capitulo I

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Agarró su maleta de manera firme y comenzó a caminar lo más rápido que pudo, pensaba que de esta manera tendría menos tiempo de analizar la decisión que había tomado, la que cambiaría su vida para siempre. El guardia que se encontraba en la puerta le solicitó los papeles para abordar el avión, ese avión que se dirigía a Inglaterra donde ella comenzaría desde cero.
- Necesito su identificación - dijo el hombre barbudo que se encontraba frente a ella, tenía un aspecto intimidante y fuerte como si pudiera derribar a diez hombres el solo

- Venus Decksheimer - pronunció el hombre en una voz rinca y la miró para comprobar que eran la misma persona - Bonito nombre, poco común.

Venus sonrió de manera amistosa ya que estaba acostumbrada a escuchar esa frase - Gracias, tengo padres muy creativos - Tomó sus papeles y caminó por el pasillo largo que la llevaría a su nueva vida.

* 10 años después * 🎧

- Señorita necesito su identificación - Repitió por tercera vez la mujer que estaba en frente de ella con una irritada voz y él ceño más que fruncido, interrumpiendo el recuerdo que invadió la cabeza de Venus, era la misma situación de diez años atrás, el mismo vuelo, pero esta vez de vuelta al lugar que alguna vez ella llamo su hogar.

Avanzó por el largo pasillo que dirigía a la entrada del avión y a medida que daba cada paso sentía que el aire le faltaba, en parte podía ser porque odiaba los aviones, la idea de estar en el aire sin ningún soporte a la tierra simplemente no tenía sentido para ella o quizá porque odiaba la idea de volver al lugar que tanto dolor le causó 《o ver a la persona que causó ese dolor》
Rápidamente apagó la voz de su cabeza. Estaba decidida a hacer el sacrificio ya que su mejor amiga sólo se casaría una vez en la vida, bueno ese era el plan, y ella no se perdería este momento por nada del mundo, ni por nadie.

Luego de unas cuantas horas de vuelo la gran ciudad se comenzó a ver desde las alturas, reconoció de inmediato la estatua de la libertad y el empire state, habían pasado diez años y esta seguía siendo su ciudad favorita en el mundo, aunque estuviera cargada de recuerdos, algunos buenos y otros era mejor dejarlos bajo llave . Los nervios aumentaba con cada metro que descendía el avión, pero ya era muy tarde para arrepentimientos

-Bueno, bienvenida a casa Venus- dijo para ella misma en un pequeño tono de voz mientras miraba una vez más por la pequeña ventana del avión.

Al llegar al aeropuerto de NY se dirigió al lugar de equipajes para buscar su maleta, agradeció que no se encontrara tan lleno a pesar de que había bastante gente sabía que podia ser peor. Luego de diez minutos pudo agarrar la suya y caminar a la salida. El aeropuerto de NY siempre era un caos lleno de gente, buscó como pudo la rubia cabeza de Hanna, su mejor amiga, pero su estatura no ayudaba a cumplir la misión. Caminó a unos asientos y sin pensarlo dos veces subio a ellos para tener mejor vista, repasó el lugar con sus marrones ojos y por fin pudo encontrar a Hanna.

- Vis-vis! - gritó la rubia con la mano en alto para que Venus no la perdiera de vista.

Corrió donde ella y antes de que pudiera decir algo la abrazó fuertemente. Venus soltó sus maletas y respondió al saludo con igual entusiasmo

- Han-han! - dijo mientras saltaba junto a su amiga.

No les importaba que la gente las mirara de manera extraña, habían pasado cinco años desde que Hanna la visitó en Inglaterra durante unas vacaciones y desde ahí que esperaban ese abrazo.

- No puedo creer que por fin estés acá ¿Qué quieres hacer hoy? - preguntó la rubia mientras la rodeaba con su brazo sobre el cuello y la ayudaba con una de las maletas
- En este preciso instante comer, siento que me saldrá un demonio del hambre que tengo - respondió mientras se apoyaba en su amiga de la misma forma

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