Capitulo 28: Entrometido II parte ____ no me dejó conducir de camino al aeropuerto, seguía sin confiar en mí a pesar de haber sacado mi licencia esa semana. Llegamos justo a tiempo para procesar los documentos y pasar las maletas, abordamos el avión casi corriendo mientras la voz monótona de una mujer anunciaba que en cinco minutos el avión despegaría. —Genial, iremos al caribe —dijo ____ cuando el avión se puso en marcha. —Para pasar nuestra luna de miel —añadí, acariciando su mano en su regazo. Pero éstas le temblaban y las tenía sudorosas. Supe que estaba nerviosa, incluso más que yo de pasar dos semanas solos sin nadie conocido a nuestro alrededor, de saber que ya éramos mayores de edad y casados. Podíamos hacer cualquier cosa, la que quisiéramos y nadie nos podría regañar. Yo también comencé a ponerme nervioso. Pasamos todas las horas de vuelo durmiendo. Antes de que mi celular se quedara sin señal, recibí un mensaje de Freddy que decía: “Nada de sexo en el avión, eso es muy antihigiénico. Esperen a que estén el hotel :D” Me hicieron guardar el celular antes de que tuviera la oportunidad de responderle con un grandísimo “IDIOTA”. ______ se durmió en seguida sobre mi hombro. Me puse a pensar que si las cosas seguían así ella se transformaría en una especia de esposa-hija a la cual tendría que proteger. Me encantaba tenerla a mi lado, pero lamentablemente no podía cuidarla como a una niña. Tendría que madurar. Ni siquiera pude cuidar a mi madre cuando mi padre la abandonó. No era la persona más indicada para proteger a _____. La amaba y estaría a su lado siempre, pero tenía que admitir que no era el eslabón más fuerte de esta relación. Organicé la boda, la luna de miel y todo eso sacando la mejor calificación de mi clase, pero esas cosas no implicaban velar por los sentimientos de ____, la persona más importante para mí. Así que tenía dos opciones, aprender a cuidarla o que ella madurara. Y no sabía cual de las dos era más utópica. Sin embargo, haría todo lo imposible por que esta relación funcionara. O dejaría de amar a los gatos y _____ de creer en las hadas. (…) El avión se deslizó al aterrizar, fue tan suave que no sentí cuando tocó piso firme y una azafata nos tuvo que despertar. Lo primero que notamos fue que hacía mucho calor. Al bajarnos, nos recibieron con unas guirnaldas florales que nos colocaron en el cuello. _____ lucía radiante, el ambiente, las flores, el clima, las cosas que descubriría en estas islas se notaba a kilómetros que era lo suyo, así que yo también sonreí cuando nos indicaron que recogiéramos nuestras maletas para ir al hotel y luego visitar la playa para una fiesta de bienvenida que hacían para los turistas. —¿Crees que habrán bailes y esas cosas? —me preguntó cuando nos subimos a un taxi enviado por el hotel. —No lo creo, esto no es Hawai, sino el caribe —me golpeó en el hombro y besó mi mejilla enseguida. —Ya lo sabía, te estaba poniendo a prueba solamente. Ambos reímos de su mentira. Me ocupé de todo lo demás, le dije a ____ que podía ir a dar un paseo por la piscina del hotel mientras yo acomodaba nuestras cosas. No se opuso y salió corriendo a jugar con el agua. Nuestro cuarto era grande, mucho más que el de _____ en su casa. Tenía una cama matrimonial enorme, y casi una sala de estar. No demoré demasiado en acomodar las cosas. Bajé cuanto antes a la piscina a hacerle compañía a ____, estaría sola y no conocía el idioma y a menos que alguien le hablara en inglés, estaría perdida. Pero lo que vi fue totalmente distinto a lo que yo imaginé. No estaba sola, sino que conversaba con alguien con los pies sumergidos en el agua. Por la distancia no pude ver quien era, pero estaba seguro que era un chico. Y recordé el día que coqueteó con ese chico en aquella tienda y me enojé y la ignoré alrededor de un mes. Fue el peor mes de mi vida, tener que soportar a Sandy y agonizar por no permitirme si quiera a mirar a _____ por orgullo. Y ahora sucedía lo mismo. Con la diferencia de que antes sólo éramos prometidos, ahora éramos marido y mujer, algo legal. Y no podía engañarme, no podía conversar con otros chicos sin mi permiso, simplemente no podía. Yo no miraba a otras chicas, eran invisibles ante mis ojos ¿por qué ella no podía hacer lo mismo con los demás? Caminé a toda prisa, necesitaba alejarla de aquel estúpido. Ella era mía. No me preocupé de verle el rostro a ese idiota, sólo lo empujé al agua y tiré del brazo a _____ para que se levantara y se fuera conmigo. —¡Hey, Jos! ¿Qué te sucede? —me preguntó, como si fuera complicado de entender. Me reprimí, no le gritaría. Jamás lo haría. —No hables con otros chicos, es nuestra luna de miel. Nuestra —le dije en un susurro para que las demás personas que observaban mi ataque de celos no se enteraran de lo que ocurría. —¿Otros chicos? —dijo incrédula. —¿A quién llamas “otro chico”? ¡Se terminó, quería ser tu amante, pero ahora no! ¡Lo nuestro acabó, Jos! Esa voz, esos gritos y esa actitud. ______ sonrió y acarició mi mejilla mirándome con ternura. Me dio la mano y la apretó fuerte, como cuando yo lo hacía para disculparme. Freddy salió del agua, con la ropa empapada y me fulminó con la mirada. —¿Por qué hiciste eso, Jos? ¡Creí que teníamos algo especial! Pero no pude responderle, es que no era posible que él estuviera aquí. —¿Qué haces aquí, Fred? —¡Pues animar sus noches! —gritó y todo el mundo rio. --------------------------------------------- Jaja este Fredy se paso de payaso COMENTA la parte que mas te gusto para que sigua :33

ESTÁS LEYENDO
ERES LA CANELA DE MI ARROZ 《jos y tu 》
Lãng mạnescrito x mi amiga deyna bustos espero q les guste