Capitulo 2

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Los primeros rayos de sol apenas perceptibles por la niebla espesa, la humedad, las temperaturas bajas, todo perfecto para que alguien con poca energía espiritual agarrará un resfriado; pero eso no era un problema para jiang Cheng, para él el problema radicaba en que todavía no se acostumbraba a las temperaturas de Gusu.
Hoy se levantó más temprano de costumbre, a decir verdad la angustia y los nervios se lo están comiendo; así que se dirigió a tomar un baño. Ya listo con su atuendo formal decidió tomar el desayuno en la habitación, unos minutos transcurrieron para después pedir una taza de té.
Luego de unos minutos llegaron unos discípulos a entregar su encargó, para luego retirarse dando una reverencia. Jiang Cheng tomo la jarra y se sirvió una media taza de té y volviendo a ponerla en su lugar, tomo la taza de té entre sus manos y se la bebió de un solo tragó para luego desviar su mirada hacia la ficha que reposaba en la esquina de la mesa.
Hoy es el día- se repitió en la cabeza.
Viéndose por undécima vez en el espejo, tomo la bandeja donde venía el té ya frío, tomando la ficha y guardando la entre sus ropas para luego salir de su habitación. De camino se encontró con discípulo que decidió llevar la bandeja por él, a lo que no refutó; Se dirigió hacia el hanshi a paso firme, pero él más que nadie sabía que era un manojo de nervios por ver a la persona que siempre le había gustado.
En la puerta del hanshi se encontraba un jiang Cheng nervioso e indeciso, si tocar o venir mañana. – ¡No es hoy o nunca!- se regaño mentalmente y con ese pensamiento respiro profundamente para después tocar sutilmente la puerta – por favor retírese, no quiero recibir visitas- fue la respuesta que recibió del otro lado, haciendo que una vena se sobresaliera por el enojo acumulado.- ¿que se cree?, piensa que fue muy fácil venir aquí!??, ¡ Maldito engreído!- pensó enojado, apretando los puños- tranquilo jiang Cheng, solo hay que respirar y llevarla con calma- dijo respirando profundamente para calmarse, volviendo a tocar la puerta- por favor, quiero estar solo- fue la segunda respuesta que recibió, haciendo que toda la calma que tenía se esfumará.
No volvió a tocar la puerta, en cambió la abrió sin pedir permiso, entrando con paso firme y un zidian resplandeciendo en pequeños rayos morados, pero se mantuvo callado; viendo con sorpresa el total desastre en el que se había convertido Lan xichen, se veía totalmente miserable aunque él estuviera de espalda ya jiang Cheng se había dado una imagen de él. El cuarto era un desastre, si tenemos en cuenta que los Lan son extremadamente ordenados; En ella se podía encontrar muchos libros tirados por el suelo o amontonados alrededor de él, pinturas de flores de diferentes colores, pintura y más pintura regada por el suelo, y la flauta por fortuna estaba en la mesita del centro del cuarto.
Lan xichen se sorprendió por el repentino ruido más no volteó a ver quién era, ya que no era la primera vez que su tío o hermano lo sermoneaban o lo trataban de persuadir para salir. Hoy era un día normal para él, no podía dormir así que leía, no tenía hambre así que no comía, solo quería estar solo.
- ¿Qué fue lo que dijiste?- pregunto un jiang atrás de él que se acercaba lentamente.
La repentina voz lo hizo estremecerse y congelarse en el lugar. – Es jiang Cheng- pensó nerviosamente Lan xichen – El no debe verme así- sus manos temblaban, tenía muchos nervios y miedo de que jiang Cheng lo viera de esta forma.
Mientras más se acercaba jiang Cheng, más nervioso se ponía, así que solo tomo el libro que leía y se cubrió el rostro para que no lo viera.
- Te hice una pregunta ze wu-jun¿ No vas a responder?- dijo jiang Cheng posándose de frente a él. Lan xichen solo negó con la cabeza aún tapada por el libro. – Bien- dijo jiang Cheng tranquilamente, doblando sus rodillas en posición de loto se sentó , cruzándose de brazos con su mirada fija en él.
- Líder jiang- dijo Lan xichen suavemente.
