The Painter. -Kookv [+18]

XIV

〰🔺 Mío. 🔻〰

—Tranquilo bebé, esto no te dolerá nada —dijo Jungkook con una sonrisa. Aunque el apodo le encantaba a Taehyung, esta vez sonó muy macabro.

—¿Q-qué es lo que harás?—su voz salió como un chillido, y Jungkook sostuvo su rostro en sus manos sin ser demasiado brusco.

—No haré nada que te ponga en peligro, amor. Solo no te muevas —Taehyung quiso confiar en él, pero en ese momento su sonrisa y su mirada estaban fuera de sí, y le dio miedo.

Tragó saliva fuertemente y sostuvo la chaqueta del mayor con tanta fuerza que sintió cómo sus dedos se adormecían. Jungkook esbozó una ligera sonrisa y acercó el bisturí a su rostro.

—Espera, Jungkook —sintió cómo sus ojos comenzaban a picar, indicando que se acercaban las lágrimas. Jeon gruñó por la interrupción y una lágrima resbaló por la mejilla de Taehyung—. Tengo miedo —dijo, mirando directamente a los ojos del mayor, esperando encontrar seguridad y confianza en ellos. Solo se sintió más desprotegido al no ver ninguna gota de compasión.

Jeon sintió sus manos picar y empujó al menor hasta un sofá cerca de ellos. Sintió un pequeño escalofrío en su espalda al ver cómo el cuerpo de Taehyung golpeó contra la piel del mueble. Se aproximó a él antes de que pudiera escapar y lo inmovilizó poniendo su cuerpo sobre cada extremidad.

—No te muevas o podrías terminar realmente herido —advirtió Jeon, y entonces las lágrimas de Taehyung comenzaron a desbordarse.

Un extraño sentimiento se adhirió a su pecho al ver sus lágrimas rodar por sus mejillas rosadas. Podría haber supuesto que era su conciencia, si tan solo tuviera una.

Ignoró el sentimiento, apretando el mentón del chico con una mano y con la otra, que sostenía los brazos de Taehyung, acercó el filo del bisturí a su cuello, justo en su yugular.

—Jungkook... A mí, en verdad no me importaría morir justo ahora —comenzó el menor, aún llorando, y Jeon detuvo su mano al escucharlo—. Mi vida ha sido tan mierda que en realidad no me importa —finalizó, evitando la mirada del mayor, mientras sus manos seguían sobre su cabeza a pesar de que Jungkook ya las había liberado.

—Es un gusto saber eso —confesó Jungkook con una pequeña sonrisa. Aunque parecía sarcasmo, estaba diciendo la verdad.

Cambió la dirección de su mano y el filo tocó el labio inferior de Taehyung. Cuando sintió el metal frío, tragó duro y cerró los ojos al sentir cómo la carne se abría.

Jeon se deleitó con la imagen, sintiendo un extraño cosquilleo en su abdomen bajo, y finalmente retiró el bisturí cuando la herida fue lo suficientemente profunda.

Taehyung estaba listo para morir. En realidad, tenía miedo aunque hubiera dicho lo contrario; no tenía la valentía de abrir los ojos. Prefería que lo que siguiera fuera inesperado, de lo contrario estaba seguro de que lloraría aún más.

Al instante, lo único que sintió no fue un metal frío sobre sus labios, sino unos suaves y cálidos labios que le hicieron abrir los ojos. Jeon Jungkook estaba chupando y lamiendo sus labios con cierto cuidado. Aún así, era algo doloroso. Los ojos del mayor estaban cerrados, indicio de que estaba disfrutando de eso.

Taehyung no se movió, mayormente porque sintió cálido su pecho por esa acción. Aunque era bastante estúpido de su parte, la situación le gustaba.

Cuando el mayor se apartó, miró atentamente el rostro del chico, contemplando sus ojos hinchados e irritados, su nariz roja y sus labios del mismo color, de donde aún brotaba sangre por la herida.

—Así que confías en mí —el mayor preguntó, pero sonó más como una afirmación. Taehyung lo miró un largo rato antes de asentir y sentir cómo un ligero hilo de sangre corría por su barbilla.

Analizó los ojos oscuros de Jungkook, que lucían muy fuera de sí. De cierta forma, le parecían llamativos.

—¿Tanto como para dejarme tu vida en mis manos? —preguntó nuevamente y, al ver asentar de nuevo al menor, soltó una pequeña risa.

Porque sabía lo estúpido que era confiar en él.

—Bien, bonito —acarició con una mano la barbilla del menor, deslizándola hasta su pecho, haciendo que la sangre en su barbilla terminara también en su pecho—. Solo haré algo más y terminaremos por hoy —dijo antes de comenzar a desabotonar la camisa del joven y acariciar también esa parte descubierta—. Este lugar tuyo me gusta mucho —pasó su mano bajo la zona del ombligo y el menor tuvo un escalofrío por el contacto frío—. Cierra los ojos, lindo. No quiero que te asustes —habló en un susurro, y el menor inmediatamente obedeció, cerrando los ojos y tratando de relajarse ante la mirada de Jeon.

Jungkook pasó su lengua por sus labios una vez más antes de tomar de vuelta el bisturí y acariciar con la punta la zona bajo el ombligo del chico.

Comenzó trazando una línea y, al mismo tiempo que Taehyung se quejaba por el ardor, Jungkook le ordenó que no abriera los ojos hasta que él lo dijera y continuó nuevamente cuando Taehyung asintió en acuerdo.

Cuando terminó, sus labios se alzaron al ver la magnífica marca que había dejado en el menor. Le ordenó abrir los ojos nuevamente, y cuando el menor lo hizo, quedó confundido.

—¿Qué es eso? —preguntó procesando lo que estaba viendo ante sus ojos. En su abdomen bajo estaban cortadas las palabras 전정국 (Jeon Jungkook), bañadas en su propia sangre. Miró de vuelta al mayor buscando una explicación.

Mayormente porque estaba confundido; las heridas no eran lo suficientemente profundas para hacerle daño, pero sí para dejar cicatriz.

—Esto —comenzó el mayor—,es el inicio de algo importante —acarició la zona con cuidado y volvió a hablar—. Significa que solo yo puedo verlo. Al hacer esto, significaría que no puedes estar con nadie más que no sea yo. Lo que te convierte en mío.

Y mierda, Taehyung no debió sentir ese cosquilleo bajo su estómago o ese palpitar en su corazón.

No debió sentirse tan bien como se estaba sintiendo al escuchar al mayor marcarlo como suyo.

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Espero que les guste el capítulo.

Gracias por leer.

Nos leemos en le próximo cap.

Besos 😚😘😙❤❤❤❤