BOSSA NO SÉ [BNHA]

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La siguiente prueba era caballería, y para mala o buena suerte, algunos de otros cursos llegaron a mi para participar conmigo.

—No es por ser mamona, verdad, pero no sé cuáles son sus quirks. —Reí con nerviosismo.

—¿Puedo ser de tu equipo? —Preguntó aquel chico de cabello morado.

—Justo eso les estoy... —Y por un momento me desconecté de mi cerebro.

Sentía la presencia del chico en mi cabeza, me extrañé ya que nunca me había pasado algo similar, pero lo que él no contaba, es que justo dentro de mi ser estaba toda la vida salvaje con la que yo contaba al transformarme y pelearon contra el chico haciéndolo salir de mi mente.

—¿Tú quirk es ese? —Pregunté viéndolo a los ojos, parecía asustado y sorprendido. —Me agradas, seremos equipo.

Tras elegir a otros dos alumnos, decidimos que Shinso estaría arriba y nosotros abajo. Él insistió en controlarlos, pero yo me negué.

Yo era su frente, Ojiro su izquierda y el otro chico su derecha.

Antes de empezar, hablamos sobre lo que yo haría, y bueno, debía transformarme en un rinoceronte. Los tres chicos se montaron en mi espalda y entonces la batalla comenzó.

Al estar todos en busca de Izuku, quién voló por los aires, nosotros aprovechamos y robamos unos cuantos puntos sin que se dieran cuenta.

En varios intentos, solo nos robaron una bandana, y al final quedamos con 705 y 402, lo que sumaba 1107 puntos. Pasamos a la final siendo el tercer equipo.

La siguiente y última fase era pelea de uno contra uno, pero Ojiro y el otro chico decidieron salirse de la competencia al no recordar nada. En su lugar metieron a dos chicos del 1-B.

Eso me hizo pensar que Shinso me mintió y usó su quirk en ellos.

Me tocaba contra Mina, así que estaba algo, muy, relajada.

Después de unas cuantas batallas, un gran iceberg por parte de Todoroki, finalmente me tocaba a mí.

Mina y yo caminamos hacia el lugar de la batalla.

—¡Hirai Wheein, la chica que puede convertirse en cualquier ser vivo posible, la chica más fuerte del curso de héroes 1-A!

—¡No digas mentiras, no soy la más fuerte! —Regañé a Mic.

—¡Bueno, bueno, la chica con el kosei más fuerte de todos! ¡Y Ashido Mina, ¿saldrá algo de esos cuernos?!

—¿Sin resentimientos? —Sonreí y ella se cohibió.

Midnight dio el pase a la batalla, y yo no dudé en convertirme en Todoroki para usar su hielo, y luego su fuego, así consecutivamente para hacer retroceder a Mina, pero ella en una de esas se me escapó.

—¡Hirai finalmente decide mostrarnos de lo que es capaz! —Exclamó Mic.

—Eres escurridiza. —Sonreí.

Me convertí en Shinso, Mina lanzó su ácido dándome cerca del pie.

—¡Mina, ayuda, quedé atrapada! —Exclamé aprovechando que por el humo del fuego, ella no podía verme.

—¿¡En donde...!?

—¡Hirai usó el kosei de Shinso Hitoshi para atrapar a su víctima!

Volví a transformarme ésta vez en un oso, corrí hacia Mina y la empujé fuera de los límites.

El humo se disipó y todos pudieron ver qué efectivamente, Mina ya no estaba en el lugar de batalla.

—¡Hirai gana la ronda! —Exclamó Midnight.

Ambas salimos de ahí yendo a nuestros respectivos lugares.

—Ah, eres demasiado buena, Hirai. —Lloriqueó Mina.

—Lo siento. —Sonreí mientras reía. Puse mi mano en mi cabeza, y efectivamente los cuernos habían crecido y sobresalían un poco de mi cabello, por lo que con agilidad logré taparlos con cabello.

Otras peleas más y finalmente era el turno de Bakugo y Uraraka.

Estaba algo preocupada, pero sabía que Bakugo no la lastimaría por mucho que quiera ganar. Estaba literal pegada al barandal, para intentar ver más de cerca la pelea.

—¡Que comience el octavo enfrentamiento! —Exclamó Mic.

Uraraka corrió rápidamente hacia Bakugo, con la intención de tocarlo y hacerlo flotar, pero no contaba con que Bakugo atacaría desde abajo.

Pude ver el uniforme de Uraraka ir hacia Bakugo, éste lo explotó pero Uraraka salió por detrás lista para atacarlo. Pero ese imbécil tiene muy buenos reflejos, por lo que también la atacó mandándola lejos.

Su pelea se dedico a que Uraraka intentara ir hacia él, Bakugo explotar el suelo y de esa forma atacarla. Tanto así que todos los héroes que veían la batalla comenzaron a abuchear.

—Esos cretinos. —Gruñí viendo a los que abucheaban.

—La multitud comienza a abuchear, pero honestamente yo también pien... ¿¡Un codazo!? ¿¡Qué haces!? —Exclamó Mic.

—¿Quienes dicen que está jugando, son realmente profesionales? —Preguntó Aizawa. —¿De hace cuántos años? Si lo dicen en verdad, no tiene sentido que sigan mirando, ¡Así que mejor vayan a casa! Vayan a casa y comiencen a buscar otra ocupación. Bakugo está siendo cuidadoso porque sabe la fuerza de su oponente, quién ha logrado llegar hasta aquí. Es porque de verdad trata de ganar y eso por eso que no puede bajar la guardia.

Mientras él hablaba, una roca me cayó en la cara, y quise mentarle la madre a quien me la haya lanzado desde el cielo, por lo que mire hacia ahí. Y me sorprendí al ver un montón de escombros flotando en el cielo.

Uraraka juntó sus manos y los escombros comenzaron a caer.

—¿¡Una lluvia de meteoros!?

—Debiste haberlo notado.

Bakugo levantó su mano, y fue en ese momento que Uraraka corrió para atacarlo. A pocos centímetros de tocarlo, Bakugo hizo una gran explosión que la lanzó lejos.

Uraraka estaba en el suelo, ya débil.

—¡Bakugo explotó todo, y destrozó por completo el plan de Uraraka!

Noté que Bakugo miraba su mano, por lo que deduje que quizás se la había lastimado o algo así.

Uraraka se levantó una vez más, y Bakugo volvió a sonreír corriendo hacia ella para seguir la pelea. En cuanto Uraraka se giro para también seguir, se desplomó en el suelo.

—¡Uraraka! —Exclamé.

—¡Uraraka ha caído! —Habló Mic.

Ella intentó continuar, pero su cuerpo ya no dió para más, había llegado a su límite. Midnight se acercó hacia Uraraka.

—Uraraka está fuera de combate, Bakugo avanza a la segunda ronda.