Capitulo 4

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El mes pasó rápido y llegó el invierno, todos en el instituto iban a sus salones que les tocaba mientras charlaban de la vida, yo en este caso me había quedado pensando en ¿Como estarían mis hijos? ¿Como serían ellos? Lo único que recuerdo de ellos fue verlos apenas nacieron y a la semana los entregamos con Sakura a Karin quien vivía lejos del paraíso, la elegimos a ella para que los proteja de dios porque sabíamos que si el se enteraba de nuestro romance, haría algo para impedirlo quizás matándolos por eso mismo.

— Sasuke. - Escuché como Sakura me estaba llamando y me perseguía por todo el pasillo-

— Hola Sakura. - La esperé hasta que pueda caminar a mi lado y la saludé. -

— ¿Vamos a clases juntos?- acepté y caminamos teniendo de por medio una charla corta. -

Llegamos y cada uno se sentó en su lugar, la profesora entró al salón y comenzó con la absurda clase que no preste ni la mínima atención, observe a Sakura disimuladamente y recordé ese momento en donde ambos éramos felices juntos siendo amantes en el paraíso.

~AÑOS ATRÁS, EN EL CIELO~

Nuestra intimidad nadie la iba a romper, estábamos tan seguro de ello en que siempre estaríamos juntos sin importar lo que haga nuestro superior, que era dios.

— Sasuke ¿aún tienes pensado en parar la guerra entre el cielo y el infierno?- me preguntó acariciando mi pecho desnudo acostados porque habíamos tenido sexo. -

— Si Sakura ¿por que debe de existir esta guerra? Es ridícula- también acariciaba su cintura mientras la abrazaba. -

— Lo sé, pero nuestro dios quizás se enoje y demasiado, no sabemos lo que querrá hacer apenas lo enfrentemos- me miró por varios segundos preocupada para que luego la tranquilice con un beso atrayéndola más a mi y poder tocar su voluptuoso trasero-

— Hagamos lo que hagamos tenemos que asumir las consecuencias Sakura, pero te prometo que no dejare que nada te ocurra, ni a nuestros Hijos- corrí su cabello del cuello para dejar un camino de mordeduras y ella del placer hizo fricción con mi miembro, arqueando su espalda dándome más espacio en la suave piel de sakura. -

— ¡Ah! ¡Sasuke! Se que nada me ocurrirá estando contigo. - Éntre a su cuerpo dando estocadas fuertes marcándolas con su trasero y ella gimió a mi oído jalando mi cabello. -

Seguíamos satisfaciéndonos y nuestros gemidos llenaron el lugar creando una atmósfera de calor, las estocadas iban aumentando mas por llegar al clímax.

— ¡Sasuke mas rápido!- me pidió gimiendo Sakura moviéndose desesperada a que la llene con mi semen. -

— ¡Mmm!- gemí a lo que me pedía y aceleré las estocadas profundizando más. -

A los segundos llegamos al clímax y nos desvanecimos en la cama todos sudados, no quité mi mano de su cadera y ella se acercó más para besarme en los labios.

— Confía en mi Sakura, jamás dejaría que algo les ocurriera porque yo los amo. - volví a besarle pero esta vez con lentitud y con mucha intensidad. -

— Yo también te amo Sasuke. - me sonríe sentándose en mi cadera a propósito para que mi miembro entre con facilidad a su interior, me sorprendió y ella tomo control sobre el asunto-

~ACTUALIDAD~

Éramos tan felices en ese entonces, aunque nuestro amor era prohibido allí por el dios ya que también estaba enamorado de ella y jamás se enteró que tuvimos hijos, Sakura había ocultado su embarazo con una pócima. Pocas personas sabían que teníamos hijos y mantuvimos una relación oculta. Pero Dios sabía que Sakura y yo sentíamos algo porque fuimos demasiados obvios, él no quería que estemos juntos, así que, por eso nos maldijo para que no pudiéramos besarnos y el alma de Sakura simplemente abandonara el cuerpo para que reencarne.

La Maldición [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora