Capitulo 17: El club de duelo

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Al despertar la mañana del domingo, halló el dormitorio resplandeciente con la luz del sol de invierno, aunque Lyra era muy friolenta le encantaba el invierno. Lyra, Hermione y Ron se fueron temprano al baño de Myrtle para preparar la poción multijugos.

—Soy yo —dijo Harry, entrando.

—¡Harry! —dijo ella—. Vaya susto que nos has dado. Entra. ¿Cómo está tu brazo?

—Bien, por cierto Lyra déjame decirte que Asriel me quiere más.-dijo sonriendo burlonamente mientras acariciaba a Asriel y lo apegaba a su pecho

—Dame a mi gato Potter, ¿que paso campeón? ¿Potter te esta acosando?—Dijo Lyra mientras quitaba a Asriel de sus brazos y ponía su voz mas dulce.

—Yo no lo obligue a nada, ¿no es cierto Asriel? ¿verdad que me prefieres a mí?

—No es cierto, aléjate de mi Potter - Harry había puesto su brazo antes sin huesos en el hombro de Lyra mientras acariciaba a Asriel, Harry ante la reacción de su amiga se empezó a reír.

—Pensamos ir a verte, pero decidimos comenzar a preparar la poción multijugos. —le explicó Ron, después de que Harry y Lyra se pelearan por quien iba a tener ese día a Asriel.—Hemos pensado que éste es el lugar más seguro para guardarla.—Harry empezó a contarnos de que Colin había sido petrificado pero Hermione lo interrumpió.

—Ya lo sabemos, oímos a la profesora McGonagall hablar con el profesor Flitwick esta mañana. Por eso pensamos que era mejor darnos prisa.

—Cuanto antes le saquemos a Malfoy una declaración, mejor —gruñó Ron—. ¿No piensas igual? Se ve que después del partido de quidditch estaba tan sulfurado que la tomó con Colin.

—Hay alguien más —dijo Harry, contemplando a Lyra, que partía manojos de centinodia y los echaba a la poción—. Dobby vino en mitad de la noche a hacerme una visita.

Levantaron la mirada, sorprendidos. Harry contó que Dobby le había dicho que el mandó esa bludger y otras cosas que Dobby le había querido decir pero no pudo.

—¿La Cámara de los Secretos ya fue abierta antes? —le preguntó Hermione.

—Es evidente —dijo Ron con voz de triunfo—. Lucius Malfoy abriría la cámara en sus tiempos de estudiante y ahora le ha explicado a su querido Draco cómo hacerlo. Está claro. Sin embargo, me gustaría que Dobby te hubiera dicho qué monstruo hay en ella. Me gustaría saber cómo es posible que nadie se lo haya encontrado merodeando por el colegio.

—Tal vez es pequeño pero mortal.—Dijo Lyra empujando unas sanguijuelas hacia el fondo del caldero.

—Quizá pueda volverse invisible o quizá pueda disfrazarse, hacerse pasar por una armadura o algo así. He leído algo sobre fantasmas camaleónicos...-dijo Hermione concentrada en buscar explicaciones.

—Lees demasiado, Hermione -le dijo Ron, echando crisopos encima de las sanguijuelas. Arrugó la bolsa vacía de los crisopos y miró a Harry—. Así que fue Dobby el que no nos dejó coger el tren, casi rompe la escoba de Lyra y el que te rompió el brazo... -Movió la cabeza—. ¿Saben qué? Si no deja de intentar salvarte la vida, te va a matar.

La noticia de que habían atacado a Colin y de que estaba como muerto en la enfermería se extendió por todo el colegio. El ambiente se llenó de rumores y sospechas. Los de primer curso se desplazaban por el castillo en grupos, Ginny, se sentaba junto a Colin en Encantamientos, estaba consternada, pero Fred y George se equivocaban en la manera de animarla. Se turnaban para esconderse detrás de las estatuas, disfrazados con una piel, y asustarla cuando pasaba. Pero tuvieron que parar cuando Percy se hartó y les dijo que iba a escribir a la señora Weasley para contarle que por su culpa Ginny tenía pesadillas.

Lyra Grindelwald y el Heredero de Slytherin [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora