Absurda Tradición ©

Dieciséis

Capitulo 16:

Mordiscos, succiones y lametones. ¡Combinación perfecta amigos!

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—Así que Leslie, ¿ya me dirás de donde conoces a mi primo?

Alessandra fija sus ojos en mi y no tengo idea de que responderle con exactitud.

—Estábamos juntos en un club —decido responderle. Y es la verdad, o una parte de ella.

— ¿De mitología? —Asiento y una sonrisa socarrona surca sus labios—. Entiendo...

Mi ceño se frunce no entendiendo a que se debe su expresión, pero lo dejo pasar y termino de recoger mis cosas. La profesora ya ha dicho que podemos salir al receso, lo que me tiene un poco inquieta, porque la verdad no sé con quién sentarme. Mi hermano está descartado, por supuesto. No puedo repetir lo mismo que el año pasado, debo cambiar mi rutina.

— ¿Te sentarías conmigo en el almuerzo? —le pregunto a Alessandra, llenándome de valor.

—No tienes ni que preguntarlo. A partir de ahora soy tu nueva garrapata.

Eso me hace reír —Okey...

— ¡Les! —Alexis se aproxima a mí—. Oye quería saber ¿te sentaras con nosotros en la cafetería? Tu hermano me ha dicho que te escolte hasta allá —rueda sus ojos verdes al decir lo último.

Abro la boca para responder pero alguien se me adelanta —Ella estará conmigo, pero gracias.

Alexis observa a Alessandra y luego a mí, sé que quiere que confirme lo que ha dicho mi nueva amiga.

—Estaré con ella, gracias Alex.

Asiente dubitativo —Espero Lexter no me mate.

Y yo que a mí no me aniquile.

Alexis se despide de Alessandra con un asentimiento y de mí con una sonrisa, y sin decir más desaparece de mi vista.

— ¿Tienes un hermano? —inquiere mi nueva amiga, curiosa.

—Un mellizo.

Me sorprendo al no ser la única en responder y volteo a ver a Hackett quien se ha situado junto a mí. Me regala una sonrisa.

—Muy bien, me molesta el no saber el chisme completo, pero algo he intuido. Y como buena prima y amiga que soy, los dejare solos —Alessandra toma su bolso, nos da una última mirada y se aleja—. ¡Los espero en la puerta!

Mi corazón se acelera al saber que estamos solos y trago grueso cuando se coloca frente a mí.

—Hackett —logro pronunciar, en voz baja.

—Leslie.

—Me alegra verte.

Me permito detallarlo mejor un instante. Su rostro esta sereno y su mirada cálida no ha cambiado en absoluto. Sigue siendo más alto que yo, sigue estando igual de guapo y causando estragos en mi organismo como la última vez que lo vi.

—También te extrañe dulzura.

Y al terminar su oración se acerca a mí y me envuelve entre sus brazos. Un suspiro silencioso me abandona al sentirlo contra mí, y me permito disfrutar del abrazo. Hasta que lamentablemente debo romperlo, porque necesito respuestas.

— ¿Qué haces aquí? ¿Cómo es que estas en este instituto?

Una sonrisa surca sus labios —Tengo contactos, ¿recuerdas?

— ¿Estás aquí por mi? —y me siento tonta al preguntarlo, pero debo hacerlo. Esa duda me carcome el cerebro desde que lo vi.

—Sí, estoy aquí por ti —sonríe—. Además de que debo terminar mi último año claro, pero, qué mejor que hacerlo en el mismo instituto que tú.