26. Amargo.

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/Narrador/

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/Narrador/

Un amargo sabor, una hinchazón que parecía no mermar y una mirada despreocupada hacían de Jimin un ser humano perdido. El vehículo seguía moviéndose al igual que las manos de Jungkook que acariciaban su rodilla raspada en busca de calmar mente y cuerpo, Jimin, en cambio, estaba completamente tranquilo y distraído del caos anterior, parecía no alertarse por nada.

Fue completamente sincero al respecto con el pelinegro, no le tomó demasiada importancia a aquello, solo quería llegar rápido, no le importaba lo que sucediera en el camino, lo consideraba como parte de lo que trataba de alcanzar, un destino por el cual tenía que pagar y cruzar a la vez.

-Te dije que estaba bien -Susurró el rubio dejando caer su cabeza en el hombro del pelinegro, considerando este gesto como un calmante de aquella mano ansiosa que lo tocaba instantes atrás -No duele, mantente tranquilo un poco.

El más alto asintió y acarició con sus labios la frente del otro, solo pudo responder escuetamente dado que ahora se encontraba en medio de un viaje. Todo era silencio, solo se podía percibir pequeños sonidos de envolturas de caramelos o de botones siendo presionados y demás ruidos comunes del vehículo en sí, podías trazar una fina línea en aquel transporte, y ninguno movería un pelo para romperla otra vez.

Un silencio clave, una situación por demás, complicada.

Los recién llegados se encontraban en los asientos finales, los cuales fueron entregados por Taehyung, estaban a solas...no del todo, pero era comprensible el que necesitaban un poco de espacio para respirar y llevar el viaje de la mejor forma posible después de toda la locura que había ocurrido.

El ambiente era pesado y se prefería mantener todo a raya, sobre todo el que Namjoon estuviera más tranquilo y así consiguiera aclarar sus ideas, tal vez con la disposición para disculparse una vez llegaran a destino, o pasaran cerca de este, al menos Jungkook prefería mantener todo bajo control.

-No luces para nada bien, ricitos -Comentó en un susurro Jeon a un Jimin que solo miraba el paisaje detrás del vidrio polarizado, el más bajo lo miró por el reflejo antes de girarse un poco para encararlo con medida distancia.

-No hace falta estar bien, no es nada -Respondió después de soltar una leve risa irónica, que solo pedía permanecer sin ser cuestionado por nada más. ¿Acaso hacía falta preocuparse por él? Oh vamos, Jimin estaba seguro que toda esa atención tenía un doble objetivo además del motivo de su viaje.

Alguien quería llevarlo a la cama.

-Debes estar bien, recuerda que yo soy el enfermo -Susurró el rubio ante la inoportuna cercanía de ambos con el resto de personas, no quería que aquel juego fuera escuchado por oídos ajenos. Salvo los de su verdadero destinatario.

Kook asintió poco satisfecho, pero de todas formas le dio la razón al rubio. No era el momento ni mucho menos el lugar para intentar elevarle la moral. Pues la tensión podía ser cortada con cualquier palabra equivocada escuchada por otros, eran momentos en los que Jeon podía estar seguro de que todo se escapaba de sus manos. Cosas como esas, era las que él evitaba a como de lugar.

《He bad》 kookmin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora