Deidara camino hasta la salas de juntas y naturalmente allí estaba la oficina de Óbito, que en la puerta tenía su nombre al llegar tocó la puerta esperando a que le dieran permiso para pasar.
O: Adelante pasé *buscaba entre sus cosas*
D: *entro en la oficina* disculpe que venga Profesor pero se le olvidó esto en el salón *dejo los documentos en su escritorio*
O: ufff gracias Deidara lo estaba buscando por todos lados gracias por encontrarlo y traerme lo *decía algo aliviado*
D: un placer, bueno me tengo que ir *se dio la vuelta para salir*
O: Deidara? *Le llamo*
D: *se detuvo y se dio la vuelta* mandé profesor?
O: Dei que tenías después de que te llame la atención? *Miro al rubio*
D: ah.... No era nada no se preocupe *sonrío*
O: no me engañas a ti te pasaba algo dime qué fue lo que pasó? *Se acercó al rubio*
D: nada solo tenía comezón en la vista *bajo la mirada*
O: está bien Deidara ya te puedes ir *volvió a su escritorio*
Deidara salió y se fue en dirección a su salón, enserio? El profesor se había dado cuenta de lo que le pasaba Acaso Óbito lo miraba cuando el estaba distraído? O será que le importaba? Esas eran las preguntas que se repetía el rubio en el camino, al llegar a su salón entro y se sentó en su lugar.
H: oye rubia donde andabas? *Le susurro a su amigo*
D: estaba en la oficina del Profesor Óbito *sonrío*
H: que paso? Hiciste algo? *Pregunto con un tono pícaro*
D: no seas cochino claro que no, mira al rato te explico a la hora del almuerzo *se dio la vuelta*
Hidan solo asintió y los dos prestaron atención en la clase ya todos se habían presentado, pasaron tres horas de clase y llegó la hora del almuerzo el rubio salió para comer su almuerzo y claro el religioso quería una explicación de lo que pasó, así que busco a su amigo.
Al encontrárlo se sentó a lado de su amigo que estaba comiendo su almuerzo con tranquilidad.
D: que? *Míro al religioso*
H: cuéntame qué pasó cuando saliste a la hora del profesor Iruka? *Miro a su amigo*
D: nada solo fui a dejarle los documentos al Profesor Óbito pero nada fuera de lo normal *volvió a mirar su almuerzo*
H: seguro que no pasa nada? Estás seguro?
D: solo.... Creo que se dio cuenta que estaba llorando por qué me llamo la atención *se puso rojo de la vergüenza*
H: *se tapo la boca para aguantar la risa cuando se controlo míro a su compañero* es enserio? Te pusiste a llorar?
D: si si me puse a llorar tiene algo de malo? *Miro a su amigo*.
H: no no tiene nada de malo solo que es extraño *sonrío*
D: mira quién lo dice el que se puso a llorar y hacerle drama al novio solo por qué le hablo fuerte *se defendió*
H: oye!! Yo tengo mis motivos tu no tienes ninguno solo lloraste por qué si *se cruzó de brazos*
D: bueno pero él se dio cuenta y me preguntó que me pasaba yo le dije que nada *un sonrojo se hizo presente*
H: y que paso? *Noto el sonrojo de su amigo*
D: creo que se preocupo por mi *suspiro mientras miraba a la nada*
H: Deidara mi rubia oxigenada más vale que no te ilusiones ese hombre no es para ti además yo creo que el profesor a de estar casado *asintió mientras le daba una probada a su almuerzo*
D: tu crees que el esté casado? *Se le quitó la sonrisa de su rostro*
H: yo digo que si deberías preguntarle al Maestro Sasori o a él mismo no creo que se niegue a responder esa pregunta *siguió comiendo de su almuerzo*
D: tienes razón después le pregunto si lo está o no *siguió comiendo su almuerzo*
Al terminar su almuerzo los chicos regresaron al salón fue cuando tocaron el timbre, y empezaron de nuevo las clases pero el rubio no lograba concentrarse en la clase pues la pregunta de si El profesor estaba casado? No lo dejaba en paz.
Pasaron las horas de clase y el rubio no podía concentrarse en nada.
H: parece que va a llover *miraba el cielo desde una ventana*
D: al parecer *miraba su cuaderno*
Cuando termino la clase naturalmente estaba empezando a llover así que los chicos salieron rápidamente del colegio, llegaron hasta el departamento del rubio y decidieron esperar a que pasará la lluvia el religioso observaba como las gotas de lluvia caían en el cristal de la ventana.
Era algo que le gustaba a observar a él y al rubio quien creía que así como la lluvia limpiaba la tierra, podía limpiar el alma de las personas era lindo mirar aquellas gotas de lluvia.
H: oye no que tú hermana Kurutsuchi iba a venir a estudiar? *Pregunto pero sin dejar de mirar la lluvia*
D: no ella aún no vendrá hasta el próximo año *soltó un suspiro
H: ah jeje que bueno *sonrío mirando la lluvia*
D: mejor para mí por qué así podré hacer mis cosas sin preocuparme de que mi hermana me vea o me diga cosas *hecho la cabeza hacia atrás*
H: jajajaja ya me lo imagino
Despues de varios minutos más paso la lluvia, y eso indico de que el religioso ya se tenía que ir antes de que volviera a llover, y más seguro que su madre estaría muy preocupada por el y quién sabe cuántas oraciones ya le estaba haciendo a su Dios Jashin, conociendo a su madre era mejor regresar pronto.
Así que el religioso salió del departamento del rubio y se fue a su casa, Deidara se quedó en el sillón pensando en lo que realmente sentía en su corazón, al parecer todo eso ya se había vuelto una obsesión eso pensaba el pues como que sentía que deseaba a su profesor, pero eso no era nada bueno tenía que tratar de hacer aún lado todos esos sentimientos y pensamientos que tenía.
Dejarse de hacer ilusiones y fantasear con esas cosas, no debía de pensar en nada de eso y tratar de olvidar.... Pero... Cómo iba hacer que su corazón dejara aquel sentimiento de un lado? Cómo podía sacar de sus pensamientos a Óbito? El había entrado en su corazón y no sabía cómo sacarlo.......
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Amor prohibido de un estudiante
FanfictionAquí habrá Yaoi uwu pero también habrá algunas decepciones de parte de Óbito, algunos tal vez van a criticar pero al final les va a gustar. ADVERTENCIA: esta historia es 100% mía bueno acompañe me a ver está linda historia