39. Té bajo las estrellas

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La voz de un hombre que vociferaba a todo pulmón y las risas de este mismo eran los sonido que invadían el sombrío castillo de Kamino.


_Oh, vamos, rey de fuego, observe! Observe! Observe los cuerpos calcinados, observe los hogares destruidos, observe la devastación!! De un buen vistazo a todo!!!... Puede ver en lo que se ha convertido su hermosa capital?! Puede ver lo que usted le ha causado a su amado pueblo?! Puede verlo? Acaso puede verlo? Hahahahaha, sé que puede, sé que entiende. ... Ahora dígame, puede también sentir el sufrimiento de todos ellos? Puede hacerse responsable de todo su dolor?! Dígame! Dígame! Hahahahaha!!!... Ah~,... mire, solo mire el desastre del cual es culpable, mire lo que su soberbia a causado,... no es terrible? No es tan atroz?... Pues si, lo es, claro que lo es. Puede rogar a los dioses por perdón si desea, pero ellos no lo eximirán, ya que tal terrible pecado que ha cometido... es imperdonable._
El joven hombre de negros cabellos se deleitaba con el tormento que le causaba a su "ex-amigo".

_..._
/Lo lamento.../
La inmensa culpa devoraba al monarca de Endeavor.
/Lo lamento tanto./
Agotado cerró sus ojos, deseando no ver más las imágenes proyectadas sobre el liquido contenido en gran plato dorado que tenía frente a él.

_No, no, no, no, NO!!! Te dije que miraras! Que miraras, pedazo de mierda!!!_
Agarrándolo de sus rojos cabellos metió el rostro del pobre hombre en el agua del recipiente.

_..._
El fornido mago de ojos aguamarina tan solo se mantuvo en silencio, soportando sin quejas aquella humillación sin final. No tenía voluntad o energía para darle pelea a ese vicioso y despiadado sujeto, y tampoco podía, acto tras acto de degradación, evitar dejar su mente perderse en divagaciones.

Qué habría sido de sus hijos? Acaso seguirían con vida?, Qué habría pasado con sus soldados? Cuántos de esos muchachos que entrenó personalmente habrían encontrado su muerte esa noche?... No lo sabía, no sabía nada, después de todo, con el fin de atormentarlo lo único que ese cruel joven le había mostrado era la vista de una ciudad pintada de gris y el sufrimiento de los más desdichados sobrevivientes;... dejando a su imaginación el destino y estado de todos los demás.

_..._
/Niños,... mis niños,... perdonen a este inútil, inútil, inútil viejo que ha vuelto a fallarles./
Restringido de movimiento, con sus poderes sellados, con el corazón roto y guardando en su alma enorme preocupación por su familia y amigos: el triste hombre se encontraba totalmente enajenado de la realidad.

_Oh, vamos, Enji! No dirás nada? Te quedaras callado como un maldito cadáver?! Dónde quedó tu arrogancia! Dónde quedó tu vanidad?! Vamos, grita, insulta, maldice!!!_
/Desespérate... y entretenme un poco más./

_..._

_Shindo!!!_
De improviso una mujer azotó la puerta de aquella oscura y fría habitación.

_... Perra ruidosa, no ves que tengo invitados importantes a los cuales atender?_
/Esta chica es demasiado molesta./
_Ve y ladra a otra parte si quieres conservar esa venenosa lengua que portas._

_Tendrás que soportar mis ladridos porque no pienso dejar pasar est-...!_

_... Cara redonda?..._
Suave y temblorosa, la voz del cenizo llamó la atención de la recién llegada.

_..._
La joven volteó entonces hacia el llamado, topándose con el rostro desconcertado del menor, pero no le dio más que un breve vistazo antes de centrarse nuevamente en el sujeto a quien había venido a buscar.
_... Ya vi los círculos mágicos que dibujaste, sé lo qué estas planeando hacer!_

𝐋𝐚𝐳𝐨𝐬 𝐃𝐞 𝐂𝐥𝐚𝐯𝐞𝐥   [𝔇𝔢k𝔲k𝔞𝔱𝔰𝔲]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora