Manoseado Quede

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—NARRA SEDRIC—

La verdad era esa, yo simplemente no creía nada de lo que decía Cameron.

Decirme a mi, en mi cara, ¿que no era gay?, aja si como no, yo no soy estúpido y si algo me molestaba de sobre manera era que me mintieran y aun más que fuera en mis narices.

Pero aun más que eso que me dijera ¿que no estaba listo para contarme?, entonces eso me lo decía todo.

El verdaderamente se había acostado con un hombre y no me quería decir ¿porque?, por marica, si por puto empollon que se creía princesa la cual no estaba lista para contarle a su amigo sobre su primera ves.

A estas alturas la sangre me estaba hirviendo y explote aún más cuando vi como era que Cameron estaba por salir de aquí, como si esto no fuera nada pero no, yo no estaba dispuesto a dejarlo ir así como así, no, simplemente no.

Di tres zancadas lo suficientemente grandes para alcanzar a Cameron y de inmediato lo tome de los brazos y manos para acorralarlo contra el escritorio dándome así una vista..., dios mio.

Me reí por lo bajo y después le hable en el oído.

Sedric—odio no saber que es lo que pasa pero lo que más odio es que me quieran ver la cara de idiota...
Esta bien no me digas, yo lo sabré por mi cuenta —

Estaba por hacer algo enserio muy loco pero ya que mas daba, si algo tenía Cameron era que después de esto podía pedirle disculpas y el las aceptaría de inmediato, sonaría feo esto pero el enserio era muy fácil de manipular.

No lo pensé nada y me puse a observar tremenda vista que tenía enfrente mío.

Mis ojos se movieron por toda la silueta de Cameron degustando esas curvas que se formaban gracias a que el hacía ejercicio, su cuerpo trabajado, Dios, no le pensé y subí la playera que traía puesta dejando ver aún mejor el tremendo cuerpo que se cargaba mi amigo, ahora entendía porque se lo habían cojido y el porque muchos chicos querían sostenerlo.

Pase una de mis manos delicadamente por su silueta la cual se formaba por su cintura lo que lo hacía lucir de cierta forma bastante esbelto pero empecé a bajar aún más mi mano asta que se detuvo en la espalda baja y si bajaba aún más entonces lo sabría y estaba dispuesto a descubrirlo.

Tome el pantalón deportivo que llevaba junto con sus bóxer y estaba dispuesto a bajarlos cuando Cameron comenzó a forcejear para poder salir de mi agarre pero eso era imposible, yo era mucho más fuerte que el pero algo que no me esperaba era que comenzará a sollozar.

Cameron— agh mmgh~ por.. Favor gr~ detente (empieza a llorar)—

Cuando terminó yo me quedé un momento sin hacer nada procesando esos sonidos los cuales salieron de su boca y no, esos no habían sido jadeos, no señor, mi querido amigo estaba jimiendo por sentir mis manos sobre el y el era consiente que si yo hacía esto su secreto saldría a relucir pero nada más, el realmente no quería que yo me detuviera.

Antes de bajar su pantalón primero acaricie un poco su trasero, era redondo, muy redondo ahora que me daba cuenta.
Por impulso empecé a estrujarlo y la sensación enserio era muy agradable, era moldeable a de mas se podía sentir incluso sobre la tela que estaba suave.

Como era de esperar Cameron comenzó a gemir cada ves que apretaba su trasero pero no decía nada y de echo haciendo esto no hiba a lograr nada o saber lo que quería saber o sea sacarle la verdad pero creo que esto lo estaba haciendo más porque quería, me estaba calentando.

Sedric— ¿así fue como te tocaron? —

Quería molestarlo un poco.

Cameron no contestó, tan solo siguió gimiendo, gemidos que no eran más que sexis y muy obscenos, él como movía su parte baja, maldición, esto me estaba volviendo loco.

Ahora sin siquiera una pizca de gentileza baje de forma agresiva su pantalón junto con su ropa interior dejando al aire su lindo y redondo trasero, se veía tan respingon el como salto después de que saliera de los pantalones, parecían bombones.

