"𝒀𝒐𝒖 𝒌𝒏𝒐𝒘...𝒇𝒐𝒓 𝒚𝒐𝒖 𝒊'𝒅 𝒃𝒍𝒆𝒆𝒅 𝒎𝒚𝒔𝒆𝒍𝒇 𝒅𝒓𝒚" - Coldplay - Yellow
Si había algo que odiaba de su poder eran las visiones, y mas esa que había tenido no hace mucho en la que corría el riesgo de perder lo mas preciado para e...
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3 meses después...
Después de meses de tanto esfuerzo, proyectos, exámenes y más trabajo, Irina por fin tuvo un descanso.
—¿Qué harás hoy? —Preguntó Irina mientras se recostaba en su cama.
—Tengo que ayudar a la directora con unos papeleos ¿Y tú? —Respondió Margaret al otro lado del teléfono.
—Aún no lo sé, tenía pensado pasar un rato con alguno de ustedes, pero a todos los que he llamado tienen planes.
—¿Y los Maximoff? —Preguntó Margaret.
—Wanda tiene que hacer algo en su trabajo y Pietro...Creo que estará ocupado con su cita —Dijo Irina con notable sarcasmo.
—¡Eso es lo que crees! Si te doy un consejo, agota todas las opciones y si no te queda ninguna, me acompañas y llenas formularios conmigo —Dijo Margaret.
—No gracias, estoy un poco cansada de papeleo —Dijo Irina.
—Está bien, hablaremos después —Dijo Margaret mientras reía y terminó la llamada.
Irina dio un suspiro mientras se acomodaba unos cabellos detrás de la oreja, se levantó y fue hacia la habitación de Pietro.
—Hola —Dijo Irina mientras se recostaba en el marco de la puerta.
—Hola —Respondió Pietro mirándola de inmediato dejando la revista que tenía en manos en la mesa de noche.
—¿Qué haces? —Preguntó Irina entrando completamente y sentándose en un lado de la cama.
—Solo llenaba esta sopa de letras —Contestó Pietro con una sonrisa cerrada.
Irina admiraba la habitación, casi nunca entraba, pero cuando lo hacía notaba la decoración que esta tenía y eso le gustaba un poco, posters en las paredes sobre equipos de futbol, video juegos e incluso algunos programas de televisión.
—¿Qué tal todo contigo? —Preguntó Irina.
De alguna manera en esos últimos meses se habían distanciado un poco, Irina casi no estaba en casa por tantas obligaciones que tenía que cumplir y cuando volvía a casa llegaba totalmente agotada y a dormir, si hablaban en la cena, era de cosas irrelevantes y con respuestas cortas, pero eso no parecía molestarle a él ya que en ese tiempo había aclarado su mente e incluso uno que otro sentimiento.
