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Luego de aquel encuentro con Criseli, la convencí que viniera a vivir conmigo en mi apartamento. Aceptó casi de inmediato, con lo que el pago del préstamo que le había hecho ya estaba cancelado. 

No era malo convivir con ella. Se levantaba temprano y me preparaba el desayuno de lunes a viernes y yo lo hacía los fines de semana. No era necesario que lavara la ropa ya que eso lo hacía la lavadora. No podía quejarme que su comida era muy buena y estaba feliz de estar con ella. Aunque hasta el momento no habíamos formalizado algún tipo de relación con Criseli. No. Seguíamos siendo amigos pero con derecho y, tal vez, con un futuro para poder casarme con ella.

Criseli era todo lo que yo quería en una chica. Veíamos animes juntos, teníamos sexo todas las noches, comprábamos libros y disfrutábamos de la lectura echados en la cama o nos quedábamos hasta tarde viendo pelis de terror en el sofá. La vida con ella era lo que más me gustaba y amaba. Supe de inmediato que debía formalizar una relación con Criseli frente a su hermano y toda su familia. Ya no quería esperar más.

Hasta que llegó su mamá con una noticia.

Aquel día llegaba del trabajo con mejor humor que nunca; con Criseli, la vida era mejor pero no estaba preparado para la bomba que venía. 

Yo aún sin saber que su mamá la había visitado por la tarde, noté que Criseli estaba más cariñosa que de costumbre. Eso no me gustaba por lo que mis sospechas de que algo andaba mal llenaron mi cabeza. Me abrumaba saber que estaba por suceder algo.

-Will-dijo mientras yo cenaba un riquísimo arroz con pollo.

-Dime qué pasó. Estás muy melosa más que de costumbre.

-Hoy vino mi mamá y me dijo que me fuera a vivir con ella.

La miré mientras masticaba lentamente y poder digerir tanto la comida como sus palabras.

-¿Y qué decidiste?

-Que me voy. Mañana viene mi mamá con su nueva pareja para poder llevarme junto con mis cosas. Los libros te los puedes quedar. No los necesito.

Estaba hirviendo en cólera pero traté de aparentar calma. No era algo que me esperaba.

-Will, yo te agradezco infinitamente lo que has hecho conmigo en estos últimos meses pero es mejor que vaya a vivir con mi mamá hasta que pueda conseguir un buen trabajo e independizarme otra vez. Así podré estudiar psicología que lo dejé por no tener recursos.

-Dime ¿te faltó amor de mi parte para que me abandones?-las palabras salieron de mi ser como cuchillas bien afiladas.

-Para nada, pero es que ya no soporto estar aquí sin poder salir por no tener dinero. Me siento prisionera porque debo depender de ti y eso no me gusta.

Sentí cómo se tensaban mis brazos pero traté de seguir aparentando estar tranquilo. Cosa que ya no podía disimular. Lo que me decía Criseli me dejaba sin palabras. El sueño que había construido con ella se fue diluyendo poco a poco con las palabras que me decía y resonaban en mi cabeza. 

Tanto había deseado una vida al lado de Criseli ¿y ahora me plantaba una cachetada de ida y vuelta? Desgracias y malagradecida.

-Bueno, si te quieres ir puedes hacerlo. Si te vas será por hambre porque amor jamás te faltó de mi parte.

-Sabía que te ibas a reaccionar de esa manera, Will, pero es lo mejor para ambos. 

-No entiendo a lo que te refieres con lo de que es "lo mejor para ambos", pero ya tomaste una decisión. Mañana cuando te vayas te pido que dejes la llave al departamento de al frente para yo recogerla cuando llegue de trabajar. 

CriseliDonde viven las historias. Descúbrelo ahora