—¿Rey Jeon, podemos hablar? —Min YoonGi se había acercado a su mejor amigo luego de la reunión, tenía inquietudes, pero no tenía con quién desahogarse.—YoonGi deja las formalidades, puedes decirme Jung Kook y claro, eres mi mejor amigo y siempre tendré tiempo para tí —se giró abandonando la ruta a la que iba, ya no se perdería por ese pasillo hasta llegar a su despacho— ¿Almorzamos?
YoonGi sonrió, cosa que pasaba una vez cada siglo y al Rey no pareció disgustarle su acción, había golpeado en forma de broma su brazo izquierdo arrugando un poco el traje negro de Jeon.
—¿Me estás invitando a una cita? —preguntó alzando las cejas divertido.
—Tal vez —el Rey soltó una pequeña risa nasal, había extrañado pasar tiempo junto a su mejor amigo, el trabajo y los territorios que debía mantener lo tenía siempre ocupado.
—Nunca cambies, Jung Kook —pidió con sinceridad, no sólo porque sin Jeon posiblemente todos estuvieran bajo el mando del Lord Choi, si no porque perdería a su mejor amigo, ese que lo acompañó a lo largo de su infancia.
—Jamás, necesito joderte la existencia cada segundo —rió por lo poco respetuoso que había sido, refiriéndose al Lord Min y líder de la gran manada del territorio Ónix.
—Vamos a almorzar, muero de hambre.
Ambos líderes de las manadas por derecho caminaron uno al lado del otro, atravesando ese gran pasillo con una alfombra roja en el centro y cuadros decorando el gran trayecto, hasta las escaleras de madera clara, bajaron con clase mientras los guardias de Jeon los observaban por el rabillo del ojo, debían mantener a su Rey a salvo.
Caminaron por el espacio abierto con piso de madera hasta dar con dos puertas dobles de madera blanca que, fueron abiertas por dos Betas que trabajaban para el gran castillo del jóven Jeon. El Rey al darse cuenta del gran banquete que había en la mesa, le pidió a una de sus empleadas que le acomodara un puesto al Lord Min porque hoy lo acompañaría a almorzar.
El líder de todos los territorios siempre almorzaba solo, sus hermanos preferían comer en otras partes del castillo o simplemente, comer a otras horas saltando la dieta estricta que debían llevar para mantenerse saludables.
Nam Joon prefería mil veces almorzar solo en la biblioteca, mientras leía algún libro que llamara intensamente su atención; mientras Taehyung comía cualquier cosa a las afueras del castillo de su hermano menor, posiblemente buscaba una pareja con la que estar ya que, se acercaba la edad para ser emparejado.
—Por favor, déjenos solos —pidió el Rey sentado en un extremo de la mesa.
A su lado derecho se encontraba su invitado, en frente estaba servido el gran almuerzo digno de un Rey, justo en aquel plato fino blanco había carne de primera cocinada a la plancha con algunas verduras (Papa y zanahoria), arroz con champiñones y sin olvidar, los pimentones rellenos de ensalada César, acompañando su plato con un fino vino tinto.
—Esto si es comer —opinó asombrado el Lord Min.
—¿Qué te sorprende tanto? —el Rey no encontraba la causa de su comentario, todos deberían comer de aquella forma balanceada y variada— ¿Quieres que te preste a mi chef una semana?
El Lord Min rió ante su pregunta, pero muy en el fondo no la negaba y menos si su mejor amigo se lo estaba preguntando de forma seria.
—No se cultivan tantos vegetales, ni se crían tanto ganado como para alimentarnos de ésta forma, Jung Kook —al introducir un poco de aquella deliciosa carne cocida a la perfección, expresó con su rostro lo que sus papilas gustativas estaban degustando— ¡Está delicioso!
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Eʟ Aᴍᴏʀ ᴇs ᴘᴀʀᴀ Dᴇ́ʙɪʟᴇs || ᴊᴇᴏɴ ᴊᴋ. (ᴏᴍᴇɢᴀᴠᴇʀsᴇ)
Fanfiction⚝ Seis territorios, una corona y un salvador ⚝ Jeon Jung Kook, hijo del Lord Kim y próximo líder de los territorios Kim, se convierte en Rey de los seis territorios tras volver de la muerte con un propósito claro: vengar la muerte injusta de su...