Epilogo:

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HOLA!!! Ay perdón, ya estoy gritando, debe ser la emoción jeje, lo que pasa es que nunca antes había hecho esto de contar mi historia... La verdad no se como comenzar, supongo que todas las historias tienen un inicio, pero no estoy segura si esta tiene uno. Solo voy a decir que es una historia ordinariamente extraordinaria. Me gusta como suena eso. Y lo mejor es que todo empezó con un día como cualquier otro, el día mas lindo que recuerdo hasta ahora. Cuando lo vi, cuando él me encontró...

Wow wow wow wow, esperen. No debería empezar con eso, tal vez... definitivamente... Ay no... Voy a comenzar de nuevo, y mis modales?? jaja claro. Mi nombre es Abril, todos me llaman Abi (y aquí entre nos, me agrada mi apodo, es mas cómodo que "Abril"). Una característica fácil de ver en mí es mi larga y enrulada melena que, como me gusta decir para sonar poeta, es de "color café", al igual que mis bellas pupilas. Mis ojos son lo que más me gusta de mi cara (sin mencionar mis diversas pecas). Soy de una estatura mediana, creo que alcanzo con mucho esfuerzo el metro sesenta y es lo máximo. Soy de Riverside, eso es California. Mis padres son del centro de Los Ángeles, más cerca de la cuidad, pero decidieron que tener una familia aquí sería más "hogareño" y sinceramente creo que es un lugar hermoso.

Amo mi hogar. Es súper cálido acá, los árboles casi siempre tienen copas rojizas y en otoño la ciudad se torna de ese maravilloso color. Que por cierto, el otoño es mi estación favorita, pues quien no ama pasar por los árboles de distintas tonalidades y hacer crujir las hojas al pisarlas, o esa brisa fría por la tarde acompañada de una rica taza de café. Disfrutar de eso es una de mis más grandes pasiones. Además la gente en este lugar es muy amistosa, siempre se ven muy felices.

Mis padres están juntos hace 20 años. Su historia de amor es muy romántica, Ellos se conocieron cuando mi madre tenía 16 y mi padre 21 (SIII, LO SÉ). Mamá estaba sentada en la vereda frente a su casa, papá se le acercó, y luego de horas charlando le robó su primer beso. Acaso eso no es tierno? A pesar de la diferencia de edad supieron llevar bien las cosas y después de 3 años juntos, se casaron con mi hermano en camino y se mudaron aquí. Luego llegue yo a sus vidas, pero no se quedaron conformes con tenernos a mi hermano Logan y a mi, así que  tuvieron dos hijos más, Rupert y Saymon. A decir verdad es bastante bueno tener una familia tan grande por que nos protegemos mutuamente, y fuera de las peleas y el caos que son mis hermanos, los amo y estoy agradecida de tenerlos.

De pequeña siempre dije que haría mi casa en la punta de una de las colinas que hay por acá, sería una especie de señora de los gatos (y perros, claro) y que mi príncipe azul vendría en su corcel y seríamos felices en esa típica casa de dulces. Yo siempre fui bastante soñadora y aniñada. Muchos me decían que era demasiado incrédula, y nunca entendí a qué se referían hasta que algo cambió mi forma de ver las cosas. Pero claro, cuando una es tan solo una niña de 8 años imagina su vida tal y como en las películas que ve en la televisión, ¿Cómo podría imaginar que la vida iba a ser totalmente distinta?

Fue cuando tenía 13 que pude comprender a que se referían con "incrédula". Era mi primer año de preparatoria, acababa de iniciar una escuela nueva así que me costó un poco adaptarme, pero para mi sorpresa hice amigas fácilmente. Al principio, todos eran amables y querían ser mis amigos, o eso creí. Según parecía, todo iba bien, hasta que comencé segundo año y esos supuestos amigos empezaron a tratarme mal por el hecho de que me iba mejor en clases que a otros chicos. Se burlaban de mi por ser más estudiosa y bajita que las demás chicas y hasta decían que mi cabello era horrible. Me amenazaban y empujaban, me decían cosas muy crueles y todo por ser quien yo era. Un día creí que si yo cambiaba iban a dejarme en paz pero no lo hicieron, eso hizo que fuera peor aún. Meses después, antes de irme de esa escuela, me enteré de que todo había sido por un chico. Justamente el chico que me gustaba. Tal parecía a una de las chicas ("la líder", como la llamaban algunos) también estaba enamorada de él.

Un día como cualquier otro díaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora