Seokjin llegó a la escuela aquél día, otro aburrido y normal cómo siempre. Pero, la diferencia total y repentina fué cuando vió a Namjoon entrar, vestido con una media apretada camisa blanca, jeans negros sueltos y su cabello anteriormente peinado hacia atrás ahora estaba desordenado aún que continuaba blanco, y sus lentes todavía estaban puestos cubriendo sus brillantes ojos con el vidrio, pero se veían diferentes de cierto modo.
Tuvo un colapso.
—Seokjin... huh, ¿Seokjin?
—¿Qu-e? ¿Ah?
Mark rió, se dió cuenta de la mirada pasible de su amigo al chico recién entrado y supo que el antiguo Seokjin había vuelto, lo que le generó cierto miedo pero había visto a Namjoon, lo comenzó a notar y además por lo que le contaba su amigo, ya tenía algo más de confianza en el chico.
—Descuida, nada.– sonrió mirándolo– ¿Es lindo, sabes?
—¿El qué?
—Que estés enamorado de vuelta, al principio podía temer pero, Namjoon se ve demasiado bueno.– sonrió.–Aún así, no te dejes llevar demasiado, cualquier mínima cosa me avisas, ¿queda claro?– advirtió señalandolo, y Seokjin rió.
—Bien, bien.– paró su risa junto a la contraria, miró al chico ahora más persuasivamente, esa mirada que ponía cuando quería algo u oír algo.– Oye...
—¿Mmh?
Lo miró fijo y amenazante, Lee temió lo peor pero entonces habló —¿Cómo es eso de que tienes novio y no me dijiste?
—Oh oh.
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—Bien, este es el plan. Irás allá, le preguntarás la hora dándole un guiño y apoyándote en la pared con un pie fuera, luego-
—No, ugh tú y tus planes. En mi opinión chico listo, sólo debes acercartele por detrás, tomar su cintura, besar su cuello, susurrarle algo caliente y ya después-
—Iugh son unos depravados.–bufó el otro y se acercó al moreno tomándolo por los hombros.– Mira chico, si quieres conquistar a alguien como Kim Seokjin, no debes hacer más que coquetearle, adora eso. Pero no de la forma que estos ridículos te enseñan, hazle coqueteos que se vean románticos y no como insinuaciones sexuales.– miró mal a los dos detrás suyo quiénes se encogieron en su lugar apartando la mirada.– ¿Bien?
—Pero amh... Es que yo y... Se-seokjin ya umh estamos algo así cómo... juntos. Llevamos viéndonos un tiempo y huh... incluso nos besamos.
—Espera ¿qué?– los tres lo miraron boquiabiertos, no esperaban que aquél distraído chico que no dejaba de ver a Seokjin en clases y en el receso apoyado en los casilleros, ya tuviera un amor con él. Además, era Seokjin, aquél chico le mencionabas un corazón y podía hablar de cómo prenderlo fuego.– Pero son... ¿novios?
Pero siempre existe aquella persona que puede ablandar los sentimientos, tarde o temprano, pero llega. Y para Seokjin llegó, y amaba y adoraba a Namjoon, no pensaba dejarlo ir.
—En realidad umh, no.
—Genial! ¿Tienes algún plan para proponérselo? Podemos contribuir, no sabes cuántas parejas hemos unido aquí, somos equipo cupido.– Jackson alegó y los chicos rieron algo avergonzados por las poses y caras ridículas que éste hacía mientras la gente pasaba por el pasillo mirándolo extraño o riendo.
—Huh gracias, pero no gracias. De hecho... ya sé exactamente cómo.
—Bien, ¿podemos ayudar un poco? Ya nos caes bien y además, ésta historia de amor es más interesante que las novelas de la abuela o, mi vida.
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¿beauty? © namjin
FanfictionSeokjin se prometió ser duro y no volver a confiar en el amor luego de haber sido tan lastimado, sin embargo, aquél tierno y peliblanco chico inteligente, voltearía su mundo e ideas de un día para otro. Namjoon amaba el cielo, y Seokjin lo amaba a...