Amor prohibido de un estudiante

Capitulo 26

Al día siguiente Óbito despertó y se llevó la bonita sorpresa de que Deidara dormía tranquilamente encima de su pecho, era algo tierno verlo así se veía hermoso tenía un leve sonrojo en sus mejillas que lo hacian ver tierno, eso era lo que le gustaba a Óbito pero por desgracia eso jamás volvería a pasar sería la última vez que ellos estarían juntos, eso entristecía su corazón.

Pero no había de otra tenían que hacerlo además de eso Deidara era menor, y por su bien era mejor que esa relación terminace aquel día, pero hubiera preferido que terminara de otra manera pues no quería hacer sufrir al rubio, no quería verlo triste pero ese día metió la pata jamás olvidaría su angelical rostro lleno de lágrimas mientras ponía su mano en su pecho.

Deidara abrió los ojos y miro a Óbito y sonrió, pues le había gustado esa noche la había disfrutado mucho.

O: buenos días Dei cómo dormiste? *Le dijo con una sonrisa sincera*

D: dormí bien, claro con el tiempo que me dejaste dormir pude descansar *sonrío con ternura*

O: *beso la frente del rubio mientras le acariciaba su espalda* me alegro que hayas descansado Dei

D: *le dio un beso en el pecho mientras recostaba su cabecita en su pecho* como quisiera que esté momento fuera eterno....

O: *miro al rubio mientras seguía acariciando su espalda* si mi Dei, yo igual quisiera que esté momento fuera eterno, que ambos nos pudiéramos quedar así....

D: no importa, bien sabía que algo no era eterno como decía Sasori antes *entre ratos acariciaba el pecho del mayor*

O: pero aún así podemos quedarnos un rato más así *beso la frente del rubio*

D: *lo miro y se sonrojo al resivir el beso* pero no quiero que tengas problemas con tu esposa...

O: *puso un dedo en los labios del rubio (🤫)* shhh tranquilo Dei... Le dije a Rin que iría a visitar un familiar mío ella se lo creyó además le dije que si tardaba o llegaba al día siguiente era por qué me había quedado a dormir en la casa de mi familiar

D: aún así.... Bueno pero está bien no importa, si quiero quedarme un poco más así contigo *sonrío mientras seguía arriba de él*

O: se que hice mal.... Pero por ti haría cualquier cosa mi Dei... Lo que tú me pides son ordenes para mí *acariciaba el cabello del rubio*

D: Óbito.... Hay veces que dudaba de tu palabra... Pero con lo que pasó ayer se que dices la verdad..

O: hay mi Dei, claro que digo la verdad cuando digo que yo haría cualquier cosa por ti es por qué enserio lo haría *beso la mejilla del rubio*

D: está bien... *Sonreía un poco*

O: te amo mi Dei.... Tu eres el único que puede despertar sentimientos en mi.... *Abrazaba con fuerza al rubio*

El rubio solo sonreía al escuchar eso, pero bien sabía que cuando naciera el bebé el se olvidaría de él y se enfocaría más en Rin y en su hijo, y el quedaría solo en el olvido quedaría solo en una imagen del pasado, mientras Óbito lo abrazaba Deidara derramaba algunas lágrimas al pensar todo eso.

Derramaba lágrimas que caían en el pecho de Óbito, este se dio cuenta y miro al rubio al principio no se atrevía a preguntarle que le pasaba pues era obvio, en sus hermosos ojos azules se podía ver su dolor y Óbito era el culpable pero después de darle vueltas al asunto decidío preguntar.

O: Que sucede mi Dei? *Lo miro confundído*

D: quisiera que lo nuestro no tuviera final.... Quisiera seguir contigo, quisiera poder hacerte feliz.... Óbito yo te amo mucho pero no quiero hacerle daño a tu esposa *bajo la mirada mientras empezaba a llorar*

O: lo sé.... Mi Dei... Perdoname si yo no hubiera hecho nada.... Ahora estarías siendo feliz, no tendrías por qué aferrarte aún amor impossible *se sentía mal por el rubio, pues le había hecho daño aún hermoso ángel*

D: no importa.... Solo quiero que seas feliz... Y trates de hacer feliz a Rin... *Decía triste y con voz quebrada*

Óbito solo lo observo más no se atrevió a contestarle, se sentía muy mal había ilusionado aún hermoso ángel había metido la pata pero ya no había nada que hacer, solo les quedaba disfrutar de ese último momento en el cual estarían juntos una vez más.

Mientras tanto en la casa de Sasori:

Se había levantado temprano a preparar el desayuno, aún no mejoraba su salud pero era algo soportable miro su reloj no era tan tarde ni tan temprano, no tenía planes para ese día solo se quedaría tranquilo descansando en su hogar.

Sasori tomo una taza de café y dejo de hacer el desayuno que aún no había empezado hacer, pues no tenía ganas de comer en la mañana tomo su taza de café y fue a sentarse en el sillón hasta que su celular empezó a sonar.

Sasori tomo su móvil y miro y era una llamada de Rin la esposa de Óbito, quien sabe que estaba pasando se le hacía raro que aquella mujer le llamara, casi nunca hablaban pero de todas maneras apesar de sus dudas decidió contestar.

S: *contestó la llamada* bueno?

R: buenos días Sasori perdona que te moleste, pero es que quería preguntarte si de casualidad Óbito no está contigo? *Pregunto algo preocupada*

S: no, el no está conmigo por qué?

R: es que desde ayer en la noche salió, pero hasta ahora no ah regresado

S: pero no te dijo a dónde iría?

R: si me dijo que iría a visitar a un pariente y que tal vez llegaría tarde, pero sospecho que no fue a casa de ninguno de ellos *contestó la mujer con angustia*

S: tranquila Rin, no pienses mal de él tal vez si este con alguno de sus parientes, mira no te preocupes de mas y oye ya intentaste comunicarte con el? *Todo esto empezaba a olerle mal*

R: si ya lo intente pero quizás tiene su teléfono apagado por qué no entran mis llamadas y a mí me tiene preocupada Sasori *difinitivamente todo parecía que cobrar un poco de sentido*

S: bueno Rin, ahora mismo empiezo a buscar a Tobi no te preocupes yo lo buscaré y lo llevaré a casa *dijo para consolar a la mujer*

R: enserio? Gracias Sasori pero ya te sientes mejor? No quiero que te pongas en riesgo por tu salud

S: nah, ya me siento mejor no te preocupes mujer mi enfermedad no era nada grave así que tranquila yo buscaré a tu esposo

R: está bien Sasori muchas gracias enserio, bueno espero que lo encuentres

S: no te preocupes lo encontraré tu solo estate tranquila

R: está bien Sasori

S: bye

R: bye *colgó la llamada*

Sasori se levantó y fue a su habítacion a cambiarse de ropa, y al parecer había una rubia razón por la cual Óbito no había llegado a casa esa noche, y Sasori estaba planeando buscar a esa rubia razón por qué sabía que estaría junto con Óbito, y de paso aprovecharía de darle un concejo a Óbito y a Deidara antes de que todo eso pasara a más.