Jiang Cheng pudo notar que su voz era súper baja, también un poco ronca, su piel era más pálida de lo normal, estaba más delgado, su cabello era un desastre total y ni hablar de su vestidura, su bata blanca portaba múltiples manchas posiblemente de las pinturas, y talvez ni se acuerda cuando fue la última vez que tomó una ducha.
Lan xichen se regaño mentalmente por sonar tan miserable, no podía evitarlo los recuerdos todavía lo atormentan y vuelven una y otra vez, no puede deshacerse de ellos aunque quiera..
- Quítate eso de la cara, es incómodo hablar con alguien así- dijo jiang Cheng tomando el libro que tenía Lan xichen cubriéndose la cara.
- ¡No!- dijo tomando con más fuerza el libro en sus manos. – por favor, yo no quiero..- iba a continuar pero jiang Cheng lo interrumpió.
- ¿No me quieres ver?- pregunto inconscientemente jiang Cheng, para cuando se dio cuenta de sus palabras se sonrojó – mierda- musito.
Al otro lado del libro la cara de Lan xichen estaba igual de sonrojada y no pudo evitar que una sonrisa saliera de sus labios.
- Si te quiero ver..- dijo suavemente- pero no quiero que me veas en estás condiciones- pronunció casi inaudible.
- Déjate de tonterías- bufo jiang Cheng, tomando el libro con fuerza y arrancándolo de sus manos.
En un intento desesperado por tomar el libro de regresó, no pudo equilibrarse bien provocando que se cayera y con ello un sonido sordo se escuchó dentro de la habitación.
- Auch- dijo jiang Cheng sintiendo el dolor del golpe.
- Perdóname- dijo Lan xichen que se encontraba encima del jiang.
- Está bien- respondió jiang Cheng para luego voltear a verlo.
Los dos estaban viéndose fijamente en una posición un poco comprometedora; jiang Cheng sostenía el libro encima de su cabeza, mientras su otra mano estaba en el pecho de Lan xichen y las piernas abiertas a los lados de su cadera; de igual manera Lan xichen sostenía el libro mientas su otra mano de sostenía la cadera de jiang Cheng.
- Si tan solo me moviera un centímetro más yo podría..- pensó Lan xichen, El ambiente se estaba volviendo pesado, haciendo que su respiración se comenzará a agitar -su cuerpo es tan cálido- pensó mientras todavía tenía su mirada en jiang Cheng.
Cuando se disponía a acercarse más fue interrumpido. Un discípulo tocó la puerta, provocando que jiang Cheng volviera a sus sentidos.
- Todavía estás débil, ¿ Te ayudo a levantarte?- dijo jiang Cheng sonrojado.
- Si, por favor- respondió un poco desanimado por la repentina interrupción.
- Líderes, les traigo el almuerzo- dijo el discípulo desde la puerta.
- Espera un momento- respondió jiang Cheng mientas ayudaba a levantar a Lan xichen, cuando terminó de ayudarlo a asentarse se dirigió a la puerta encontrándose con un discípulo que traiga la comida del día para dos personas, la tomo y se adentro a la habitación otra vez.
Lan xichen lo seguía con la mirada, mientras que jiang Cheng ponía la bandeja de comida en la mesa frente a él.
- ¿vas a comer?- preguntó Lan xichen, aún sabiendo la respuesta.
- Vamos!- musito jiang Cheng, viéndolo seriamente.
- Pero no tengo hambre- cometo Lan xichen suavemente.
- No te pregunté si tenías hambre, te estoy diciendo que vas a comer- regaño jiang Cheng mientras acomodaba los platos de comida y tomaba la flauta de Lan xichen para después ponerla en su cintura.
Por supuesto Lan xichen noto que jiang Cheng tomo su flauta – deciárea ser esa flauta- fue un pensamiento que se le cruzó por la cabeza pero fue vuelto a la realidad cuando veía a jiang Cheng extenderle unos palillos.
- A comer- dijo jiang Cheng mientras Lan xichen tomaba los palillos.
- Pero… líder jiang yo...- iba a protestar pero fue interrumpido por la mirada hostil y el anillo que empezaba a brillar – está enojado- pensó nervioso, bajo su vista en señal de derrota para ver los platillos al frente suyo.
