Capítulo 22: (Inmortalizada)

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Narra Kevin 

Habitación de Rojo (Instituto de State In)

De noche todo parecía más tranquilo, realmente me dejaba pensando mientras esperaba a Rojo, pareciera cómo si realmente todo hubiera cambiado hace años, un día como estos, Sudy y yo  estaríamos desvelándonos entre mensajes y mensajes sobre una conversación divertida, pero no es el caso, en ese justo momento Rojo abre silenciosamente la puerta.

¿Kevin? ¿Qué pasa?— Pregunta con un rostro atontado y muy preocupado.

Aquí no es seguro...— Le susurro y entro de inmediato a su cuarto, él cierra la puerta  y me paro justo enfrente de él.

Kevin, no podemos hacer esto aquí... yo...— Lo interrumpo y me sonrojo, acabo de perder otra oportunidad de tener algo.

¡Rojo! ¡Esto es en serio! Susana nos necesita...— Rojo cambia su rostro a uno más apagado y serio.

Escucha, esta es nuestra última oportunidad de acabar a la directora, para siempre...— Le insisto y él me observa en silencio.

Solo tengo que conseguir entrar a su oficina de nuevo, Susana tiene fotografías de las evidencias en su teléfono, si lo tomo ella podrá contactar a un abogado amigo del profesor de teatro y abrir un caso contra ella— Le explico, él luce algo desinteresado

Entiendo...— Responde desganado.

¡Ey! Tranquilo sí, sé que este asunto ya te ha vuelto muy loco, pero estoy segurísimo de que lo vamos a lograr— Él sonríe falsamente, pero sigo sin comprender que le sucede.

Rojo, yo...— Él me interrumpe

No eres tú, Kevs, es que yo... lo arruiné todo— Dice y yo le cuestiono

Cuando debía distraer a la directora en vez, solo dudó y ella me mandó de regreso a mi habitación, me estaba vigilando que regresara, fue imposible y yo traté de decirte, pero... después todo se fue al carajo— Dice con una mirada agachada, luce bastante afectado por eso.

Tanta sumisión, realmente me estás provocando ¿cierto?— Brome haciendo alusión a su rol, pero él se apega a la idea y me disculpo, realmente está afectado por eso...

Lo siento en serio Rojo, no tenía idea que eso te tuviera tan preocupado, pero deberías dejar de sentirte así, no pasa nada, te lo prometo...— Le sonrío y lo abrazo, acto seguido él vuelve a su felicidad.

Vamos por ese teléfono...— Le digo y los dos salimos listos y a escondidas de su habitación mientras caminamos directo a las escaleras.

Los pasillos lucen muy oscuros, eso suena como una ambiente ideal para lo que haríamos, sin embargo, cuando descendemos, retomo y pienso un poco más lo que puedo hacer.

Rojo, espera, mejor quédate arriba, yo traigo mi teléfono, puedo enviarte mensaje si necesito una distracción rápida, así no me descubrirá— Susurro casi imperceptible y él asiente, mientras vuelve a subir.

Llegó mi momento, pensando aún en las consecuencias, era la única manera de acabar para siempre con esa mujer, por lo que esta noche lo daría todo para tomar ese teléfono, cada paso que descendía, era una leve mirada hacia los lados para ver que no estuviera cerca, su oficina no estaría lejos.


Narrador

La directora yacía en su silla de siempre, sentada enfrente de su escritorio, en silencio trabajando misteriosamente, era la única persona en todo el instituto despierta justificándose en lo arduo que trabaja.

Highschool Memories (1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora