Lo que las fauces deja (Little Nightmares 2)

Capítulo 22: melancólico.

Narra six:

Todo estaba listo, finalmente después de mucho tiempo lo habíamos terminado, parecía ser ligero y solo entraba una persona la cual se encargaba de manejar, obviamente esa persona sería yo, el problema principal es que aún no era probado, no había tiempo para eso, era todo o nada.
Lo colocamos en la punta del árbol de los hermanos, el viento era perfecto, con el poco conocimiento que teníamos intentamos calcular la distancia y el tiempo de vuelo, incluso tenía una palanca para aterrizar y también un volante, aunque seven me dijo que debía tener cuidado al momento de dar las vueltas, ya que debo utilizar todo mi peso para balancear el avión.

Todos estábamos arriba del árbol, estaba muy alto daba mucho miedo, incluso two estaba asustado, tenía vértigo y eso debo admitir que es algo nuevo que conozco de el.
Esperamos unos momentos a que el viento sople en la dirección correcta, debíamos ser precisos o no funcionaria.
Después de unos minutos el viento estaba de nuestro lado, ya podía moverme, me subí al avión, seven y two empezaron a empujar con fuerza, y justo antes de caer escucho la voz de seven.

- suerte six - acompañado de una mirada preocupada.

A decir verdad yo también lo estaba, si ni funcionaba podría morir por la caída, porque no tengo ninguna forma de salir en caso de que el avión se estrellara.
Ambos empujaron con fuerza, el avión poco a poco se movía, hasta que finalmente siento el impulso de la caída, empiezo a caer con velocidad, jalo la palanca a mi izquierda lo más rápido que mi cerebro pudo, una manta echa de hojas se extiende, estaba a punto de llegar al suelo, cierto los ojos con temor, después de unos segundos dejo de sentir turbulencia, abro los ojos y me doy cuenta de que estaba volando varios metros sobre el suelo, eran sentimientos extraños, sentía que mi corazón latía rápido, estaba muy emocionada, una parte es por volar por primera vez, la otra era que finalmente encontraría a mono.

Después de unos minutos de vuelo, balanceaba mi cuerpo de un lado a otro para dirigir el avión, no era tan difícil, el verdadero problema era aterrizar, porque una vez jale la palanca las telas que permiten que vuele bajarán y me hará caer en picada.

A lo lejos podía ver la torre, si que era más grande que los otros, tenía un ojo en el centro que parecía moverse, como si estuviera vivo y consciente, mientras más lo miraba más nerviosa me sentía, muevo el avión a los lados, intentando buscar con la vista algún lugar donde pueda aterrizar.
Pude observar un terreno libre, con miedo tomo la palanca, respiro profundamente y la muevo con cuidado, debía ser lento y preciso, cualquier falla me haría caer en picada y en la altura en la que encuentro eso seria mi final.
Empiezo a descender con lentitud, sentía dolor en mi muñeca debido a la fuerza que usaba para sujetar la palanca.
Después de mucho esfuerzo finalmente estaba en el suelo, me sentía aliviada y mi corazón se sentía tranquilo, pero no duró mucho ya que  muchos monstruos se encontraban a mi alrededor, two tenía razón, se concentraban todos en el centro de la ciudad.
Afortunadamente no se percataron de mi, con mucha cautela me dirijo hacia la torre, ésta se encontraba sola al rededor, como si los monstruos intentaran evitar a toda costa acercarse a la misma.
Entro a una barricada de muros que tenía un hueco, era lo bastante grande y me permitió entrar sin problemas.
Del otro lado del muro se encontraba la torre, más cerca era mucho muy intimidante, podría jurar que incluso la escuchaba respirar.
Camino por los alrededores aprovechando que los monstruos no se encontraban.
Para mi mala suerte no había una entrada, no tenía puerta y las ventanas estaban cerradas, no me quedó de otra que usar una roca, golpee la ventana con la fuerza suficiente para romperla.

Luego de eso quiero entrar, pero un monstruo me sujeta, tenía una forma extraña, muy parecida a la de thin man, con la diferencia de que éste tenía un brazo enorme, sus ojos eran rojos y grandes, llevaba un traje oscuro y un sombrero. Me intento soltar de su agarre pero era imposible, tenía mucha fuerza.
Estaba por ceder, todo lo veía en Cámara lenta, el sonido que la torre emitía, los quejosos del monstruo, incluso el aire que paraba por mi cabello, todo era lento.
Empiezo a recordar, cuando me encontraba sola en las fauces, buscando la manera de pasar al día siguiente viva, el momento en el que encontré a mono, cuando me alimentó en mi desesperación, cuando escapamos de las fauces en un barco improvisado, cuando llegamos a la ciudad y conocimos a two y los hermanos, cuando perdí a mono en la lluvia, cuantas veces estuvimos en peligro?, la verdad es que ya hasta perdí la cuenta.
Pensar que todo lo que logré, la familia que obtuve en las fauces, todo lo que amo, lo perderé por mi descuido, me sentía tan mal conmigo misma.
Pero algo en mi no se rendía, quería hacerlo pero algo en mi interior impedía ese sentimiento, de verdad moriría aquí?.
No lo podía aceptar, algo en mi despierta, el estómago me dolía, sentía mucha hambre, no entendía lo que me pasaba, pero de alguna forma mi cerebro lo podía comprender. Una fuerza invisible me suelta del agarre del monstruo, lo mando a volar al otro lado de la muralla.
Aún me sentía terriblemente mal, sentía que debía comer algo o moriría.

Pero no tenía tiempo para pensar en eso, justo cuando hiba a entrar por la ventana, me encuentro con mono, tenía varios golpes en su rostro, su nariz sangraba y estaba agitado.
Ambos nos miramos confundidos, fué ahí cuando no pude más, estaba en mi límite, me abalanzo a el con fuerza, mi mente estaba en blanco, no podía pensar con claridad, muerdo su hombro, quería comer algo, no se lo que me ocurrió, pero estaba apunto de matar a mono.

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