Mi omega rebelde OMEGAVERSE (jungkook y tu)

Capitulo 57

(Un par de horas antes)

Narra Kim kami:

Después de aquella larga travesía a mi pasado, pude volver a mi zona de confort.  De vuelta una vez más, a mi laboroso trabajo empresarial. Estas situaciones me provocaban un gran estrés, y ni hablar del papeleo y las cuentas que llegaban de a montones. Estaba meditando seriamente en contratar un nuevo personal para alivianar mi trabajo, pero realmente prefería tener mi cabeza ocupada. Por lo menos por un tiempo más, cuando ya haya superado el efecto que dejaba Kim han min en mí.

-es nuestro alfa, trátalo como tal- me regañó mi omega que se encontraba mas comunicativa desde que volvimos-

-no sabía que ya se te había quitado la molestia con él -comencé a teclear haciendo una mueca-parece ser que eres menos rencorosa de lo que creí…-murmure-recuerdo que me prometiste no volver a él en la primera oportunidad- gruñí frunciendo mi ceño-

-y no lo haremos, pero es nuestro alfa- trató de explicar su punto- debemos respetarlo como tal-

-maldición- gruñí otra vez mientras dejaba lo que estaba haciendo y le ponía una atención total a mi omega- ¿enserio quieres que lo respete después de lo que hizo y como nos trató?- eleve mi voz mientras apretaba mis manos hasta que los nudillos se me pusieron blancos-

-no es lo que quiero decir…-sus orejas se bajaron momentáneamente pero luego trató de tomar una postura más dominante- pero queramos o no, en algún momento tendremos que hacerlo-

-no puedo creer lo que estás diciendo, ¡MALDICION!-golpee la mesa y me levante comenzando a caminar de un lado para otro- esto es una mierda, no puedo creer que siquiera haya llegado a tu cabeza-gruñí- ¿comiste mierda?, ¿o acaso las malditas pulgas te están afectando?- pase las manos por mi rostro frustrada-

-eso me ofende, yo no tengo pulgas- negó y suspiró- y no como excremento, ¿de dónde sacas esas estupideces?-frunció su ceño-

-lo mismo te pregunto-dije entre dientes-

Suspire tratando de retomar mi calmada postura, masajee mi cien mientras cerraba mis ojos. Ya pronto iba a amanecer, me había quedado haciendo horas extra para poder terminar todo lo que aplacé por ir a dejar aquel en cargo. Camine hacia la cafetera y me serví aquella bebida que me reviviría momentáneamente, al beberlo pude sentir su calor en mi garganta. Seguí mentalmente el recorrido hasta que se perdió en mi pecho, un poco más calmada volví a mi escritorio. Comencé mi trabajo nuevamente en un completo silencio de mi omega, estaba tentada a poner música para que esto no se hiciera tan malditamente incomodo. Negué agobiada tratando de alguna forma quitarme su molesta insistencia de mi mente, pero no hacía más que suspirar mientras buscaba en mis recuerdos aquellos momentos al lado de han min.

-ésta bien, ¿Qué quieres?- pronuncie exasperada-

-que entiendas que necesitamos a nuestro alfa-bufo- sin él no estamos completas, además. El quiere volver y arreglar las cosas. Lo está intentando, pero de nada sirve si tu….-no la deje terminar-

-CALLATE- pronuncie- ciérrala maldita boca de una vez- susurre- no sé cuantas veces ya hablamos de esto…-

-lo sé, pero entiende que…-la interrumpí-

-¡nos va bien sin el maldición!- cerré mis ojos con fuerza- ¡no lo necesitamos! -la mano que tenia sobre el ratón del computador comenzó a temblar- y si así fuera, tampoco lo está intentando. Un verdadero alfa que quiere arreglar las cosas no se quedaría esperando a que su omega vuelva, tomaría su maldito trasero y buscaría su ubicación aun si eso significa vagar día y noche sin rumbo-