Sedric— o ya veo... ¿Entonces el fue gentil?, no dejo ninguna marca pero si que te follo con fuerza, que drástico jajaja—

No esperaba a que Cameron respondiera pero lo hizo.

Cameron— amhg~no~.. Te equivocas~ agh—

No lo deje terminar pues me empecé a restregar contra el, mi pene estaba duro y necesitaba ser atendido y sinceramente escuchar a Cameron no era lo que quería, lo que quería en estos momentos era su cuerpo y más en especifico su trasero.

Sedric— no me importa Cameron así que será mejor que te mantengas callado y no intentes nada estúpido porque no voy a detenerme —

Y bueno de aquí en adelante todo hiba a ser porque quería y ya ni si quiera me importaba saber la puta verdad, lo único que quería ahora era estar dentro de mí amigo.

Masaje una de las nalgas de mi amigo y junto con ese masaje la estaba estrujando mientras la separaba de la otra, estaban muy juntitas cosa que se veía tremendamente sexi.
Me daba cosa admitirlo pero sin lugar a dudas era el mejor trasero que había visto.

Subí una de mis manos lo suficiente para después dejarla caer sobre el trasero que de inmediato se torno de un color rojo brillante y punzantes, wow, volví a soltar otro golpe sobre estas ocasionando que Cameron soltara un gemido que no demostraba nada más que placer, el si que lo estaba disfrutando así que volví a soltar otra y otra y otra asta que su trasero quedó totalmente rojo, no mas bien de un color carmesí donde no había tenido ni un mínimo de consideración al momento de azotar lo, aun que sinceramente yo esperaba que el llorara pero no lo hizo en ves de eso el solo gimió inumerables veces, cosa que me decía que le estaba encantando.

Ahora seguía lo siguiente, algo que podía cambiar la relación entre Cameron y yo pero ¿que mas daba? , como había dicho antes, bastaban con unas simples disculpas para que todo volviera a la normalidad así que no hiba a perder nada por meterle mi verga a Cameron, mas bien hiba a terminar ganando.

Bueno, puse mis dos manos en cada cachete de sus rojas pompis y las separe lo suficiente para poder ver su ano.
Me agache un poco para tener una mejor vista y por alguna razón sentí cierto tipo de disgusto al ver que su ano se veía hinchado, eso quería decir que el verdaderamente había cogido, maldición, esta maldita puta.

Sedric—¿entonces si me mentiste?...
Responde ahora Cameron... Responde—

El no decía nada tan solo jadeaba donde intentaba recuperar el aliento, se escuchaba muy agitado pero yo necesitaba que el me respondiera pero no podía esperar tanto, no podía simplemente dejar escapar esta oportunidad.

Sedric— okey..., no me digas entonces—

Saque mi pene de mi pantalón y como era de esperar estaba erecto y muy hambriento de comerse tremenda carne.

Sabia perfectamente lo bueno que soy en el sexo y lo grande que es mi polla asi que no me sentía amenazado ni mucho menos, me lo follaria aún mejor que el hombre con el que se había acostado.
No sólo le dejaría temblando las piernas, no sólo lo aria gemir al momento de estirarse, no, no, no, yo dejaría aún mejor mi huella en el.

Tome mi gran estremidad y la apunte directo a la entrada de mi amigo y empecé a presionar dispuesto a entrar de una sola embestida en el pero si no fuera porque Cameron se volteo y me pateó haciendo que yo saliera de mi ensoñación estaba seguro que en estos momentos estaría sintiendo sus paredes anales apretar con fuerza mi pene pero lamentablemente eso no estaba pasando.

En ves de eso estaba ahí parado tocando un poco mi estómago donde Cameron me había golpeado y el estando de vuelta mirándome con miles de lágrimas en sus ojitos verdes.

Cameron— ¿quieres la verdad?
Esta bien, voy a decirte la verdad—





























Mi SecretoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora