Capítulo 7: Correas. ¿Amigas o enemigas?

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Después de una noche bastante alocada desperté, pero sin levantarme de la cama volteé a ver a los chicos que estaban compartiendo cama conmigo. Daniel estaba despierto usando su teléfono, mientras que Alex estaba dormido aún.

-Buenos días, peque- Inició Daniel.

-Buenos días...- Dije mientras me estiraba y soltaba un bostezo.

-¿Recuerdas algo de ayer..? -Dijo algo apenado.

-Ya va... ¿No recuerdas nada de ayer?-

-No mucho, si me dices tal vez recuerde algo...-

-No puede ser...- Dije sabiendo que mis mejillas estaban rojas por recordar cada beso, cada mordida, cada cosa que me dijeron e hicieron ambos. Y aunque me gustaba recordar lo de ayer, me sacó de mi burbuja escuchar como Alex se despertaba. Así que volteé a verlo.

-Hola... Buenos días- Dijo mostrándonos una sonrisa.

-Hey, Alex... ¿Recuerdas algo de ayer?- Preguntó Daniel.

-Claro que sí. ¿Tú no?-

-No... Para nada -

-Ya va... - Hizo una pausa Alex para apoyarse con su codo en la cama. - ¿No recuerdas lo que le hicimos a Stella?

-¿Le hicimos algo a Stella?-

- Daniel... La tocamos, comimos crema batida sobre ella, la besamos, hicimos un beso de tres. ¿NO RECUERDAS NADA? - Gritó Alex sorprendido a lo que Daniel respondió negando con la cabeza.

- Y tú... ¿Recuerdas todo lo de ayer? -Le pregunté a Alex.

-Sí, Stella... Lo recuerdo todo. Por cierto, ¿te gustó lo de ayer?- Al escuchar esas palabras sentía como me sonrojaba y mi entrepierna se calentaba un poco...

-Ehh... Pues... -Dije desviando la mirada de Alex.

- Mm... Daniel, vamos a darle los buenos días a la pequeña Stella como merece; y así tal vez, recuerdes algo... - insinuó Alex.

Alex tomó mis pechos con agresividad y desespero como si hubiera esperado toda la noche para hacerlo de nuevo, mientras que Daniel no hacía nada. No entendía, anoche lo hizo como si nada.

- Vamos, Daniel. Ayúdame con Stella- Dijo Alex apretando uno de mis pezones que ya estaba duro. Daniel, acercó sus manos con algo de timidez a mi trasero y empezó a tocarlo sin mucha fuerza. Estuvieron así un rato hasta que Alex decidió cambiar y así poder tener mi culo. Estaba cara a cara con Daniel y la verdad eso era lo de menos, ya que por todo lo que me estaba haciendo Alex me hacía soltar gemidos y jadeos a lo que Daniel solo podía ver el espectáculo. Y eso al parecer lo motivó ya que empezó a apretar con fuerza. No podía con tanto... Jamás había sido tocado por dos chicos al mismo tiempo... Es más, jamás había sido tocada de esa forma. Y... Me gustaba. Esto no siguió por mucho ya que Alex y Daniel decidieron dejarme descansar.

- Daniel... ¿Aún no recuerdas nada de ayer?- Preguntó Alex.

- No. Bueno, tengo recuerdos borrosos... Recordé un poco más en cuánto escuché gemir a Stella... - Le contestó éste algo apenado.

-Bien. ¿Ahora qué hacemos?- Alex bostezo al terminar éstas palabras y se estiró un poco sin levantarse de la cama.

- ¿Podemos dormir un rato más?- Pregunté, aún estaba procesando todo lo sucedido. Era... Fascinante, pero a la vez me sorprendía de que eso me gustase. Siempre he sido una chica que dice cosas como: "Asco estar con dos hombres al mismo tiempo", "El sexo debe hacerse si hay amor de por medio ", "Jamás tendría sexo ni nada por el estilo con mis amigos". Y justo ahora, había sido tocada por mis mejores amigos y lo había disfrutado, lo había gozado como no imaginan. ¿Estaba mal que me haya gustado? ¿Me debería dar asco mi propia existencia? O... ¿No? O sea, sé que no es lo usual, pero... Supongo que no está mal, ¿verdad? Solo fue algo que pasó y ya. No creo que tenga algo de relación con sentimientos más allá de la amistad. Son mis mejores amigos...

¿Mejores amigos o algo más?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora