capitulo IV

56 29 8
                                    

La temperatura había disminuido y las hojas que se desprendían de los árboles dejaban ver con claridad que el otoño ya estaba aquí. Venus tomo un sorbo de su té y revisó su teléfono una vez más, al comprobar que no había respuesta marcó el número de Hanna y luego de dos tonos la rubia contesto

- lo siento, lo siento, estoy llegando lo prometo solo cinco minutos

Venus resoplo ante la respuesta
- Esta bien, pero si no te veo entrar por esa puerta en cinco minutos cancelaré nuestra cita - dijo usando un tono de advertencia.

Cinco minutos después Hanna apareció por la puerta del café

- Que tal guapa - saludó guiñando un ojo

Venus no movió ni un músculo de su cara - Es mi segundo té
- Ay Vis vamos, me conoces, sabes que la puntualidad no es exactamente mi fuerte - Hanna puso carita de perro abandonado, sabía que con Venus eso no fallaba
- Esta bien te perdono, pero los siguientes las pagas tú
- Es un hecho cariño - dijo mientras la abrazaba.

Luego de unos minutos una chica llego con un café para Hanna, otro té para Venus, unos panecillos y muffins

- dios tengo tanta hambre
- Tu siempre tienes hambre Vis
- Es verdad - respondió mientras comía un pedazo de muffin - ¿Que sucede? - preguntó al notar que su amiga la miraba fijamente

- Nada - tomó su café y dio un sorbo - solo espero los comentarios sobre anoche
- Anoche fue entretenido, me encantó poder verlos a todos - Venus jugaba con la servilleta evitando el contacto visual con su amiga.
- ¡Ya lo creo! - dijo Hanna en tono burlón.

La miro con ojos fulminantes - sabes a lo que me refiero
- claro que lo se!
- voy a terminar esta conversación.

Hanna rodo los ojos - ¡Vamos Vis por favor! ¿No me vas a contar que hablaron Thomas y tu ayer?

Venus abrió los ojos como platos
- no hablamos de nada
- James me dijo que los encontró en la sala muy juntitos hablando en secreto.

Abrió la boca y frunció el ceño ante el comentario de Hanna - ¡QUE! eso no fue... esta fuera de contexto
- Si tú lo dices
- Por cierto ¿Por qué nunca me contaste que Thomas se había casado?
- Porque no lo hizo.

La respuesta sorprendió a Venus, un sentimiento juguetaba en su interiro al escuchar esas palabras pero rápidamente lo desecho- ¿Y la mamá de Mia? - dijo con el tono más casual que pudo

- Vis, yo te amo y eres mi mejor amiga, pero no me corresponde a mi contarte esa historia
- Esta bien pero un pequeño resumen
- Vis... lo único que puedo decir es que después de que te marcharas Thomas no lo paso muy bien y eso lo llevo a un camino con personas que no lo beneficiaron tanto, es todo lo que diré, lo siento
- Esta bien, lo entiendo

Guardó silencio un momento analizando como su repentina partida había dañado a los demás
- Thomas me dijo que nos debíamos una conversación.

Hanna casi se atragantó con su café al escuchar la confesión de su amiga
- ¿y tú que le respondiste?
- Nada, que se supone que le debía responder. Nosotros ya tuvimos una conversación
- Vis una carta donde dices que te vas a Inglaterra y no sabes cuando volverás no es una conversación.
- Es que no veo la finalidad de abrir esa herida solo para dar un cierre a un viejo amor
- No fue solo un viejo amor Venus y lo sabes, ustedes se iban a casar, iban a....- entonces se detuvo antes de que las palabras salieron de su boca. Sabía que ese era un tema delicado y en los diez años que habían pasado Venus jamás lo mencionó - lo siento, no quise...
- Esta bien Hann no importa.

Hanna tomo su mano - Sabes que tienes mi apoyo para lo que decidas y siempre estaré aquí para escucharte hablar del pasado o del futuro.

Venus apretó la mano de su amiga en forma de agradecimiento. Hanna siempre había estado ahí para ella incluso cuando tuvo que tomar una de las decisiones más difíciles de su vida - gracias por siempre ser mi persona.

Mil Veces Tu Donde viven las historias. Descúbrelo ahora