¡Hey Niña! || MYG

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⚠️Contenido +18, si no quieren leer, omitan este capítulo ⚠️

Yoongi

Habían pasado como dos meses desde que fuimos a almorzar con los miembros y se había repetido casi todos los días, Junnie avanzaba más con cada visita a la clínica y se veía más calma al dormir. Era un viernes en la noche y estábamos viendo películas de terror. Junnie se reía por cada cosa que les pasaba a los chicos, decía que tomaban decisiones muy absurdas. Ella estaba abrazada a un brazo mientras que yo le acariciaba las rodillas, habíamos subido muchas veces la escala y podía tocarla sin que me rechazara, pero obviamente, no eran toques morbosos ni nada parecido. Estaba dispuesto a esperar a que ella se sienta lista para hacerlo.

Ella se había levantado diciendo que iría al baño y me quedé sentado en el sofá con la película en pausa esperando a que apareciera. Sentí su llamado y fui a ella, a ver qué pasaba. Al llegar la ví de pie en la habitación de espaldas a la puerta. Me acerqué a ella y la abracé por la espalda.

- ¿Pasa algo Junnie? Volvamos a ver la película -ella no respondió.

Se volteó y miró mis ojos, me sentí profundamente atacado por esos ojos marrones mirándome fijamente con un brillo que no podía describir. Se acercó a mí cara y besó mis labios. Le correspondía mientras sujetaba su cintura, creo que ya se a donde va a esto. Me separé de sus labios y con los ojos cerrados le susurré:

- Jun-me interrumpió.

Me empujó a la cama y subió encima de mí, su pelo lo pasó a un lado del cuello para despejar su cara y al verla me quedé extasiado. Sus mejillas rojas, sus ojos suplicantes, sus labios rojos y carnosos. Se sentó encima de mí entrepierna y movió sus caderas un poco haciéndome jadear, su entrepierna estaba caliente y ella ardía en mí tacto. Tomé su nuca y la atraje a mí boca donde la besé y mordí sus labios como quise, tenía una mano en su muslo y con valentía la llevé a su trasero donde la toqué y apreté, ella gimió un poco pero la sentí temblar.

- Jun... Estoy aquí, es Min Yoongi, tu novio -ella abrió los ojos y me observó.

Se levantó y quitó su sudadera, me dejó ver su sujetador y su cintura. Me apoyé en la cama con mis antebrazos mirándola, sonreí al verla sin saber que hacer.

- Ven acá -la llamé y ella respondió el llamado tímida.

- Lo siento -se disculpó.

- No tienes que disculparte, no ha pasado nada, solo quiero saber si quieres seguir o detenernos -ella observó mi cara y llevó una mano a mí cara donde acarició cada facción de esta.

- Quiero hacerlo, se que cuando abra los ojos o sienta miedo, eres tú quién estará tocándome y eso me tranquiliza -no pude resistirme y la besé.

Besaba, lamía y mordía sus labios, adentré mi lengua rozándola con la suya, haciendo que ella se removiera y gimiera en mis labios. Me apoyé en mí bazo derecho y con la izquierda pasé mis manos por su abdomen, abrí mis ojos y la ví mirándome. Me separé de ella y besé su cuello, ella subió sus manos y acarició mi cabello. Gemía no tan alto, pero su cuerpo respondía agresivamente, al parecer era un punto sensible para ella. Llevé mis manos a sus pechos y los acaricié mirándola a los ojos y ella sonrojada a más no poder no perdía el contacto visual. Hice que levantará un poco su torso y quité su sujetador y se cubrió enseguida. Sonreí y subí a su oído.

- Necesito que me los muestres para hacerte sentir bien Jun -ella jadeó a la gravedad de mí voz.

Quitó sus manos de a poco y cerró sus ojos fuertemente, tomé uno de sus pechos medianos y pasé mi lengua por sus lados. Su piel se puso de gallina y puso sus manos en mis hombros, tenía los ojos cerrados.