Cuando hacemos los votos de amor,aceptamos cada cosa,cuando estábamos frente al altar sellamos el pacto con el famoso refrán que jamás será olvidado.
"ʜᴀsᴛᴀ ϙᴜᴇ ʟᴀ ᴍᴜᴇʀᴛᴇ los sᴇᴘᴀʀᴇ."
El matrimonio es romántico,lindo y encantador,el pacto que hacem...
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—Jesucristo.— Jadeó Jeff,una vez que se recostó a mi lado.
— No creo que sea buena idea que lo andes mencionando,cuando haces esto.— él soltó una risa ante mi comentario y yo también le seguí,me atrajo a él envolviéndome en sus brazos y volvía a darme besos detrás de mi oreja.— Oh,no hagas eso por favor.— Gemí agotada.
— De acuerdo.— dijo riendo.
Se suponía que no debíamos acurrucarnos,se suponía que solo era sexo y luego uno de los dos tenía que abandonar la habitación,pero era inevitable.
— ¿Cuando llega?.
— ¿Quien?.
— Tu esposo.
Había olvidado por completo,que él estaba en mi casa esta vez. Lo había dejado entrar,sin que nadie se diera cuenta,y con nadie me refiero a los sirvientes,me giré para verle a la cara. — Aún no,es muy temprano. Seguro esta con alguien,en estos momentos.
— Debería empezar a irme,a pesar de que es muy temprano aun,nunca se sabe.— dijo alejándose ligeramente de mi,se levantó,empezó a vestirse y dijo;— ¿Porque no vienes conmigo?.— pregunto mirándome a los ojos.
— ¿Que?.
— Voy a irme a Nueva Orleans. Tengo unos tíos que me esperan,la vida es genial allí y ellos son muy ricos.— Me senté en la cama,cubriendo mis pechos,Jeff se acercó a mi.— Podemos irnos,solos tú y yo. Puedes iniciar de nuevo,conmigo.
— No puedo hacer eso,Jeff.
— ¿Porque no?,¿que más esperas de un matrimonio como este?,él te engaño y seguro lo sigue haciendo,tú también lo haces,¿que esperas?.
Al escucharlo,me levante molesta de la cama y empecé a colocarme la ropa. — ¿Para que seguir con alguien como él?.
— No puedo simplemente tirar años de matrimonio,por la borda.
— ¿Pero si puedes seguir en esto?,no eres feliz Emma,lo sabes.
— ¿Y a ti qué más te da?.
— ¿Que?.
— Jeff,eres un niño. Tienes mucho por delante.— Me acerqué a él,sostuve sus mejillas y dije:— Tenemos diferencia de edad,es algo que tiene límites.
— Eso no me importa,me enamore de ti lo sabes,¿verdad?.
Jamás lo habría imaginado,porque Jeff era solo un chico de veinticuatros años qué tal vez quería experimentar,mientras que yo estaba haciendo estas cosas por despecho.
— Lo nuestro jamás duraría,Jeff.
— ¿Porque no?.
— Porque no tenemos la misma madurez,no lo sé...no insistas con esto.
