Capítulo XVII: Me gustas.
Una noche de junio en su Francia.
Daniella.
Las gotas de lluvia caían por mi cabello pero eso me importaba un comino ahora. El frío se apoderó de mí y deteniéndome por un instante me coloque mi chaqueta tiritando.
Las palabras de esa mujer seguían plasmadas en mi mente.
El dueño de este teléfono está fomentando peleas en nuestro bar, vimos su número en la lista de emergencia y decidimos llamarle para que lo recoja.
¿Peleas? ¿Por qué? La última vez que lo vi estaba bien, me ayudó a curarme el labio roto y al día siguiente regresó a su casa.
¿Qué estaba pasando?
Volví a correr, nunca había estado por esas calles. Principalmente porque son peligrosas, no me hubiera imaginado a Azazel en este tipo de lugares.
Mi pecho subía y bajaba por mi respiración acelerada como consecuencia de mi cansancio. Apoye mis manos sobre mis rodillas e intente recuperar el aliento.
Debí haber venido en bus, pero salí tan rápido de esa casa que casi olvido mi bolso.
Sentía mi corazón latir tan rápido que daba la sensación de querer salirse de mi pecho.
No me detuve demasiado, unos minutos después continúe con las fuerzas que me quedaban y las que iba sacando con la imagen de Azazel en mi cabeza.
—Al fin... —susurre en jadeos al ver el letrero del bar que me había indicado la chica por teléfono, el exterior tenía luces amarillas que llegaban a ser llamativas y podía ver las sobras de personas allí dentro.
Trague en seco y me dispuse a entrar sin dudar. El interior no era tan bonito como la fachada, en especial por cierto castaño que se había colado en mi corazón sentado en una esquina sin percatarse de mi presencia. Mis ojos viajaron a sus anillos que tenían rastro de sangre, rápidamente lo asimile al ver a otros dos hombres mirándolo mal desde el otro lado del local.
No tarde mucho en reaccionar y acercarme a él, sus ojos viajaron por mi rostro preocupado por un instante pero su expresión seguía siendo el mismo. Duro.
Sin decir nada se puso de pie, agarrando la cajetilla de cigarros que estaba sacando de su bolsillo y saliendo de allí.
Una presión en mi pecho se hizo presente.
—¿Eres Daniella? —volteé, una mujer con un mandil me miraba con una pequeña sonrisa. Asentí. —Soy Joana, hablamos por teléfono.
La cuenta.
—Si, ahm... ¿Debo pagar por algo?
Me mira por unos minutos, luego mira atrás suyo. Puedo ver a un señor mal humorado con los brazos cruzados observando sus acciones. Debe ser el jefe.
—No te preocupes, puedes irte.
No puedo evitar sentir lastima y vergüenza. Si pudiera pagaría lo que tuviera, pero ni siquiera traigo dinero. Lo único que traigo en el bolso es mi celular y mi tarjeta del metropolitano.
Le regalo una sonrisa y salgo del bar, encontrándome con Azazel sentado en la vereda fumando.
El humo se cola por mis fosas nasales y toso un par de veces. Me siento a su lado y dejo mi bolso atrás mío enrollado a mi brazo para que no me lo roben.
—¿Me das? —sus ojos se posan en mí por unos segundos, parece dudar pero a las finales me da el cigarrillo que tenía en la mano.
—No sabía que fumabas. —su voz suena dura, sin emociones. Vacía.
—No lo hago, y tu tampoco lo harás.
En un movimiento rápido boto el cigarro al suelo y lo piso. El rostro de Azazel es de horror.
—¿Estás loca? —dice viendo el objeto antes de comprobar que ya no sirve, se apagó por el agua de la lluvia.
Siento una presión en el pecho, jamás me había hablado así.
—Te hace mal.
—Lárgate, Blanc. Ve con tu noviecito sacado de revista y déjame con mis problemas.
¿Qué problemas? ¿Por qué dice esto ahora? Pensé que estábamos bien.
—No es mi novio. —y jamás lo será, no después de lo de hoy. —¿Qué pasó?
—¿A que te refieres?
—Dime que te pasa.
Se queda en silencio por unos minutos, entonces lo miro de reojo. Sus ojos están vidriosos y puedo notar como lucha para no llorar.
—Un día como hoy mataron a un chico ¿sabes? Sé que no fue el único en el mundo, pero le arrebataron todo.
Yazza.
—¿Tu mejor amigo?
—Mi hermano. —mi corazón se dio un achuchón. —No soy una buena persona, Daniella.
—Pues yo no estoy de acuerdo. Eres la mejor persona que conozco, Azazel.
—Si fuera una buena persona lo hubiera obedecido y me habría ido a casa, si yo me hubiera ido; él también lo habría hecho.
Juego con mis dedos por un instante. No soy buena hablando de estos temas, en los velorios a los que me invitan casi nunca doy el sentido pésame. No porque no lo siento, sino que siento que es como si le estuvieran recordando su perdida cada cinco minutos.
Así que solo apoyo mi cabeza sobre su hombro, mostrándole que lo apoyo. Porque enserio lo hago, yo respeto, amo y apoyaré a Azazel en lo que haga falta.
Tal vez no soy buena con las palabras, pero es nuestro lenguaje minion. Él no tarda en notarlo, siento como suelta un suspiro y sus músculos se relajan.
Una acción vale más que mil palabras.
—¿Por qué saliste con él? —cambia de tema, su voz ya no suena brusca.
—No sabía como decirle que no.
—Ahora cada vez que un chico te diga para salir, le dirás que tienes novio y se llama Azazel Castillo.
Rápidamente levanto mi cabeza, lo miro a los ojos y estoy casi segura que él nota mi emoción en ellos porque sonríe.
—¿Me estás pidiendo que sea tu novia?
—Estoy diciendo que lo eres, Ella.
Siento la sangre subir a mis mejillas, agradezco que lo tomara por hecho. Porque si no entraría en un ataque de nervios antes de decirle que sí. Drama de una lectora de wattpad.
—Eso es muy cursi. —digo sin apartar la mirada.
Sus ojos siguen clavados en los míos. Idioma minion.
Me gustas, Azazel Castillo, tal vez más de lo que debería.
—Tu también me gustas, Ella.
El calor en mis mejillas se intensificó, apoye de nuevo mi cabeza en su hombro y disfrute la lluvia que caía sobre nosotros.
Entonces así se siente ser feliz.

ESTÁS LEYENDO
Cuando lo conocí ©
Dla nastolatkówA Daniella le gusta escribir. A Azazel le gusta fumar. Daniella estudiará medicina. Azazel estudiará administración. Daniella es tímida. Azazel solo quiere besarla. ¿Qué tienen en común? Ambos tienen un pasado que olvidar y un futuro que afron...