Por unos momentos sintió asco por la comida pero lo camufló bien con su sonrisa habitual mientras miraba de reojo a jiang Cheng que comía tranquilamente.
- Di que sientes malestar, come lo que puedas, y no finjas esa maldita sonrisa tuya.- dijo jiang Cheng todavía comiendo.
Lan xichen se sorprendió por el comentario, haciendo que su sonrisa flaqueara un poco – El líder jiang es muy observador- dijo jugando con la comida que sobraba.
- Mm- respondió jiang mientras masticaba.
- Pero el líder jiang no me menciono el porqué de su visita?- dijo Lan xichen buscando un poco de conversación.
Mentiría si dijera que no extrañaba hablar con él, pero las situaciones que tuvieron que afrontar en la campaña de sunshot los había dejado con las manos llenas, luego pocas veces podían intercambiar palabras o saludos casuales antes que entrara en reclusión y ahora que lo tenía aquí por supuesto no perdería la oportunidad de hablar con él.
- Estoy comiendo- dijo jiang Cheng seriamente mientras continuaba comiendo.
- Perdón, continúe- dijo Lan xichen apenado por su actitud – cuando acabe aquí escribiré las reglas- se regaño internamente muy avergonzado. Solo con la llegada de jiang wanyin ya había roto muchas reglas.
Los minutos pasaron y con ellos ya había terminado jiang Cheng de comer pero Lan xichen había dejado la mitad de su comida, pero el jiang no lo regaño, lo que agradeció internamente. Jiang Cheng acomodó los platos nuevamente, los entrego a un discípulo para luego volver a entrar y sentarse frente a Lan xichen en la mesa; En todo momento Lan xichen no apartó su mirada de él, viéndolo de arriba a bajo, reparando cada detalle – ha crecido un poco, tiene el cabello más largo que la última vez y esa cintura..- pensó mientras no pudo evitar humedecer sus labios.
- Retomando su pregunta ze wu-jun, vine a arreglar asuntos del estudio de Jin Ling y ver si ya habías muerto- dijo mientras servía un poco de té.
Ha pesar de haber dicho al fuera de lugar, Lan xichen sabía a lo que referían esas palabras- lo preocupe mucho- pensó haciendo que su corazón diera un brinco de felicidad. – ya veo - fue lo único que respondió dando una pequeña sonrisa.
Por dentro jiang Cheng era todo un desastre, desde que entró Lan xichen lo ha estado viendo mucho y en cierto modo es un poco incómodo – ¿ Me veo mal?, ¿ Tengo algo en la cara?, ¿ Me habré despeinado en la caída? – eran pensamientos que se lo estaban comiendo vivo.
- El líder jiang está un poco distraído ¿Durmió bien?- pregunto Lan xichen muy preocupado, viendolo seriamente mientras que esperaba una respuesta.
- ¿ Y tú duermes bien?- respondió con otra pregunta.
- No mucho..- respondió con una sonrisa triste, bajando su mirada.
Jiang Cheng no comentó nada al respecto y desvió su atención hacia el cuarto haciendo que frunciera el ceño por acordarse del tremendo desastre dónde estaba.
Lan xichen al notar que jiang Cheng está reparando toda su habitación sintió mucha vergüenza- disculpe el desorden de mi habitación- dijo lo más rápido posible, logrando que jiang Cheng lo volviera a ver con una ceja alzada – claro- fue su repuesta.
Jiang Cheng se levantó de su asiento haciendo que Lan xichen le mirada rápidamente, siguiendo con cada uno de sus movimientos, solo lo ignoro y se aproximó a la puerta donde llamo a un discípulo que se encontraba cerca.
Lan xichen intentaba escuchar la conversación, pero le parecía imposible a tal punto que solo se rindió y espero que el jiang volviera.
Luego de unos minutos el jiang volvió con un balde de agua, lo que le pareció extraño pero luego de unos segundos entendió.
- No hay necesitad, yo lo haré permítame- dijo Lan xichen apresurando.
- ¡ Tu quédate dónde estás y no estorbes!- regaño jiang Cheng.
- Bien- fue la última respuesta de Lan xichen.
Procediendo a lo que estaba haciendo, tomo los libros tirados en el suelo y los acomodo por tamaño en el librero cerca de la ventana; tomo los lienzos y las pinturas y las acomodo en una esquina de la habitación donde no estorbaran, para después arreglar el problema más difícil : Las manchas en el suelo.
