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— Oye, sabes que te quiero pero puedo manejarlo -Minho se separó.

— Lo sé y lo siento mucho, creo que –no pude terminar de hablar porque Minho estampó sus labios contra los míos de nuevo. Nos separamos por la única razón de que ambos necesitábamos oxígeno.

— ¿Acaso no puedes dejar de hablar?–sonrío mientras me miraba fijamente a los ojos, y acunaba mis mejillas con sus manos.

— ¿Me estás diciendo que soy una charlatana?

— Tal vez

— Eso es grosero

Otra vez me callé porque Minho me dió otro pequeño beso.

— Esa es mi forma de decir perdón, así que, ¿me perdonas?

— Mmm, no me convences, creo que deberías hacerlo de nuevo –sonreí pícaramente, y claro que no hace falta explicar lo que pasó nuevamente.

(🥀)

— Oh dios, mañana es tu cumpleaños, Hye –comentó Minho.

— ¿Lo es? Vaya, lo había olvidadodije sin mucho entusiasmo.

— Hey, ¿acaso no estás feliz por eso?

— Tal vez, es que la verdad veo mi cumpleaños como una fecha cualquiera, mis padres nunca me hicieron fiestas de cumpleaños cuando era pequeña. Además, ellos tenían una pequeña paranoia; siempre, pero absolutamente siempre que era mi cumpleaños ocurría algo malo. Cuando cumplí 6 años, murió mi perro, cuando cumplí 9 me perdí en la visita del zoológico de la escuela, estuve ahí casi todo el día porque se habían olvidado de mí y hechos más horrorosos pasaron en otros cumpleaños

— Bueno, pero ahora estás conmigo y mínimo un pastel tendrás. Te aseguro que nada malo pasará

— No hace falta, cariño

— No te pregunté si hace falta o no. Mira, si no quieres invitar a nadie más está bien, pero al menos el pastel tendrás

— Bien, ya que insistes

— Perfecto. Te prometo que nada va a arruinar el día

— Eso espero...

~Al otro día~

Me desperté porque Minho estaba gritando la canción de feliz cumpleaños mientras llevaba una bandeja, claramente era el desayuno. Me senté en la cama con posición india para más comodidad.

— Muchas gracias cielo, pero, ¿era necesario despertarme a los gritos? -reí.

— Sí, era necesario, porque sino ni siquiera despegas un ojo

Reímos y empezamos a desayunar, amaba estar así con él.
Al terminar nos arreglamos porque Minho quería ir a comprar algunas cosas para este día "especial".

(🥀)

— Cielo, ¿por qué compraste cosas de repostería?

— Comprar un pastel ya hecho es aburrido, así que es mejor hacerlo nosotros

— Ninguno de los dos sabe de repostería -reí.

— Para eso está internet, además, esto puede distraernos un poco y de paso pasamos más tiempo juntos

— Vivimos en la misma casa, estamos 24/7 juntos

— Ay ya, deja de arruinar el mento y ve a traer los delantales para no ensuciarnos la ropa, yo prepararé las cosas que necesitamos

— Está bien

Subí para buscar dichos delantales.
Estaba feliz, parece algo simple pero probablemente sea lo mejor que hicieron en uno de mis cumpleaños. Y sí, no teníamos idea de que iba a salir de ese mugrero que estábamos a punto de hacer, pero estaba segura de que íbamos a pasarla bien.
Estuve un rato buscando los delantales porque no recordaba donde los había dejado.

— ¡HYE! -gritó Minho desde abajo.

— ¿Qué sucede? -contesté.

— Ven aquí -dijo en un tono serio.

Justo encontré los delantales así que los agarré y bajé.

— No pasaron ni dos minutos y ya hiciste un desas...

No pude terminar de hablar porque me quedé en shock, él tenía la bendita carta entre sus manos. La palabra "enojo" era poca para la expresión que tenía en su cara.
¿Justo hoy? ¿Justo cuando creía que al fin tendría un cumpleaños lleno de felicidad?.

Imperfect // Stray Kids; Lee MinHo. [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora