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Veinte

Capítulo de regalo yyyyyyyyyyyyyyy porque tengo buen humor :B

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Me levanto temprano, como todos los días. Hoy, el tiempo no está de mi lado debido a la llamada que acabo de recibir. Una urgencia en el refugio requiere que llegue lo más temprano que pueda. Literalmente, bajo por las escaleras poniéndome los zapatos. Aunque no fuera a comer mucho, me tardará más pasar por Starbucks a buscar un latte de soja que buscar algo en la heladera.

—Señorita Lara, ¿ocurre algo?—pregunta Bridget muy preocupada, incluso alarmada de mi apuro.

—Urgencia en el refugio—respondo mientras abro el cartón de leche de soja y bebo un poco de ahí—. Lo siento, pero debo apresurarme—tomo unas tostadas que me indica la ama de llaves y empiezo a comer— ¿Y Shane?

—Se fue con su cámara hace un rato.

Un momento…

—Bridget… a mí me dijo que hoy tenía que ir a lo de Cook porque el jueves se va a la universidad—comento aletargando mis movimientos. Respiro agitada y termino de masticar el trozo de tostada que me había llevado a la boca.

—Oh no, el señor Shane me dijo que no le dijera nada, lo siento…

—¿Hay algo que no sé?—la miro con dureza. Estoy segura de que nada de esto es culpa de ella, pero muchas de las actitudes de Shane empiezan a hacer click, gracias a lo que Luke comentó en el parque el domingo.

—Yo… Señorita Lara—titubea la señora. Arregla su coleta con nerviosismo y golpea un poco su delantal, tratando de pensar qué decir—. No sé en qué está metido, pero solo sé que es algo que no me gusta.

Observo un punto fijo sin sentido y, aún pensando en eso, cruzo la puerta de entrada. Busco la bicicleta y me subo en ella, mientras la reja se abre automáticamente. Pedaleando al refugio, las palabras de Bridget invaden mis pensamientos. Su cámara… Salidas sospechosas… ¿Qué significa todo eso? ¿Qué secreto guarda Shane Hotchner? Mientras tomo el atajo del parque, mi mente es un revoltijo de cosas. Mi mejor amigo me oculta secretos, Ashton ha seguido adelante, algo ocurre en el refugio que hizo que la voz de Blair, quien nunca llora, se haya quebrado.

Miro al frente y estoy a una cuadra de mi lugar de trabajo, pero no me doy cuenta que voy a contramano hasta que oigo una bocina de auto. Muevo el manubrio para pasarme al otro carril, pero lo he hecho de forma tan brusca que me estrello contra un buzón y colisiono contra el ardiente asfalto. Siento mis rodillas y codos arder, además de que la cabeza me duele. Algunos se acercan a ayudarme, pero me levanto sin dificultades. Tomo la bicicleta como puedo, ya que se ha roto una de las ruedas, y varias partes de mi cuerpo sangran.

—¡Oh por Dios, Lara!—exclama Macy cuando entro al refugio, quien me tiende la mano y ayuda a que me siente.

—¿Estás bien?—cuestiona Blair, quien observa mis heridas y me toma del rostro—. Joder, dije que vinieras rápido, pero no tenías que matarte en el camino.

—No pasa nada—minimizo sorbiéndome la  nariz— ¿Qué pasó?

Se miran los unos a los otros, desde los de siempre hasta los nuevos reclutas. Mis dos amigas tienen los ojos llorosos, pero no sé por qué.

—¿Recuerdas a Janis, la perrita que rescataste el otro día?—comienza Aaron, uno de los muchachos que ayuda en curaciones. Asiento levemente, recordando a la hermosa mestiza que encontré con él cerca de las vías del tren. He pensado en llevármela cuando encuentre un lugar fijo, si es que no la han adoptado desde entonces—. Lara…

—Sé directo—demando exasperada.

—No resistió la operación y…

Bajo la mirada y suelto unas lágrimas, incluso sin llevar una expresión en mi rostro. Los demás se lamentan por no haber podido ayudar, me demuestran sus condolencias. Con honestidad, no sé cómo reaccionar. Me duele saber que un ser vivo ha abandonado este mundo, pero sabía que su condición era complicada.

