Segunda Temporada Capitulo 21

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NARRA SASUKE

- Tu, nos tendiste una trampa?- Sakura se puso en guardia al ver a dios allí enfrente de nosotros. -

- Obvio que si, sabía que estaban planeando robar la navaja divina, hice una copia falsa de ella y la enterré en la torre de los sueños. - Dios caminaba alrededor de nosotros mirándonos con superioridad. -

- Siempre supiste que estaba aquí?- Sujete a Sakura de la cintura, pegándola a mi cuerpo, iba a defenderla con todas mis fuerzas. Dios no nos iba a hacer daño.-

- Oh no, me entere cuando comenzaron a hablar sobre la navaja divina. Sucede que oigo a cualquier persona en mi cabeza cuando hablan de la navaja divina, esta encantada por mi para que nadie trate de usarla contra mi. - Dios desde un principio sabía el plan nuestro, nos había tendido la trampa con una navaja divina falsa, por eso cuando la toque se deshizo en mi agarre. -

- En donde esta la verdadera navaja divina?- Sakura andaba tensa en mis brazos, ahora que dios sabía de todo, no sabíamos lo que podría llegar a pasar.-

- Todavía no lo saben? La verdadera navaja divina esta en un lugar seguro.- Se burlo de nosotros riéndose. -

- Un lugar seguro?- Me repetí y el único lugar seguro para dios podía ser...- Siempre la tuviste contigo?-

- Adivinaste, la navaja divina siempre la llevo conmigo a todos lados, jamás me separe de ella.- De su túnica, saca la navaja divina, mostrándonosla. -

Esa si era la autentica navaja divina, brillaba más que la otra, su hoja era impecable y el filo era impresionante. Siempre la tuvo encima, no la escondió en ningún otro lado en especial. Lo debí de pensar antes.

- Eres un zángano, la tuviste contigo todo este tiempo, después de haber asesinado a nuestros padres y hermanos. - Sakura lo insulto con rabia, diciéndole ya de una vez que sabía quien era en realidad. -

Dios quedo pasmado para luego mirarnos con el ceño fruncido.

- Así que Lucifer les dijo. Como siempre mete su nariz en donde no le compete...- Susurro a lo último mirando a Sakura. -

- no puedo creer todo lo que hiciste para llegar a hacer el dios del paraíso, me engañaste toda la vida de quien era realmente. - cogí la mano de Sakura para darle mi apoyo y dios me miro mal. -

- No es como tu dices, siempre te cuide y te di mi amor, te mantuve bajo mi techo, no me importa que seas mi hermana de sangre, siempre te querré como una mujer. - Asco me producía. -

- Sakura es mi mujer y la madre de mis hijos, nunca más volverás a tocarla o hacer lo que quieras con ella. - Nos enfrentábamos con las miradas serias, sujetaba con fuerza a Sakura a mi cuerpo, no sabía lo que podía a llegar a pasar ahora. -

Pero teníamos que sacarle la navaja divina a Dios de las manos para acabar con él, ese era el plan. Mire a Sakura esperando a que entendiera el próximo paso que debíamos de hacer. Por suerte me comprendió y me sonrió.

- Sakura jamás será tuya Sasuke, siempre me perteneció tanto como su alma y cuerpo. - Se nos abalanzó arriba nuestro y Sakura reaccionó primero, en esquivar su ataque y responder a eso, empujándolo lejos de nosotros. -

Empezaba la acción, me transforme en Leviatán y con mi espada, le hice frente a dios. Luchábamos a conjunto con Sakura, uno caía y el otro lo ayudaba. Pero dios se resistía, protegiendo la navaja divina de nuestras manos. Intentábamos sacársela, apenas la pude rozar y dios se asustó, me quería golpear con uno de sus rayos divinos pero yo los esquivaba, si eso me daba, al ser un leviatán, me quemaría. Lo rasguñé con mis garras y Sakura le dio una patada con su fuerza sobrehumana, mandándolo a volar hacía la otra punta.

- Bien hecho. - Sonreí orgulloso y fuimos corriendo a buscarlo, en donde se suponía que se había estrellado, pero nada. -

El cuerpo de dios no estaba en ningún lado, estábamos seguros de que Sakura lo había mandado a volar hasta ese lugar, lo buscamos por varios minutos y nada. En un momento a otro, de distracción, dios apareció de sorpresa, agarro a Sakura y rozaba la punta de la navaja en su cuello. Me quede quieto, respirando con dificultad al ver eso.

- Quitale las manos de encima. - Rugi con el ceño fruncido. -

- Deja tu espada, arrodillate frente a mi y rindete ahora o por tu culpa, Sakura morirá. - Dios presiono mas su navaja en el cuello de Sakura. -

Ella negaba con la cabeza, sus ojos verdes que tanto amaba, me miraban con lágrimas, me negaba a pensar que este era nuestro fin, que no podíamos estar juntos tranquilos, con nuestros hijos que nos esperaban llegar juntos con la victoria.
No sabía que hacer, rendirme no entraba adentro de mis planes pero verla a Sakura apunto de perder la vida, era mi mayor miedo, jamás me perdonaría si le llegara a pasar algo. Hasta que recordé una conversación.

- Aparte de proteger a Sakura y ayudarla, en el momento cuando ataque a Dios, coloca esta cajita en el suelo y la abrirás. — me la entrega y la examine, no sabía bien que era. —

— ¿Que hace esta cajita? — La rotaba para mirarla por todos los extremos. —

— No te importa Sasuke, solo no la abras cuando no sea aquel momento indicado ¿Entendido?— me fulminó seriamente. —

La caja aún la tenía en mis bolsillos, no sabía si era un buen momento para hacerlo pero esperaba que algo hiciera.

- Bien me rindo. - Me acerque a él con la espada hacía abajo, Sakura me miraba sorprendida. -

- Que? No Sasuke! No lo hagas!- Me grito con desesperación y dios la apretó mas. -

- No puedo hacer más nada Sakura, este es nuestro fin, él gano. - Esperaba que Sakura entendiera a palabras ocultas que tenía un plan. -

- Así es, finalmente tendré la oportunidad de acabar contigo y estaré con Sakura. Deja la espada en el suelo y vuelve a tu forma normal. - Me ordenó dios, sonriendo. -

Deje mi espada en el suelo y al lado de ella, deje la caja que lucifer me dio, sin que dios se entere y pronto, una luz nos invadió, me aleje de allí rápido sin saber lo que pasaba y me sorprendí al ver a Lucifer parado.
Dios no reacciono al verlo, Sakura aprovecho la oportunidad de robarle la navaja y golpearlo en el mentón, tirándolo hacia atrás. Vino corriendo hacía a mi y me abrazo.

- Pensé que te rendirías. - Me abrazo con fuerza y le correspondí. -

- Jamás lo haría. - Acaricie su cabeza y la bese. -

Al separarnos, vimos a Lucifer y dios frente a frente, mirándose en silencio con odio. El enfrentamiento final se venía venir.

- Dios... De nuevo nos volvemos a ver en estas condiciones. -

Continuara

Pronto se viene el final ❤❤❤

La Maldición [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora