el fútbol americano.

Era nuestra primera vez en Los Ángeles solos, un martes si no mal recuerdo fue el día que llegamos, éramos dos chicos emocionados por una ciudad gigante con cosas que Seattle no tenía.

El viaje me tenía agotado y el desempacar era algo que quería evitar, para tomar una siesta muy larga, pero Kio escucho de un lugar nuevo en venice y aunque me negué en repetidas ocasiones el lo logró convencerme, tenía razón, debíamos conocer el lugar en que viviríamos ahora, al llegar vimos una mesa llena de chicos, pensamos en ir a saludar para ver si podíamos hacer amigos, ya que éramos nuevos, pero al entrar ellos empezaron a tomar sus cosas y levantarse de la mesa, nosotros nos dirigimos a una mesa cercana ignorando a aquellos chicos, un par de minutos después vi cómo algo se encendió en uno de los asientos, trate de ignorarlo ya que no era de mi incumbencia, pero despues de un largo rato seguía iluminando el asiento, decidí levantarme para ver qué era y estaba ahí un teléfono con unas 10 llamadas perdidas, al tomarlo pude ver que este no tenía ningún tipo de código o algo por el estilo, empecé a buscar algo para identificar con exactitud al dueño, pero sólo di con algunas fotos, al llegar a la mesa le conté a Kio sobre el teléfono y él lo tomo,

-Una tal Queenmm le mando un mensaje en un tipo de app anónimo -dijo el viendo la pantalla

-Déjame ver -tome el teléfono y confirme que alguien le había escrito pero no quise leer la conversación.

Al llegar al departamento que nos habían dado en lo que nos asignaban a la familia que nos recibiría otra notificación llego de esa misma persona en la app, la curiosidad me mato y abrí los mensajes, al parecer iba a conocer a esta chica, pero por lo qué alcance a ver el chico tenía novia y aún así se escribía con alguien más, estaba tan intrigado que leí la conversación completa, si el había perdido su teléfono no podía contestarle a "Queenmm" así que quizá lo haría por el.

Con cada palabra que leía más me cautivaba la forma de ser de esa chica, era tan dulce, tan compresiva y tan inteligente, pero que el chico del teléfono estuviera hablando con ella durante tanto tiempo teniendo novia había mucho ruido en mi cabeza.

Durante los siguientes días el hablar con ella se había vuelto indispensable, se sentía tan bien hablar con ella, cada día quería conocerla más y por ello volví a tomar el tema de la salida, ella acepto y en un par de días conocería  aquella chica que conocí por el descuido de un chico.
 
Desde aquel mensaje mis días pasaron muy lentos un par de días se volvieron semanas y aunque el encuentro se haría se estaba haciendo eterna la espera y sin darme solo faltaban horas para conocerla.

-harás una hoyo en el piso, deja de caminar por Dios -la voz de Kio me devolvió a la realidad tirándome a mi cama

-Deberia ir formal? Digo, iremos a un restaurante en Hollywood para vernos por primera vez, no se que demonios se usa para algo como eso -la frustración de mi voz era evidente, a lo que Kio comenzó a revisar mi closet lanzando cosas a mi cama y buscando entre mis zapatos

-usarás eso, no es muy casual pero tampoco muy casual y se ve muy bien, ahora bañarte y vístete que el restaurante está lejos de aquí -Kio dejo mi habitación y me apresuré a hacer lo que básicamente me ordenó.

Kio estaba manejando y por alguna razón estaba demasiado nervioso, aunque no era el chico original que debía ver, ella estaba siendo alguien importante para mi.  Al llegar al restaurante pensé mucho en salir de auto, estaba 25 minutos antes, así que aún tenía tiempo de armarme de valor para salir.