Se recogió su vestimenta para no ensuciarla, se arrodilló y tomo el trapo mojado, y procediendo a quitar las manchas con un poco de fuerza. Realmente se le estaba haciendo difícil quitarlas, parecían que estuvieran ahí meses o talvez años pero hay que intentar lo imposible;  no lo juzguen siempre le ha gustado el orden no tan extremo como gusu, pero pues es orden.
Mientras que jiang Cheng seguía con sus labores de limpieza un Lan que no despegaba la vista de él se lo estaba comiendo. Lan xichen se avergonzó rápidamente por esos pensamientos impuros hacia su wanyin, pero no podía evitarlo. Si se pone a pensar desde la última vez que se vieron fue tan rápido, y ahora teniéndolo en su habitación, mojado y en una posición.. – muy tentador- dijo con una voz inaudible.
- ¿ Que dijiste?- pregunto jiang Cheng con signos de confusión.
- Nada- fue lo que respondió Lan xichen muy sonrojado – casi – fue lo que pensó.
¿ Que esperaban que hiciera? Todavía no estaba seguro de decirle lo que sentía o preguntarle si era mutuo – no quiero que me abandonen- ese pensamiento hizo que su alegría recayera otra vez.
Cuando jiang Cheng terminó todo y se dirigió a ver a Lan xichen, era toda una bola de depresión, pero no dijo nada, mas se dirigió hacia la puerta donde llamo otra vez al discípulo y le pidió agua caliente.
Pasaron alrededor de 15 minutos para que el discípulo volviera con el balde de agua caliente, pero ninguno hablo hasta que Lan xichen sintió que le tocaban el hombro.
- Camina- dijo jiang Cheng mientras alzaba y jalaba a un Lan confundido.
- ¿ Dónde?- pregunto Lan xichen, hasta cuándo noto que se dirigían al baño.
- A bañarte- pronunció jiang Cheng sonrojado dándole la espalda a Lan xichen aún jalándolo.
Lo pronunciado por jiang Cheng hizo que Lan xichen se sonroja y en alguna manera dejarse llevar, en su mente pasaban muchos escenarios eróticos con su wanyin en el baño, por supuesto esto es gracias a los libros que consiguió su hermano.
- Desvístete- ordenó jiang Cheng mientras vertía el agua caliente en la tina de agua fría.
Esa orden provocó que más imaginaciones en la mente de Lan xichen, haciéndolo ver cómo un tomate.
- ¿ Ya?- pregunto Lan xichen suavemente.
- Sí!, Muévete o ¿quieres que lo haga yo?- dijo tocando el agua, probando si estaba a buena temperatura.
Como no hubo respuesta se volteó a ver encontrándose con un Lan xichen sonrojado y con un brillo en sus ojos que daban escalofríos. Jiang Cheng no aguanto mantener la vista en Lan xichen así que desvió la mirada sonrojado por la vergüenza de sus palabras- debo aprender a medirlas- pensó dándose un golpe internamente.
- Está bien- respondió Lan xichen desprendiendo su vestidura del cuerpo.
Jiang Cheng no aguanto la curiosidad y miro de reojo a Lan xichen encontrándose una figura delgada a comparación de como estaba antes pero aún así estaba bien tonificada – ¿ De dónde sacan tanta musculatura los Lan?- fue un pensamiento fugas que tuyo hasta que se dio cuenta que un Lan lo mira como si viera una presa y esto hizo que mirara a otro lado encontrando la pared del baño muy interesante.
Luego de unos minutos se escuchó a alguien entrando al agua y ahí estaba la señal del jiang para poder ver.
Jiang Cheng se acercó a Lan xichen por la espalda, tomando un poco de jabón y con un trapo zurrar su espalda. Aquel movimiento hizo que Lan xichen se tensara para después relajarse – su wanyin lo estaba bañando- y con ese pensamiento paso todo su baño.
Jiang Cheng al sentir el cuerpo del Lan desnudo se sintió tan bien que quería tocar en todos lados pero rápidamente desechó ese pensamiento.
