Lo que las fauces deja (Little Nightmares 2)

Capítulo 5: El mensaje.

Narra six:

Sobrevivir en las fauces no era para nada sencillo, el lugar literalmente estaba hecho para monstruos para que pudieran comer sin tener ninguna preocupación en adelante, y siendo honesta no tarde mucho en darme cuenta de que también comían niños Pues en muchas ocasiones llegaba a las habitaciones en donde ellos se encontraban, aquellos niños parecían ya no tener ganas de vivir Pues sabían lo que les esperaba y realmente me sentía triste por ellos no podría ayudarles y eso me hacía sentir impotente.
Es por eso que me considero una persona diferente a ellos pues Mi instinto de supervivencia no ha sido más que una simple reacción al querer sobrevivir en las fauces.

Todos habíamos tomado la decisión de dejar el edificio en el que estábamos decidimos movernos hacia la escuela la cual se encontraba prácticamente al lado de nosotros, Pero por supuesto debíamos asegurarnos de que todo estaba bien ya que no era seguro y los monstruos aún seguían rondando por los lugares.
Me encontraba explorando una de las habitaciones en las que estábamos buscando algún refugio para poder quedarnos un tiempo.
En la habitación se encontraba un espejo que estaba roto eso me recordó el momento en el que estaba en las fauces y estaba siendo atacada por la dama lo cual fue muy extraño, en ese momento ella no me hizo absolutamente nada, únicamente me miró fijamente como esperando alguna reacción por mi parte eso sin duda fue lo más extraño que pude haber vivido en las fauces lejos de Tin Man. Después de algunos minutos al quedarme pensando en eso decido salir del lugar para poder continuar con mi exploración.

Finalmente llegué a una de las habitaciones, parecía tener luces encendidas. Decido entrar lentamente hacia la luz, abro la puerta siendo lo más cuidadosa posible, escucho unos pasos acercarse, frente a mi veo una Tarja, decido entrar a los cajones de abajo para esconderme, dejo entre abierta la puerta para observar. Parecía una mujer delgada con una falda gris, una camisa beige abotonada, calcetines blancos y merceditas negras. Su cabeza es grande en relación con su cuerpo y muy arrugada. La tenía frente a mi, podía escuchar su respiración firme y corta.

Podía escuchar platos moviéndose, los estaba lavando. Después de unos minutos se aleja de la Tarja, decido salir lo más sigilosa posible, abro la puerta lentamente para salir de ahí.

No se percata de mi, por lo que decido salir del lugar hacia el refugio el cual se encontraba muy cerca de donde estaba ella.

Finalmente llego, todos estaban en lo suyo, había corrido por lo que estaba muy agitada.

- te encuentras bien? - pregunta mono quien estaba acostado en la cama.

- acabo de ver al monstruo en la habitación de alado, tenemos que escondernos pronto -

Todos dejaron sus asuntos y se acercaron a mi two dá una señal de aprobación y salimos del lugar hacia el exterior, no sabíamos lo que había afuera, pero era mejor que quedarnos aquí y esperar a que nos encuentre.

Estaba lloviendo muy fuerte, intentamos buscar algún lugar seco pero era imposible, two estaba en el frente buscando  un lugar seguro, seven tomaba de la mano a eight y la guiaba para que no llegase a tropezar, mono también me tomaba de la mano, me jalaba y a decir verdad dolía un poco.

Después de un rato encontramos un lugar seco, era un callejón, estaba oscuro, llevábamos armas en las manos, cosas que recogimos en el camino. Two tenía una linterna en las manos la cual encendió dejando ver bien el lugar el cual en realidad no era tan malo, solo estaba oscuro.

- por ahora este va a ser nuestro refugio, al menos hasta que encontremos uno mejor - la voz de mono, no era normal, estaba agitado.

Nos quedamos ahí por un tiempo, no queríamos arriesgar lo poco que habíamos conseguido de ese lugar, tarde o temprano debíamos regresar por las cosas.