-Ay, Kenma, no pueden ser más adorables -exclamó Yachi con brillos en los ojos mientras frotaba con su mejilla los pequeños zapatitos de lana.- Estoy tan ansiosa por conocer al bebé, ¡Y falta tanto!
-Pero... ¿Qué te hizo cambiar de opinión de esta manera? Te veías tan decidido hasta la semana pasada. ¿Kuroo se hará responsable? -agregó Hinata.
-¿Kuroo-san? ¿Él es el padre del bebé? -Yachi, quien desconocía aún el paradero del otro progenitor, soltó los zapatos al suelo de la impresión. Hinata intentó taparse la boca después de hablar, pero ya era demasiado tarde.
Kenma miró a los dos, agotado, por la incoherencia de sus amigos. Los dos estaban sentados en la cama de él, dentro de su casa. Últimamente, no podían dejar solo al omega, entonces pensaron hasta en mudarse con él, ya que la casa era excesivamente grande. Kenma negó rotundamente, no podría vivir con personas tan alteradas.
-Ya les dije. Es la primera vez en meses que mi abuela me reconoce de inmediato, y fue porque quiere que tenga al bebé. Ya estoy tomando medidas para que eso sea posible.
-Kenma, ¿qué medidas? ¡Dile al padre que se haga cargo!
-No, no debe saber. Es mío, ¿escucharon? No importa qué cosas haré, pero voy a vender esta casa y con eso viviremos hasta que consiga otro trabajo, aunque para entonces...probablemente pasen como tres años.
-Yo...no conozco al alfa pero...creo que también tiene derecho a saber que tendrá un hijo...-murmuró la rubia, introvertida y avergonzada por meterse en algo que creía que no le correspondía. Sin embargo, Kenma no pudo negar esto, pero pidió a sus amigos que respetaran la decisión que él tomó, y por favor, vean al futuro bebé solamente como hijo del omega.-¡Bueno, una futura madre debe alimentarse bien! ¡Vamos Kenma, a comprar comida de verdad y no esas cosas rápidas que comes! -Yachi intentó ahuyentar el ambiente pesado, y a las rastras, sacó a Kenma de la casa.
"¿Qué demonios hará este idiota?" pensó Hinata, mientras veía los zapatos tamaño miniatura sobre el sofá. Nervioso, no pudo evitar la curiosidad, ya que sabía que su amigo tendía a tomar decisiones peligrosas. Tomó la laptop abierta del menor, pensando que allí encontraría algo. Fue al historial, y debajo de unos vídeos tutoriales para distintos juegos, un enunciado le llamó la atención: ¿Cuánto cobran los omegas taxi?. ¿Qué era un omega taxi? Googleó, y sus ojos no pudieron esconder el asombro que sentía. La cosa era sencilla, un omega que se dedica a asistir los ruts de alfas de clase alta, por lo tanto, deben someterse a todo lo que ellos les piden dentro de una hora. La suma de dinero era altísimo, no cabía duda. Pero, ¿Qué iba a hacer su amigo? Ser maltrato por distintos alfas desconocidos, para poder sustentarse hasta que su vientre empezara a expandirse. Era una locura, someterse a numerosos ruts en menos de dos meses. ¿Cómo lo podía ayudar?
Cerró la laptop, y fingió no haber visto nada. Pero no por eso, iba a quedarse de brazos cruzados.🌙
-Por dios, eres tan hermoso como lo dijeron quienes te recomendaron -una joven beta, que Kenma desconocía, lo estaba vistiendo en el cuarto de un hotel. Le puso un kimono largo y bordo, de cuello alto; obvió el maquillaje adecuado, lo peinó. Lo que realmente llamó y empezó a asustar al omega, fue un bozal que rodeó su boca en ese instante.
-¿De qué se trata esto?
-Mi jefe tiene gustos extraños, y ve a los omegas como simples mascotas, pero todo saldrá bien si haces lo que él quiere. Además, eres tan lindo que te tendrá compasión. -Kenma aceptó que debía hacerse cargo de su decisión, y se preparó mentalmente para la hora que lo esperaba.
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Kuroken-Todas tus partes son mías ( Kuroo x Kenma)
FanfictionOMEGAVERSE -contenido sensible Tetsurou Kuroo es un alfa dominante de 21 años, estudiante de una universidad privada y prestigiosa. Un día, siente un aroma atrayente por parte de un joven omega, el cual pasaba todos lo días por la calle en frente de...