Como mi Alma.

Ilusiones Ópticas.

Algo que agradezco a la vida es que no podamos leer las mentes; tal vez hubieras huido al saber mi primera impresión sobre ti.

Te acercaste a mi, con un ramo de 12 rosas rojas. Pero me fije solo de tu mirada en mi. El como caminabas hacia mi. Y cuando pude darme cuenta de lo que pasaba, mis dedos estaban llenos de gotitas de sangre. Tus espinas me hicieron daño.

Fueron largos los días en lo que me imagine como seria estar contigo. No en malos pensamientos como todo el mundo pensaría. Estar contigo en las aventuras. Comer helados, decir cursilerías.

Pero eras el chico oculto tras la capa de ser el ideal para mi.

Caí en un gran pozo de ilusiones; fui una verdadera tonta. Ahora estoy aquí ocultando todo lo que deberías saber. Nunca debí creer en mi primera impresión sobre ti. Por que la mente engaña. Hay ilusiones ópticas que engañan nuestros sentidos.

Y tu eres una de ellas.

Sigo sin creer como haz tenido escrúpulos para seguir haciéndolo con las demás princesas.

Sí. Princesas, por que todas lo somos. Y tu no eres un príncipe azul con capa perfecta.

Eres el brujo. Que hechizo mi corazón.

El dragón. Que quemo mi corazón.

El vagabundo. Que se robo mi corazón y nunca pensó en devolverlo.

Tal vez algunos piensan que te sigo queriendo conmigo. De hecho nunca estuvimos juntos, solo fuiste una ilusión óptica.

Y tampoco es resentimiento lo que siento por ti. Es tristeza. Por que no puedas apreciar la belleza.

A los ladrones se les lleva a las mazmorras. Yo no te incriminó de nada.

Pero tienes dos opciones.

La primera; Devuelve me el corazón y...

La segunda te toca pensarla.

Debí quedarme con el sapo, el si valía la pena y no trataba de ser una ilusión óptica.

Y me ofreció su corazón cuando tu te habías llevado el mio. Me negué a ello; pensaba que regresarias.

Otra cosa.. A las princesas no se les mira el tamaño del vestido ni de su tiara. Se les mira el tamaño del corazón.