Un día de Parque

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El sol entrando por la ventana lo hizo despertar, trató de moverse pero venus se encontraba abrazada a él. La contempló durante unos segundos y luego acarició su cabeza para posteriormente dejar un cálido beso en ella. La felicidad recorrió su piel al pensar que ahora todas las mañanas podrían ser así, con ella en sus brazos. Acarició su pelo con ternura y ella abrió sus ojos léntamente, miró a Thomas y le sonrió

-Buenos días
-Buenos días hermosa

Dejó un beso es su cuello y Venus rió ante las cosquillas que le provocaba

-Quisiera despertar así cada día, junto a ti y llenarte de besos
-Creo que eso me encantaría - respondió mientras enredaba sus brazos en el cuello de él.

Pasaron un par de horas en la cama y luego se levantaron para desayunar, ordenaron un poco las cosas ya que Mia llegaría en cualquier momento.

-¿Que vas a hacer el día hoy?
-Bueno tenía que hacer mis maletas y revisar mi itinerario de viaje, pero creo que no es necesario ya que he cancelado mi vuelo y me quedaré en NY - respondió sonriendo
-Quizá podrías pasar el día con nosotros
-Duermes con una mujer y después la invitas a pasar el día en familia, eso es comprometedor- su tono bromista lo hizo sonreir.

Thomas se acercó y la tomó de la cintura pegandola a su cuerpo, se acercó a su oido y susurró
-Es que tu no eres cualquier mujer

Venus sintió como su piel se erizaba y rió mientras él tomaba su mentón y dejaba un beso en ella.

El sonido de la puerta los interrumpió, Thomas caminó a la entrada para abrirla y encontrarse a su padre y a Mia.

-¡Buenos dias pulga! ¿Qué tal lo has pasado?
-Hola papi, muy bien, hemos visto películas y ¡Venus!

Mia corrió a saludarla en cuanto la vio entrar a la sala

-¡Hola pequeña! - saludó mientras la tomaba en sus brazos
-Venus que bueno verte por acá
-¡Hola Samuel! Gracias
-¿Quieres pasar por un café papá?
-No campeón gracias, tengo que ver unas cosas del trabajo
-Está bien
- Fue un placer verte Venus, de verdad me alegra que estes de vuelta
-Gracias Samuel
-Adios Mia portate bien
-Adios abuelo

Thomas acompañó a su papá hasta el auto mientras ellas se acomodaban en la sala

- ¿te has quedado a dormir otra vez?

Venus abrió los ojos ante la inesperada pregunta
-Mmm.... bueno.... yo.... si, algo así
-Gracias por acompañar a mi papá para que no estuviera solo - dijo con una sonrisa mientras le regalaba un calido abrazo
-No es nada pequeña
-¿Te quedarás hoy con nosotros? Porfis porfis

Negarse a esa pequeña sonrisa y esos ojos azules iguales a los de su padre era una tarea difícil para cualquiera

- Está bien me quedaré ¿Qué quieres hacer hoy?
-Podemos ir al parque a pasear y quizá podríamos patinar, yo nunca lo he hecho pero papá me ha dicho que tu eres muy buena
- La verdad es que cuando vivía acá patinaba bastante, era una de mis actividades favoritas, si quieres te puedo enseñar

La cara de Mia se iluminó ante la propuesta 
-¿De verdad lo harías?
-Claro que si pequeña
-¡Gracias, gracias! Te quiero tanto

La confesión de la niña movió algo en lo más profundo de Venus, un sentimiento que solo había tenido hace diez años cuando vio por primera vez a Louise. Sus ojos se nublaron por un momento ante el recuerdo, acarició la pequeña cabeza castaña de Mia y dejó un beso en ella
-Yo también te quiero pequeña.

El sol brillaba en lo alto entregando un cálido día de otoño, los tres caminaron por el parque mientras reían y jugaban. Mia tomaba las manos de ambos y cada tanto ellos la levantaban para que pudiera saltar. Habían estado ahí miles de veces pero esta ocasión se sentía como si fuera la primera. Un aura de amor los envolvía y daba paso a los lazos que se formaban entre los tres. 

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⏰ Última actualización: Nov 23, 2022 ⏰

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