—¿Sufrió?—pregunto mientras me levanto del asiento y cojeo un poco, lo que hace que las dos chicas hagan que me vuelva a sentar.

—Afortunadamente, no—alega Macy—. Siéntate, Carter fue por el kit de primeros auxilios.

El muchacho moreno llega con las cosas para curarme. Blair se queda conmigo y me ayuda a curarme. Mientras me venda las rodillas, hablamos de muchas cosas: el motivo de mi accidente, la vida, y la beca. Para obtenerla, tenemos que hacer voluntariado más allá del refugio. No obstante, debemos quedar en el programa para ser competentes para ello. Estamos emocionadas por hacerlo, he querido estudiar desde siempre. Cuando pasó el problema con mis padres, quitaron mi fondo universitario y lo donaron a la caridad. Sé que fue a parar a una buena causa, pero no lo hicieron para ello; fue una señal de que estaba desheredada y que ya no era una Jones.

El día sigue de forma normal y hemos avanzado mucho en el trabajo, pero mi jaqueca causada por el golpe hace que me manden directo a casa. Gracias a Aaron, mi bicicleta está reparada. Ninguno quiere que me vaya sola y así, pero es eso o que me quede trabajando, ya que hoy toca hacer el inventario y guardar en el depósito las donaciones de los hospitales. Saludo a todos mis compañeros y no hay ninguno que haya olvidado desearme que me mejore. Entre todos, hemos creado un lazo de amistad y compañerismo. Estamos unidos gracias a la misma pasión, y una misión en común.

Llego a casa y aún no ha llegado nadie. Los señores Hotchner deben estar trabajando, y Shane debe estar haciendo algo misterioso. Ese pensamiento me invade y la jaqueca aumenta. Tomo un analgésico a espaldas de Bridget, quien está pasando la aspiradora y apenas puede oírme. Subo las escaleras y me dirijo a mi habitación para descansar un poco. Sin embargo, me detengo frente a la puerta gris antes de la mía. Detrás de ella, la habitación de mi amigo. Giro el pobo, creyendo que estará cerrada con llave, pero no es así. De forma automática, se abre. Miro a ambos lados y me introduzco en el cuarto.

Lo que estoy haciendo no está bien y, en otras circunstancias, estaría penado por la ley. Aunque, esto podría incumbirme. No tengo idea qué es lo que me voy a encontrar aquí, solo espero que no sea nada malo. Reviso las gavetas de la cómoda; nada. El armario; nada. El cajón de la mesa de noche; NADA. Es verdad, su cámara no está, pero no tiene que denotar algo negativo.

Casi resignada, reviso la repisa encima de su cama. Sin darme cuenta, la golpeo con la cabeza y una caja se cae sobre la cama. ¿En serio? Acabo de lastimarme con el jodido asfalto, y ahora esto. Lara, tu torpeza es inagotable. Me sobo la cabeza soltando algunos sonidos de dolor. Observo lo que se ha caído: piezas de Lego y una pluma se desparraman, pero hay algo más: fotos. Por eso la cámara. ¿Estará investigando algo para la universidad de Periodismo?

Todos esos alegatos se van por el caño al ver la foto que está del lado del frente, justo por debajo de una dada vuelta. La tomo con miedo, y mi labio inferior empieza a temblar al ver que la persona allí es…

Es Ashton. Hay cientas de fotos de Ashton. En algunas estoy yo; en otras, Calum o Luke.

Antes de poder procesar lo que he visto, una nota arrugada rebalsa el vaso:

Buen trabajo, muchacho, mi esposa y yo te lo agradecemos.

Con estima..

—Herbert Jones—pronuncio en un suspiro, tirando la nota junto con las fotografías.

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Les dejo un gif de mi bebito lindo, quien representa al DESGRACIADOOOOO 

Soy una perra por dejárselas ahí pERO tenía que hacerlo. Espero que les haya gustado el capítulo. En el próximo se revela algo IMPORTANTÍSIMO. Quiero decir que se vienen las partes más fuertes del fanfiction (hablo de drama). Además que ya estamos en la recta final...

SOLO QUEDAN CINCO CAPÍTULOS. CINCOOOOOOOOOOO *llora*

Disfrútenlos, mis bebitos!

LOS AMOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO <3

xoxo T.J.