Parte 4

4.8K 555 47
                                    

LENA POV

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

LENA POV

― ¿Hay lugar para uno más? ―gritó Eliza cuando entramos en la cocina.

Inmediatamente me sentí cómoda en su casa grande y cálida.

Caminó alrededor de la habitación, presentándome a todo el mundo. Finalmente llegamos a tres niñitas, quienes me veían con los ojos muy abiertos como si fuera una extraterrestre.

―Esta pequeñita aquí es Jenna, la hija de Catherine. Y estas dos cositas dulces son Alex y Rubí, las gemelas de Kara.

Me quedé boquiabierta levemente antes de que pudiera tambalearme de vuelta con el shock. Me quedé pasmada de que Kara, la chica linda con la coleta desordenada, usando la camiseta blanca manchada de chile con carne, era una mamá. Y no solo mamá de una, sino de dos. Kara notó la mirada de sorpresa en mi cara, mientras sus ojos se volvían tristes y se lanzaban hacia el piso con vergüenza. De repente, me sentí como una idiota colosal.

―Aquí, Lena, ven a sentarte a mi lado. ―Ashley empezó a tirar de mi brazo hacia la gran mesa estilo rústico que separaba la cocina de la sala de estar. Ella estaba de poco más de los veinte y era suficientemente linda, pero las chicas como ella quienes estaban tratando constantemente de llamar mi atención eran como una pequeña oveja en un enorme rebaño.

―Está bien, espera un segundo ―respondí antes de voltearme hacia Kara―. ¿Hay algún lugar donde pueda conectar mi teléfono por un rato?

―Claro. ―Una pequeña sonrisa se dibujó en su rostro mientras señalaba un enchufe abierto en los azulejos para salpicaduras―. Justo allí.

―Gracias ―dije, incapaz de desviar la vista de su mirada.

Una vez más, Ashley tiró de mi brazo. La seguí a la mesa y me senté a su lado, pero no podía despegar mis ojos de Kara.

No sé lo que estaba esperando cuando toqué a la puerta de esta posada, ¿tal vez a una pequeña mujer mayor con gatos o a una familia de caníbales en los bosques? Lo que fuera, definitivamente no era a ella. Una pequeñita belleza cuyos ojos Azules casi me golpearon en el culo.

Cada movimiento que ella hacía alrededor de la cocina era hipnotizante, incluso la manera en que arrugó la nariz cuando se enfocó en cortar el pan de maíz en estos pequeños cuadrados perfectos. Ella se acercó a la cacerola grande en la estufa, levantó la cuchara de madera a sus labios y probó el chile con carne. Casi perdí mi mierda ahí mismo en la mesa, pero no podía apartar la mirada. Ni siquiera me importaba si alguien me observaba mirarla. Esta era la seducción más tortuosa y accidental de la que había sido parte y estaba disfrutando cada segundo de ello.

―Entonces Lena, todos hemos pasado la tarde llegando a conocernos unos a otros. ¿Qué hay de ti? ¿De dónde eres? ―preguntó Henry desde la sala de estar detrás de mí. Salté ante el sonido de mi nombre, girando en mi silla para mirarlo.

Room For You (Supercorp Gip)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora