Los rayos de sol que traspasaban la cortina la hicieron despertar, dio un par de vueltas en la cama embriagándose una vez más con ese aroma que la envolvía y le daban un sentimientode hogar. Abrió los ojos y recordó dónde se encontraba. La casa de Thomas. Tapó su cara con ambas manos al recordar la noche anterior, claramente los límites ya no existían y la idea de volver a Inglaterra ya no le parecía tan interesante. Debía tomar una decisión y rápido antes de que alguien saliera herido.
Se levantó de la cama y caminó hacia el pasillo, todos se encontraban aún durmiendo. Cuándo llegó a la sala principal vio a Thomas recostado en el sofá, se veía tan tranquilo que no pudo evitar acercarse y acariciar su rostro de manera tierna y cuidadosa para evitar que despertara.
Fue a la cocina para preparar desayuno y sorprender a ambos, sacó un par de cosas de la nevera y comenzó a cocinar. Estaba tan concentrada en su receta que no se dio cuenta cuándo Thomas entró al lugar.
Se quedó apoyado en la puerta mirandola con una sonrisa mientras Venus bailaba de un lado a otro en la cocina, pensó en lo agradable que sería tener esa escena todas las mañanas, tenerla a ella cada mañana.
-buenos días - pronunció con una coz ronca
Venus se giró sobresaltada y con algo de vergüenza pensando en cuanto la vio hacer el ridículo mientras cocinaba.
- Buenos días, espero no haberte despertado
- Para nada. Eso tiene un aroma delicioso
- Quería hacer algo especial para ustedes
- Que estes acá ya es es especialVenus lo miró con una sonrisa, no pudo evitar notar su vestimenta sin polera y el cabello todo despeinado. Sus mejillas se ruborizaron ante las imagenes que pasaron por su mente.
Thomas dio un paso hasta quedar frente a ella, tomó un mechon de pelo que caía por su rostro, lo depositó detras de su oreja y aprovechó para acariciar su mejilla suavemente
- Creo que deberíamos hablar de ayer
- ¿ sobre la boda? - respondió tratando de sonar indiferente a lo que él quería conversar, pero en cuanto salieron las palabras se arrepintió - quiero decir la de Hanna y James, no la de nosotros - luego de esto deseaba que un meteorito cayera sobre ella - es decir no hay de nosotros, no... no... - dijo esto último tratando de alejarse de Thomas, pero a él le parecía divertida la situación por lo que decidió tomarla de la cintura impidiendo que se alejara- Me refiero a lo otro que paso después al llegar a acá
- oh esoAntes de que Thomas pudiera decir algo más Mia apareció salvando a venus de la incomoda conversación
-Buenos días pequeña!
-Buenos días - dijo mientras se resfregaba el ojo con su pequeña mano en respuesta a la luz de la mañana
-¿tienes hambre? Prepare hotcakes para desayunar
- si, tienen aroma delicioso
- bien entonces los llevare a la mesa para que comamosLos tres se sentaron en la mesa y entre risas y conversaciones pasaron la mañana. La felicidad de cada uno se podia ver a kilometros. Thomas pensó en cuanto le gustaría congelar ese momento, era perfecto, tenía a las personas que más amaba en el mundo con el y no quería que terminara. El ver a Venus y Mia bailar por toda la sala mientrar reían y jugaban le llenaba el corazón por completo.
- papi papi - dijo Mia mientras corría donde él y se sentaba - ¿crees que Venus se pueda quedar a dormir todos los días?
Ambos se miraron ante la pregunta de la pequeña
- Cariño yo debo volver a mi casa
- ¿ Te vas a ir? ¿No prefieres quedarte con nosotros?El tono de la niña reflejaba la tristeza en la pregunta. A Venus se le partió el corazón ver su carita, estaba pasando justamente lo que Hanna le había advertido. Caminó hacia ella y la tomo en brazos
-Es más complicado que eso pequeña, tengo que volver a mi trabajo y ver mi casa, pero prometo que cada vez que venga a NY te vendre a visitar
- ¿Lo prometes?
-Lo prometoMia la abrazó por el cuello y se enrollo en ella como si no la quisiera soltar más. Venus miró a Thomas pero su lugar estarba vacío. sentía como su corazón se encogió al pensar que le podía hacer daño. La idea de quedarse en NY no sonaba tan mal, muchas cosas habían cambiado en ese viaje, su vida en Inglaterra no era mala y tenía un estupendo trabajo, pero acá se encontraban las personas a las que tantocariño les tenía, este lugar ya no le traía malos recuerdos. Quiza era tiempo de volver a casa.
Una vez que ordenaron las cosas del desayuno Thomas fue a dejar a Venus a su hotel. El camino fue algo silencioso, por más que ella trataba de sacar conversació las respuestas de él eran cortas y precisas.
- Gracias por traerme de verdad no era necesario
- No es nadaVenus dudo un momento, pero luego se acercó y dejó un beso en su mejilla como despedida. Antes de que pudiera bajar del auto Thomas la tomó de la mano
- Sal conmigo mañana
-¿Qué?
- Mañana en la noche a cenar
- Thomas...
-Vis, aun queda una semana, no te voy a dejar ir tan fácil. Solo una cenaSu cabeza daba vueltas sin saber que responder. Thomas estaba ahí arriegando todo para que existiera la posibilidad de tener una segunda oportunidad, pensó que quiza era su momento tambien de arriesgarse.
- Está bien, mañana a las siete
A Thomas se le iluminó la cara con una sonrisa ante la respuesta
-excelente entonces paso por ti mañana a mas sieteSe acercó a ella y le beso la mejilla, Venus rio ante el cosquilleo que le causó y bajó del auto. Mientras caminaba a su habitación se sentía como en una nube flotando en lo mas alto. Se recosto en el sofá repasando cada momento desde el beso en la playa y con cada uno de ellos su corazón latía mas fuerte, la decisión que debía tomar era evidente. Ella quería quedarse en NY, quería reconciliarse con Thomas y quería una vida junto a él y Mia, pero antes de decirles debía arreglar todo para evitar cualquier inconveniente.
El sonido del teléfono la saco de sus pensamientos, lo tomó para ver quien llamaba y el nombre Hanna se encontraba en la pantalla
- ¿Que tal la luna de miel? ¿Ya me extrañas?
- Vis-Vis! Hasta ahora todo ha sido hermoso! Solo quería chequear como iba tu mañana ¿te has aburrido mucho sin mi?
- La verdad acabo de llegar al hotel
- vaya ¿y donde has ido tan temprano?
- A ninguna parte, es que he dormido fuera
-¡¡Venus Decksheimer!! ¿Acaso te has quedado en la cama de quién estoy pensando?
-No! Bueno sí, pero no de la forma en la que piensasSintió el rubor subiendo por sus mejillas una vez más al recordar el casi encuentro en la habitación de Thomas
- No lo puedo creer, quiero saber cada detalle
- Hanna no ha pasado nada, él ha dormido en el sofá y yo en su cama, hoy hemos tomado desayuno los tres, pasamos la mañana juntos y luego Thomas me ha venido a dejar
- Es decir que prácticamente tuvieron una mañana de familia. Vis de verdad estoy emocionada con esto y no quiero que mal interpretes lo que diré, pero debes tomar una decisiónVenus guardó silencio un momento pensando si debería contarle a su amiga que esa decisión ya estaba más que tomada, después de todo era Hanna con quién hablaba, entre ellas no había secretos
-No voy a volver Hann
-¿Qué has dicho?!
-No voy a volver a Inglaterra, es que no puedo, este viaje ha cambiado muchas cosas y mi vida allá no tiene sentido
-Ay Vis me vas a dar un infarto con esta noticiaVenus rio ante la reacción de su amiga, Hanna siempre llevaba todo al límite, pero era una de las cosas que amaba de ella
- No le digas a nadie aun Han, lo debes prometer
- Lo prometo lo prometo
- Bien, quiero solucionar algunas cosas antes y asegurarme de que todo saldrá bien antes de decirle a Thomas.Holaaaa! Espero que esten muy bieeen❤❤ y que les haya gustado el nuevo capítulo, yo siempre feliz de leer sus comentarios ❤❤❤
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Mil Veces Tu
Romansa"El era ese punto intermedio entre el amor más grande que había tenido y el dolor más intenso que nunca le habían causado " ¿Diez años bastarían para olvidar y perdonar?