Black Hunter: El nacer de Los Justicieros

7. Inicia la cacería

    Ocho horas antes del atentado contra Miguel Falcone.

Estefanía se besa muy apasionadamente con Mr. Bullet en su oficina, sus manos se pierden en la cabellera rubia de Daniel, y este acaricia su espalda. De repente son interrumpidos, alguien toca la puerta.

—Me encantas —le dice Daniel al oído y ella sonríe coquetamente.

Él se dirige a abrir la puerta y Estefanía se acomoda en su silla.

—Pérez, ¿qué necesitas? —pregunta sujetando la manilla de la puerta.

—Traigo información para la señorita Suria —responde el guardaespaldas con un sobre en sus manos.

—Adelante, pasa. —Daniel le da entrada.

—Señorita, ya tenemos el nombre de a quién pertenece la moto —informa el hombre mientras le entrega una carpeta—. El propietario se llama Miguel Falcone Ramírez —añade unos segundos más tarde.

—¿Miguel Falcone? —exclama Daniel—. Tiene sentido, así que todo esto es una venganza por lo de sus padres. Interesante, ¿no crees? —Mira a Estefanía.

—Pérez, gracias por la información. Puedes irte —dice Estefanía mientras lee los documentos.

—Sí, señorita. —Sale de la oficina.

—Daniel, sé lo que sugieres, pero la respuesta es no. —Continúa revisando los papeles.

—Cariño, tú no tuviste nada que ver con la muerte de sus padres. Si hablamos con él, podría...

—¡No! —grita mirándolo con un poco de enfadado— No, amor —calma el tono de su voz—, no lo haremos. Entre menos lo sepan más probabilidad de lograrlo tendremos. Además, el simple hecho de ser parte de Cones me hace responsable. Llamaré a Eduardo para informarle. —Toma un teléfono y marca.

—Hola, Suria... ¿Ya tienes noticias de Black Hunter? —pregunta Eduardo.

—En efecto, Daniel te llevará el documento con la información.

—Oh, no te preocupes, solo dime el nombre. Confío en ti.

—Como gustes. Se llama Miguel Falcone Ramírez, el hijo de tus antiguos amigos —informa con tono divertido en su suave voz.

—¡Quién lo creería! Debí de ordenar matarlo también. —Resopla—. Dentro de una hora llegará uno de mis hombres para que te ayude a asesinarlo.

—No necesitamos ayuda.

—Ha pasado más de una semana y no veo resultados. El sujeto que enviaré puede que tenga asuntos pendientes con él. —Cancela la llamada.

Luego de una hora el hombre enviado por Eduardo llega a la oficina de Estefanía. Al verla queda impresionado por su belleza.

—Buenas noches, es un placer conocerla —adula Bombardero y la mira de arriba abajo—. Mi nombre es Arturo Morales, conocido como Bombardero. El señor Eduardo me ha dicho que estaré bajo su mando.

—Arturo, te presento a Daniel Ramos o más conocido como Mr. Bullet, mi mano derecha —dice con seriedad. Le molesta que Eduardo le haya mandado ayuda como si ella y su gente no fueran capaces—. En la madrugada irán al domicilio de Miguel Falcone, estarás bajo su mando.

—Está bien —responde Arturo y le extiende la mano a Daniel. Por unos segundos un Mr. Bullet serio lo mira a la cara, le molestó como miraba a Estefanía. Finalmente le da la mano.

—Eduardo me dijo que tal vez tenías asuntos pendientes con Miguel Falcone—comenta Suria—. ¿A qué se refería?

—Eh..., bueno, hace poco fui atacado, intentaron matarme. Me apuñalaron el pecho y por poco el cuchillo toca mi corazón. No sé cómo, pero perdí mi memoria, el señor Alex me explicó, pero no entendí. —Se rasca la cabeza, sintiéndose apenado—. En fin, he recuperado mis recuerdos a excepción de los dos últimos años.