Cuando llegó el momento de lavar el cabello se encontró con la cinta todavía puesta, por supuesto que la había notado con anterioridad pero dedujo que cuando era evidente de que tenía que lavar el cabello el Lan la quitaría, pero no, no había ningún indicio de que el Lan quisiera quitarla, así que respiro profundamente y quitó la cinta el mismo aún sabiendo el significado de está, y la acomodó en la pequeña mesita cerca de la bañera, por suerte Lan xichen no se quejó en ningún momento por haberla quitado por lo tanto prosiguió a mojar el cabello.
Claro Lan xichen no se quitó la cinta a propósito para que jiang Cheng se la quitara en un vago intento de marcarlo como suyo.
Jiang Cheng enjabonó sus manos para luego aplicarlo en el cabello cuidadosamente, haciendo masajes de relajación como el mismo se los hace.
- Esto es algo que hago para des estresarme- dijo jiang Cheng masajeando suavemente el cráneo del Lan.
- Mm.. se siente bien..- respondió Lan xichen suspirando en un tono muy seductor.
Jiang Cheng que se encontraba aún dándole masajes al Lan, estaba completamente sonrojado y algo en la entrepierna que lo estaba comenzando a molestar- maldición- gritó internamente. El Lan en la tina estaba sonriente por lo logrado con su wanyin, por lo menos tenía que sentir lo mismo que él estaba experimentando en ese momento.
El Lan tuvo que enjuagar su propio cabello porque el jiang había salido del baño con la excusa de pedir té.
Ya fuera se encontró con el jiang acomodando la bandeja con té y bocadillos – como casados- fue un pensamiento fugas que tuvo haciendo que sonriera mientras que tomaba su ropa limpia para cambiarse.
Luego de transcurrido unos cuantos minutos, salió pero esta vez secándose el cabello con una toalla- muy seductor- pensó jiang Cheng pero rápidamente se olvidó de lo dicho y lo ayudo a sentar.
Se posicionó atrás de él, tomando la toalla en sus manos para después seguir secando poco a poco; tomo un peine cercano para comenzar a peinar el desastre de cabello que tenía. – tienes un nido de ave aquí- comentó jiang Cheng.
- Perdón- respondió Lan xichen. Haciendo bufar al jiang.
Coloco un poco de crema en el cabello para después comenzar a peinar y así estuvieron un buen rato hasta que el cabello se secó por completo.
Lan xichen casi y se dormía en las manos del jiang, las tenía muy suaves y la paz que transmitía era demasiado para él hoy; no se dio cuenta que jiang Cheng además de cepillarle el cabello lo peinó y lo único que faltaba era la cinta que tenía en sus manos así que solo se la paso, jiang Cheng dudo de tomarla pero después desistió y la tomo, primero fijándose que quedará bien centrada para después amarrarla atrás cuidadosamente; - Es tuya wanyin no te preocupes de más- era lo que decía Lan xichen en su mente, para cuando sintió que la cinta ya estaba puesta hablo.
- ¿quieres leer un libro?- pregunto un poco dudoso, mientras sentía la falta de calor cerca suyo.
- ¿ De que se trata?- pregunto de vuelta.
- ¿Puedes traerme esos dos de haya por favor?- respondió Lan xichen con otra pregunta.
- Bien..-  respondió jiang Cheng, por supuesto sabía que Lan xichen no le diría de que se trataba, para él “ investígalo tu mismo” fue la respuesta que le dio.
Luego de tomar los dos libros señalados por Lan xichen se volvió a posicionar en su lugar extendiendo los dos libros que fueron recibidos por un Lan sonriente.
- Toma esté y yo leeré aquél, cuando terminemos analicemos el contenido de cada uno ¿Te parece?- pregunto Lan xichen con una sonrisa resplandeciente.
- Bien.. pero ¿ Porque tengo que leer esta clase de libro?- pregunto jiang Cheng con el ceño fruncido.

¡ Hola chicos!☺️✨ ¿ Cómo están?
Espero que bien, ¿que tal les está pareciendo la historia🤭?
Disculpen cualquier falta ortografía 🙏
¿ Tenemos un Lan xichen pervertido?😮
¿ Dónde estarán nuestros conejitos? 🤔
Nos vemos la próxima actualización 😘
Los quiero muchooo ❤️❤️

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