Non tornare a casa [Damiano David]

t r e s

–¿Vives aquí solo?– Pregunté observando cada rincón de aquel hermoso lugar.

–Ahora sí– Se acercó a mi y se paro justo en frente– Antes vivía con mi novia, pero hace 3 meses que lo dejamos y desde entonces, vivo solo.

–Oh, lo siento mucho– Aparté la mirada de él.

–Ya lo he superado, no fue una ruptura muy dura, solo que llevábamos casi 8 años juntos, y fue difícil.

No sabía que decir, me sentía mal por haber sacado el tema. Y él se dio cuenta.

–Hey– Agarró mi barbilla para que le mirase– No pasa nada, no lo sabías.

Sentir sus ojos observando los mios me hizo sentir muy bien.

Apartó la mirada y se alejó un poco– Voy a por la cámara, ahora vuelvo.

Asentí y seguí observando la casa. Tenía muchas fotos de conciertos. También tenía de quiénes supuse que eran sus padres. Al parecer Damiano tenía hermanos.
Seguí caminando y observando, hasta que note a Damiano justo detrás de mi.

–Está foto fue nuestro primer concierto después del Factor X– Dijo señalando una de las fotos que colgaban en la pared– Estábamos todos muy nerviosos, de hecho pensábamos que a Victoria le iba a dar un infarto.

No pude evitar reir.

–Y está fue el día de antes de ganar Eurovisión. No nos esperábamos lo que pasó.

Me quedé observándole, a su lado.

–Y está fue en el cumpleaños número 18 de Thomas. Le hicimos una gran fiesta y lo pasamos genial.

–Sois como hermanos– Dije al fin– Se nota que os queréis mucho, os defendéis entre todos y no dejáis a ninguno atrás.

–Llevamos mucho tiempo juntos– Se giró y se puso otra vez frente a mí, mirándome a los ojos de nuevo.– Los considero de mi familia.

Asentí. Volví a quedarme fascinada mirándole. Y aquí estaba de nuevo mi yo de 16. La que soñó con besarle cada noche, la que fantaseaba en conocerlo algún día. Aquí estaba ella. Acercándose lentamente hacía él. Acercándose hasta cortar la distancia uniendo sus labios en un suave beso.
Para mi sorpresa, o no tan sorpresa, Damiano no se alejó, continuó con aquel beso, cumpliendo los deseos de aquella adolescente.

Sus manos se posaron en mi cuello, haciendo fuerza y pegándome más a él.

Poco a poco nos separamos. Aparte mi mirada, él agarro mi barbilla y dió un corto beso en mis labios.

–Vamos o empezarán a montarse una película digna de un Óscar.

Reí. Salimos de la casa y caminamos hasta el estudio. El trayecto fue incómodo, no sabía como reaccionar a aquello.

(...)

–Va va Thomas una última vez– Ordenó Damiano.

–Eso llevas diciendo las últimas 27 veces.– Replicó el rubio.

No pudimos evitar reir.

Victoria se acercó un poco a mi. –¿Qué te pasa? Desde que llegaste con Damiano te noto distraída.

¿Distraída? Distraída mirando al dios griego que tenía enfrente dando órdenes al rubio, y esperando fuertemente a que Thomas hiciese lo mismo con Damiano.

–Estoy bien.– Dije seca.

–Vamos, algo te pasa.

No dije nada y me dediqué a seguir mirando la escena. Pero Victoria no se dió por vencida y siguió intentándolo.

–No pararé hasta que me lo digas.

–Y yo no diré nada– llevé el cigarrillo a mi boca y lo encendí– Por que no me pasa nada.

–Vamos Ari, podrás engañar a Victoria, pero no a mi– Era Guillermo ahora quien hablaba– Estás rara.

Estos dos estaban agotando la poca paciencia que me quedaba– De verdad, estoy bien, no os preocupéis, quizá solo esté algo cansada.

Parace que mi respuesta les convenció, porque no volvieron a preguntar en toda la tarde.

(...)

–Bien, mañana seguiremos– Dijo Ethan mirando el móvil– Ya son las 11 de la noche.

–¿Las 11 ya?– Pregunté levantándome rápido del sofá– Mañana hay clase y estoy cansada, me voy a casa.

–Te acompaño– Sugerió Damiano.

–Oh no– Me acerqué a él y le di una palmada en la espalda.

–Voy yo con ella, que ya es tarde y tambien estoy cansado– Dijo Guille llegando donde estaba.– Buenas noches chicos, ha estado genial.

Me despedí de todos y salimos del sitio.

–¿Pasó algo mientras no estaba con Victoria?– Pregunté dándole la última calada al cigarro.

–¿A qué te refieres?

–Vamos Guillermo, sabes perfectamente a lo que me refiero.

–Podría hacerte yo la misma pregunta, Adirane. Actuaste muy raro esta tarde.

–Besé a Damiano

–¿Qué hiciste que?– Menos mal que no estaba bebiendo nada, porque lo habría escupido todo– Tu yo de 16 años debe de estar contenta.

–Pues sí, sí que lo está. Y la de 20 también.

–Victoria y yo también nos besamos.

–Tu sueño desde los 15 se ha hecho realidad Guille.– Reí.

Me acompañó a mi casa. Me despedí de él y fui directa a la cama. Pusé el despertador y recibí un mensaje.

Damiano💜

-Buonasera, principessa.

No pude evitar sonreír.

Buenas noches💜

Buenoooo, el primer beso xdxd, espero que os este gustando la historia, y gracias por votar y comentar <3