𝙀𝙥𝙞𝙡𝙤𝙜𝙤

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Imaginen que después de dejar atrás múltiples relacionamientos, después de analizar mi vida bajo una lupa y un poquito de investigación, yo digo que al final, nosotros los ser humanos hacemos cosas por conseguir y mantener una relación amorosa, que al final se convierte en bola de actos dañinos para nuestra vida.

Sin agregar que nosotras las mujeres tenemos una idea instalada en la cabeza, de que un día nos salvará de un incendio un guapo bombero de ojos color cielo.

Claramente, nosotras soñamos con un príncipe Encantador..., alguien bello; romántico, trabajador, leal y sobretodo fiel.

¿Pero que ocurre cuando crecemos y nos damos cuenta que el príncipe es Shrek?

Entonces te decepcionas a más no poder, porque si vamos al plano real y tangible, solo te das cuenta que todos los que te procuran son de lo peor.

Pero, amigas y lectoras, ya es hora de usar los lentes de la realidad. Podrán decir que no son todos así.  Pero seamos honestas: hay motochorros del amor en cada esquina de tu ciudad o pueblo.

Debemos reflexionar y aceptar que no toda la tragedia que nos consume es por culpa de estos. Aceptemos que nos involucramos con personas que no debemos.

No pienso satanizar a la gente que lee esto, pero siempre hay personas que se avientan a lo perturbador, peligroso y desconocido.

No aceptes migajas de amor, porque es algo que no nos completa. Sé tu prioridad y ten amor propio.

Ahora dime, entre nos: ¿Qué cosas sombrías y oscuras hiciste por amor?

Ahora dime, entre nos: ¿Qué cosas sombrías y oscuras hiciste por amor?

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𝙇𝙤𝙨 𝙢𝙤𝙩𝙤𝙘𝙝𝙤𝙧𝙧𝙤𝙨 𝙙𝙚𝙡 𝙖𝙢𝙤𝙧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora