Azucarado deleite

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****NOTA**** Por favor, os los ruego, si son menores de edad no lean este episodio, pueden saltar al que vendrá luego y no perderán el hilo de la historia, para las que tiene experiencia con la lectura de lemon, disculpadme si lo he hecho mal, sentía que me iba a dar un paro cardiaco mientras escribía este capítulo, nunca he podido escribir algo así a lo largo de varios intentos desde hace años, siempre que empezaba terminaba con tanta vergüenza que borraba todo y huía del computador, así que tenedme paciencia, me disculpo de igual forma si esto esta inentendible pero no podía escribir cosas tan directas ¡Simplemente no puedo! Por más que buscaba palabras para empatar lo que quería decir a veces no pude y termine escribiéndolas, si tiene faltas de ortografía también lo siento, pero sentía que si revisaba esto más veces, iba a salir huyendo de nuevo y nunca lo publicaría, bueno, aquí tienen****

Adrenalina pura.

Brownie no cedía ni un momento, sentía que en cualquier instante ese hombre necio recuperaría su postura y se marcharia como siempre, así que sin importar que, no iba a darle ni un respiro.

Los besos eran cada vez más profundos, su lengua jugueteaba con más fuerza, sus quejidos de placer acallados por la boca del comandante eran más constantes y sus caricias más provocadoras, el cuello, sus clavículas, y sobre todo su pecho, que siempre mostraba orgulloso y enaltecido ahora mostraba lo acelerada que estaba su respiración, delatando que estaba perdiendo ante ella.

El hombre sentía sus impulsos recorrerle todo el cuerpo mientras aún intentaba contenerse con toda la fuerza de su espíritu.

No entendía cómo esa chica tan torpe que se tropezaba al caminar, podía tocarle con tanta delicadeza y precisión.

Brownie, quería sentir entre sus manos cada parte de ese torso mientras reposaba su nariz en su cuello, embriagándose del aroma del comandante dulce,sus manos  bajaron un poco más, encontrando los oblicuos y un poco más, descendió hasta su vientre y su mano intentó entrar a su pantalón, entonces el la aparto de inmediato, avergonzado mirando hacia una esquina jadeando aire tan tibio que se podía ver por el frío de la noche.

-¿Quiere que lo dejemos ahora?, Su cuerpo me dice que lo estoy haciendo bien.

Se escudó la chica, deslizando ahora su nariz por las mejillas del hombre.

-Basta... si no te detienes... voy...

-Hágalo... por favor

Le susurró en el oído, luego le apreso la oreja de forma suave con sus labios, le tomó una mano guiándola hasta su pecho, el sintió la suavidad de su piel entre su mano a pesar de tener el guante puesto y al medio de su palma, algo endurecer y levantarse por el extasis, quería verlo, quería ver ese hermoso boton levántese sobre el pecho de la chica, su mano hormigueo por la tentacion mientras ella no se rendía.

-Por favor...

Rogó de nuevo, con esa vocecita pegajosa que él le parecía angelical.

/Maldición/ 

Se repetía una y otra vez, su conciencia luchaba par a par con sus instintos, para ella verlo resistirse con esa cara avergonzada hacía que tuviese más deseo por él, saber que ella podía poner de esa forma a uno de los hombres más temidos del nuevo mundo le resultaba por demás excitante, para el hombre mochi, ella lucia tan apetecible con esa cara de lujuria qué parecía rogarle qué le arrancará la ropa y la sometiera con todo lo que tenia.

La frecuencia de sus respiración se aceleraba, regresó la vista a ella, quien de nuevo entreabrio su boca en su dirección  invitándolo a unirse de nuevo.

/La deseo/ - Pensaba el-  /Maldicion, la deseo demasiado.../

Finalmente unió sus labios pero de forma más desenfrenada, su mano finalmente se movió, acariciando a la chica con frenesí, sujetó ambos pechos de la chica, pero ya no era suficiente, necesitaba sentirla en carne propia y ella le miro de nuevo a los ojos mientras él se sacaba con la boca los guantes negros que cubrían sus manos.
Y prosigio sus caricias sobre la camisa de la joven.

El dulce sabor del amor (Charlotte Katakuri x OC)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora