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APESAR de la insistencia de Elaine para que Shoto hiciera amigos, el medio albino seguía almorzando con ella y Kaede todo el tiempo. El martes había ocurrido un accidente con los medios de comunicación que intentaron entrar al colegio, activando las alarmas. Claramente fue todo un caos pero ellos no se movieron de su sitio, en especial porque ningún héroe había advertido de algún peligro, solo la alarma que indicaba un traspaso en la puerta principal.
Shoto le había hablado sobre su primera clase con el símbolo de la paz, estaba orgullosa del menor pues había sido el más rápido con su lucha, en definitiva iba a ser un héroe genial. Aunque tenía una pequeña astilla en el pecho porque Shoto no quería usar su lado izquierdo, tenía muy claro que no debía presionarlo pero llevaba años guardándose el usar su lado fuego y tarde o temprano aquello le jugaría en contra.
— Sabes que si no quieres entrenar con el viejo puedes venir conmigo. — le propuso. — Puedo ayudarte a manejar tu lado izquierdo.
— Nee-san. — le llamó fríamente. — No quiero usar el poder del viejo.
— No vamos a discutir de esto aquí. — sonrió. — Anda, termina tu soba.
Hablar con él era un caso perdido, estaba en una etapa de negación al usar su particularidad y ella por supuesto que lo entendía, Shoto tenía miedo de lastimar a alguien con él como Endeavor había hecho con su madre, ella sintió lo mismo el primer año de su entrenamiento con el héroe número dos. Confiaba en que tarde o temprano él dejaría su rencor de lado y se daría cuenta de que era su poder.
Luego de ese día no pasó nada interesante en UA, solamente que al día siguiente irían a un lugar para entrenar rescate. Elaine claramente sabía que se dirigirían a la USJ con la heroína N° 13 pero no dijo nada para que fuera una sorpresa, era ya una tradición que los de primer año fueran a practicar a aquella instalación con el héroe espacial.
