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— Dime que ya casi terminamos —dejé caer todo mi cuerpo en una de las sillas, estaba agotada.

— Tranquila, solo falta limpiar las mesas y ya —se acercó para darme la mano y ayudarme a levantar.

— Bien, hay que terminar, no creo resistir un momento más. —me levanté para seguir con la limpieza.

De nuevo, estábamos limpiando el laboratorio de química. ¿Qué clase de experimentos hacían ahí para que esté así de sucio todos los días?

Afortunadamente los maestros no dejaron mucha tarea, así que podía llegar a casa y descansar por un rato. Quería sugerirle a Nicol salir a comer o hacer algo juntas.

— ¡Listo, somos libres! —Eunwoo lanzó uno de los trapos con los que estaba limpiando al aire.

— Genial, guardemos todo y vamonos de aquí.

Con Eunwoo... pensé que todo estaría incomodo, el dia anterior fue un poco raro. Pero durante el almuerzo y mientras estuvimos limpiando, se comportó normal. Incluso me topé con el cuando salí de casa y llegamos juntos a la escuela. Habia pensado demasiado las cosas.

— Te ves muy contenta —Eunwoo me miraba divertido. Es que yo casi me ponía a bailar por la felicidad de irme a casa.

Caminamos juntos hasta la salida de la escuela.

— ¿El día de hoy es muy bello no crees? —seguí dando vueltas y dando brinquitos—. ¡Estoy tan feliz! Casi puedo ver corazones flotando a mi alrededor.

— ¿No se supone que ves corazones al rededor cuando estás con la persona que te gusta? —no entendía de que hablaba entonces—. ¿Será porque estoy contigo? Me disculpo, es el efecto que causo en todos.

Frase extraña del día, listo.

— No eres tu si no dices alguna tontería —comenzó a reír.

— ¿Iras a casa? ¿O saldras a algún lado?

— Iré a casa para salir con Nicol. Quiero compensarla por lo de ayer.

— Claro, ¿se enojó mucho, también se enojo conmigo? Al final, soy responsable de que hayas regresado tarde.

— No te preocupes, su enojo no dura ni cinco minutos. Es fácil hacer que se le olvide.

Suspiró aliviado.

— Es bueno saber eso. Me preocupaba no ganarme su aprobación.

— ¿Aprobación? ¿De qué hablas, porqué necesitarías su aprobación?

Dejó de caminar y me miró algo timido.

— Buen porque... veras, yo... t-tu... a m-mi...-

— Emily, te estuve esperando.

Ambos pusimos atención a la persona que se encontraba parada frente a nosotros con una gran sonrisa en el rostro, Moon Bin.

— Bin, pensé que ya te habías ido, ¿pasó algo? —aún llevaba puesto el uniforme de la escuela.

— No, quise esperar a que salieras. Es que... ayer no pudimos regresar juntos y te e-extrañé. —su sonrisa era tímida.

Que tierno es.

— Pero... tardamos dos horas en terminar, ¿estuviste aquí esperando todo ese tiempo en el frio? —cada vez refrescaba más. No podía creer que estuvo esperandome. Era muy tonto. Lindo, pero tonto.

— Si, te esperé —cambió de tema—. P-pero tranquila. Estoy bien abrigado, traje mis audífonos y escuché música mientras te esperaba, así no sentí larga la espera.. además —dió unos pasos para acercarse a mi y tomar mi mano—. Al final valió la pena porque pude verte.

𝘊𝘶𝘢𝘯𝘥𝘰 𝘓𝘢 𝘗𝘳𝘪𝘮𝘢𝘷𝘦𝘳𝘢 𝘓𝘭𝘦𝘨𝘶𝘦| 𝘌𝘶𝘯𝘸𝘰𝘰: 𝘈𝘴𝘵𝘳𝘰Donde viven las historias. Descúbrelo ahora