Oh Dios... No podía ser cierto... tantos chicos en la ciudad, y justamente tenía que ser él, tantas presas jugosas, o peces en el mar, y Natalie tenía que estar con ese patán. Claro, no le diría a ella que se alejara de Nickolas, al conocerla tan bien, como las demás, las probabilidades de que se alterará, y me dijera entrometida, eran muy altas.
Nickolas me observa de pies a cabeza, analizando me (típico de él), me da una sonrisa de suficiencia, sintiéndose orgulloso de causar daño en mí. Aunque el pasado con él fue una mierda, no le di el gusto; no le di el gusto de que notará mi mirada en el suelo, ante su presencia. Él está acostumbrado a que yo siempre bajé la cabeza, cuando el me observa, pero no, no le di el placer está vez. Note como su mandíbula comenzaba a tenzarse.
«Oh Dios, este chico nunca cambia, siempre a pensado que el mundo gira alrededor de él. Pero ya no más»
Sonrió con maldad, y frialdad en mi mirar, el sigue observando me, está cayendo en mi pequeño juego. Estuvo acostumbrado a usar me y manipular me, pues ya es hora de que alguien le de una cucharada de su propia medicina, ¿No?
Su chaqueta de cuero negra, lo hace ver cómo un completo chico malo, sus pantalones oscuros adornados con pequeñas cadenas a sus costados, encajaban a la perfección, la camisa blanca con una calavera destrozada, hablaba por si sola de que clase de hombre es.
Quitándose la chaqueta, se acerca. Sin quitar sus ojos de mi. Las chicas se sorprendieron con la cantidad de tatuajes en sus brazos.
- Hola chicas -. Nat nos saluda con mucho entusiasmo - El es...
Interrumpiendo la, el hombre tatuado se dispone a hablar - Soy Nickolas Bontate, un gusto -. Paso uno de sus brazos por la cintura de mi amiga, presionando la, contra su definido cuerpo. No necesitaba verlo sin camisa otra vez, para saber lo definido que está...
Las chicas se pusieron grifas. Hasta donde yo sabía, el primer apellido de Nickolas era Brown. Su padre era inglés, y su madre italiana, de allí provenía el apellido Bontate.
Nunca lo escuché nombrar el apellido de la mujer que le dió la vida, siempre usaba el de su progenitor, para presentarse. Algo estaba mal...
- ¡Oh por Dios! -. Una pálida Antonella, cubriendo su boca con una de sus manos, decide romper el hielo.
Todas estaban horrorizadas, inclusive Natalie, a juzgar por su expresión facial, no lleva años de conocerlo.
- Mis disculpas, señoritas -. Se tomó un breve silencio. Sus ojos se encontraron con los míos, y en ese pequeño instante, sus labios se curvaron, lo cual provocó una sonrisa torcida, y una mirada de suficiencia - ¡Oh Vannesa, no te había visto! -. Fingió entusiasmo por verme. Algo que caracterizaba a Nick, era lo buen actor que el era... las clases extras de actuación le enseñaron más de lo que él ya sabía.
- ¡Oh hola! -. Idiota, solo podía pensar en decirle lo idiota e imbécil que es, pero no enfrente de las chicas. De seguro Natalie se molestaría conmigo, su personalidad testaruda, provocaría algún tipo de pelea.
- ¡Tanto tiempo sin verte, mia dolce ragazza -. Cómo olvidaba, Nick era mitad Italiano, su madre se encargó de que perfeccionara su pronunciación, ya que sería una deshonra para su familia, que su hijo, no fuera uno de ellos.
- Non parlarmi in un'altra lingua.
- ¿Ustedes están hablando en portugués? -. De repente, Antonella, con una gran palidez, interrumpía el trance de nuestra estúpida "Conversación"
- Ho bisogno che parliamo da soli.
- Okey -. Le respondí sin más, no quería seguir con esa plática tan absurda. El "Chico malo" se retiró de nuestro lugar de trabajo.
Las horas pasaron volando, cuando mire la hora en mi teléfono, me impresione, era más de media noche, eso explicaba mis ganas de dormir. Adam no se comunicó más conmigo, supuse que estaría ocupado, la verdad, no tenía ganas de preocuparme por alguien, al que posiblemente, solo le interesó, sexo de una noche, y ya, su fama lo describía, y sabía con quién me estaba metiendo, cuando acepté ir a su casa, y dar el siguiente paso.
Por otro lado, Ethan, mantuvo comunicación conmigo... invitandome a salidas, ya fuera al cine, al Burger King, o Macdonald's.
Aunque no lo crean, me gustan esos sitios, en especial por qué daban juguetes por la compra de tu cajita. Muchos creerán que es inmaduro, que con 20 años, me gusten los muñecos que ofrecen, pero... en mi defensa, los termino regalando.
Salí del café, las chicas estaban cansadas al igual que yo, una noche agotadora, muchos clientes por atender, pero vale la pena, por suerte, no tenía trabajo por la mañana, la limpieza matutina, comenzaba en la tarde, lo único que hacíamos después de que el lugar cerrará para el público, era limpia las mesas, lavar los platos, cubiertos, y bueno, todo lo que se ensuciara. La limpieza de los baños, y del suelo, lo hacíamos a la tarde siguiente, horas antes de abrir.
Mi teléfono empieza a sonar, sabía que era una llamada por el tono, KALEO - Way Down We Go, una de las canciones que más me fascina, merecía ser mi ringtone. Cuando observo la pantalla, el nombre me dejó en shock.
Adam Onfroy.
Decido contestar, saliendo del local, a lo mejor, sería para decirme que estuvo bien lo de aquella noche, y que me olvidara de él.
- Vanessa: ¿Hola?
- Adam: Discúlpame Vanessa...
- Vanessa: ¿Por? ¿Algún motivo en especial?
- Adam: Por no hablarte más...
- Vanessa: Adam, estamos grandes, bueno, tú ya eres el dueño de una gran corporación, lo más probable,era que...
- Adam: Vanessa, perdón... estuve demaciado ocupado, inclusive, extravié mi teléfono, por suerte lo conseguí... quiero recompensar el mal rato invitandote a cenar.
- Vanessa: Voy a mi casa.
- Adam: En taxi, ¿No?
- Vanessa: Sabés lo costoso que son, no, me iré caminando, al fin de cuentas, mi departamento queda cerca del café.
- Adam: Estoy en la empresa, si quieres te llevo.
- Vanessa: Lo acepto, porque ya es tarde y la calle se ve solitaria.
- Adam: Bien, en unos minutos estaré allí, guardaré algunas cosas.
- Vanessa: Okey.
Finalice la llamada, guardando nuevamente mi teléfono en mi bolsillo, y así, entre al lugar en donde personas importantes para mí, estaban.
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Nota: Llegó septiembre 🎉, y actualizo, casi que un mes después, a los que me han apoyado, disculpen mi tardanza :'v.Les agradezco mucho la verdad 🥺
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Una Presa Al Acecho
RomanceVanessa era una clásica Good girl, pero la vida la conviertio en una fiera.