TAN ENAMORADOS

Capítulo 28 Solo en Ecomoda pasa estas cosas

Esa tarde, Betty y Armando regresan a Ecomoda ...

A pesar de estar rebosante de felicidad cuando le pidieron que se casara, Betty teme por la reacción de su padre de que ciertamente no verá con buenos ojos un compromiso tan repentino ...

-¿Pero qué quieres decir, Betty?" ¿Cuánto tiempo tendremos que esperar para casarnos?

-¿Qué? Armando Mendoza, el tigre de Bogotá, uno de los solteros más elegidos de Colombia ...

(Él puso los ojos en blanco mientras ella hablaba, ya que sabía que se estaba burlando de él)

- ... El tigre de Bogotá, ¿El soltero más guapo de Colombia quiere casarse con Betty, la mujer más fea de toda Colombia?

-¡Detente, Betty! ¡Nunca fuiste la mujer más fea de Colombia!

-¡Armando Mendoza tenía un espejo en casa! -Te reiste a tu manera

- ¡Detente, Beatriz, detente!

-¡Estoy bromeando, Armando! - beso- ¿Aún no estás relajado? Estoy encantada de que tengas tanta prisa por casarte conmigo. ¿Qué pasa?

-¡Te amo, Betty! ¿No es suficiente? -Armando frunció el ceño y la miró -¿No sientes lo mismo? ¿No quieres casarte conmigo?

-¡Armando, si pudiera, me casaría contigo hoy!

-¡Excelente! ¿Entonces por qué no?

-¡Armando! ¡No es así! -beso- No solo me casaría, incluso me mudaría a tu apartamento hoy, si pudiera ...

- ¡Mira, estoy de acuerdo! ¿Porque no?

- El caso es que por mi padre empezamos a salir hace un mes, en cuanto cancelaste la boda con doña Marcela.

-¡Sí, acordamos así!

¿Y cómo nos vamos a casar ahora? ¡Pensarás que me dejaste embarazada! -Ella rió

-Bueno, Betty ... Pero si es así,y si estuvieras embarazada, ¿él me obligaría a casarme contigo rápido?

-¡Mira, podría haberte obligado a casarte!

Él dió uma sonrisa pícara

-¡No te rías y sigue haciendo planes en tu cabeza, Armando Mendoza!

¡Puede decidir matarte en lugar de obligarte a casarte! ¡Por deshonrar el nombre del Pinzón!

-¡Oh, Betty!

-¡Aunque mi padre nunca sabes cómo vas a reaccionar! ¡Ni siquiera lo sé!

-¡Oh, Betty! ¡Es peor que yo no lo sepa también! Tengo un poco de miedo de tu padre ...

(Betty se ríe)

-¡Pero le gustas mucho, doctor! ¡Te considera un hombre inteligente y educado. ¡El hombre de pergaminos que soñaba para su niña!

-¡Si supiera lo que soy capaz de hacer contifo por ser tan idiota, nunca me dejaría mirarte! ¡Me mataría!

-¡Estamos de acuerdo en que nunca lo sabrá!

Él piensa que soy todavía una niña, ¿sabes?

-¡Si, lo sé! ¿Pero como lo hacemos?

-¡Le diré a mi madre que me propusiste matrimonio y pedirle que nos ayude!"

—¡Sí, doña Júlia puede ayudarnos! ¿Pero que hacemos entonces?

-Tenemos nuestro viaje la semana que viene, y cuando regresemos, vamos a hablar de eso.