Tras Bambalinas ( #4 Odio a las chicas)

Capítulo 22: Tira y Afloja

Aisha:

—¡Isacc!.—Grito tratando de seguirle el paso, aunque el tacón no me lo permita.—¡Isacc! ¡Solo...

Consigo que se detenga a las afueras del hospital, pero no se gira.

—Isacc, escúchame, escúchame un minuto.—Pido con un tono de voz más bajo y logro tener respuesta de él, quien se gira en mi dirección.

Su mirada me lastima, el dolor y la decepción causa por mis mentiras. No puedo mirarlo y con los ojos caídos voy hacia él.

—No sabes... No sabes cómo lamento que...

—¿Qué me enterara de esta forma, Aisha?

Trago saliva.

—¿Por qué no me dijiste esto?.—Inquiere.—¿Por eso decidiste quedarte más tiempo.—El alza la voz.—¿Por él? ¿Ha sido mentira...

—No.—Lo detengo.—No es por el... no es solo por él.

Malas palabras elegidas, Aisha.

Otra vez está mirándome con decepción.

Y ya no intento explicar, no digo que estoy aquí por Ceci, por los niños que insistieron en que me quedara, por la obra, por mis amigas.

No digo nada, porque dentro de mi es así y mi mayor razón de seguir aquí es porque mi corazón se siente bien al lado de Drew Benson, sea hijo de puta o no y yo sea una masoquista por amarlo tanto, esa es la verdad.

—Isacc..

—Nosotros... ¿Ha sido falso, Aisha...?

Trago duro.

—Te quiero.—Le confieso, mi vista llenándose de lágrimas.—Tu sabes que lo hago.

—Me quieres, pero no de la forma en que yo te quiero. —Las palabras me causan dolor.—No como lo quieres a él. Tu nivel de amor es diferente comparado al que siento por ti.

Niego tratando de disculparme.—No ... No quería que resultara de este modo.

—Pero resulto, maldita sea.

Me da la espalda otra vez y ya no temo perder a mi representante, solo a un amigo que lastime, un amigo que merecía saber la verdad por mí, no de esta manera tan cruel.

—Necesito unos días...—Menciona llamando mi atención, mi mirada se encuentra con la suya.—Estaré aquí cuando Magaly Tenorio lo este.

—Isacc..

—Soy profesional, Aisha.

—Lo sé.

—La decepción de esta noche y de lo que ahora siento hacia ti no arruinara mi trabajo.—Me suelta.—Pero ahora mismo no puedo compartir espacio contigo.

Bajo la mirada.

—Asegúrate de seguir la dieta y consigue ese papel con esta audición.—Me exige.

—Isacc..—Intento hablar, pero él niega.

Y solo veo su rostro de dolor antes de que se aleje. 

(***)