Hacía mucho calor, realmente de asfixia, en esa velada de agosto, y los chicos estaban sentados de manera desordenada en algunas sillas, o despatarrados en el sofá del templo de Leo con el torso desnudo, vestiendo sólo unos asurados pantalones cortos, bebiendo cerveza, jugando a las cartas, charlando y riendo de cualquier cosa graciosa, idiota o frívola que se les pasara por la cabeza, como el nuevo color de lápiz labial Chanel llevado últimamente por Misty, de gran tendencia este año según la opinion de Afrodita, o de las mejores infusiones para mantenerse en forma existentes en la milenaria tradición china, que Dohko había traído de su último viaje al Patriarca Shion: es decire el té Pu-Her, y el té Oolong. El maestro de los cinco picos había decidido regalarlos al pontífice, ya que a menudo se quejaba de tener kilos de más de los que tenía que deshacerse. Decir que eran peores que las chismosas del barrio era quedarse corto, considerando que a menudo hablaban de temas que solo las mujercitas metiches o los maricones podían apreciar, y eran los mismos que luego se comportaban en el campo de batalla como peligrosos, temerarios asesinos a sangre fría, alardeando cuerpos y músculos envidiables, y tenían actitudes de verdaderos hombres, llenos de moretones, heridas, y cicatrices en el pecho.
Estos eran en verdad los santos dorados de Atenea: jóvenes hombres perfectamente normales fuera de la lucha, tales eran sus diversiones, y sus veladas de fiesta eran esporádicos momentos donde entre una copa y otra, hablaban, se confesaban, y salían a la luz sus pequeños secretos ...
De vez en cuando íban al bar de Rodorio, y salir a bailar era para ellos una especie de espejismo, un sueño que iban a vivir en otra vida, cuando revivirían como personas comunes, aunque alguien, cuando había tenido la oportunidad de obtener una breve permiso para salir del Santuario, también se había ido a divertirse a escondidas en algún club, sin que nadie lo supiera, por supuesto.
Estaba estrictamente prohibido dedicarse a cualquier otra cosa que no fuera el entrenamiento y la lucha, tanto dentro como fuera de las doce casas zodiacales.
En cualquier caso fantasear con placeres y distracciones, tomando algunos pequeños momentos de transgresión en esta existencia, por lo menos se les permitía ... sólo para no olvidarse que eran jóvenes, que eran hombres, y que eran seres humanos. La ocasión del agradable encuentro vespertino en este caso fue el cumpleaños del león Aioria, y por tanto, qué era mejor que celebrar con un poco de alcohol, de ricos y suculentos cotilleos, varios chistes sucios, y algunas buenas palmadas en la espalda, entre compañeros?
Dada la ocasión no faltaba ninguno de los santos dorados en la pequeña fiestecita: prácticamente todos estaban allí, solo Dohko, conocido como el más poderoso santo bebedor, después de haber realizado su habitual carga de cerveza, se había ido despidiéndose de todos, juntos con el siempre sobrio Shion, y a partir de ese momento "se abrieron los bailes", la noche cobró vida de repente despegando en un parpadeo. La música fue colocada a todo volumen, otras cervezas y nuevos licores fueron abiertos. Mágicamente salieron a la luz la marihuana de Kanon, y los cigarrillos de contrabando de Shura. Las risitas se había vuelto más alta, ligera, y habían volado por la habitación camisetas sin mangas, camisetas y camisas, que molestaban por el hecho de que quedaban pegadas a la piel por el sudor, generado por la temperatura increíblemente tórrida de la noche.
Alguien también se había quedado en ropa interior, y era como de costumbre Death Mask, que sin pudor, ni vergüenza de nada, iba por ahí en déshabillé * , recordando en sus actitudes el pasado Patriarca Saga, cuando era poseído por el espíritu maligno enviado por la diosa Ker. En resumen era suficiente que los ancianos desaparecieran de la circulación, para que los jóvenes empezaban inmediatamente a violar una a una las reglas, las restricciones que normalmente se les imponían como santos guerreros de la diosa Atenea, sin el más mínimo remordimiento: una vez cada tanto, en alguna velada en especial, también se podían hacer de excepciones. Entre un sorbo de alcohol y otro los chicos empezaron a sudar aún más: en verdad las bebidas alcohólicas no eran lo mejor cuando hacía tanto calor. Habría sido más apropiado un té frío...
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45°C
FanfictionQué sorpresas puede deparar una candente noche de verano? Milo, Aioria, Kanon, Camus...pero también Shaka, Mu, Afrodita...y todos los demás! Mini-cuento : una historia ligera, irónica y divertida con un toque sexy, un trasfondo romántico, y mucho a...