Sharingan: Secretos de Clan. {Itachi}

Capítulo 3 - Niño particular

Capítulo 3 - Niño particular.

Pase varios días tratando de convencer a Kakashi-san que me enseñara a usar kunais, se negaba en cada oportunidad, me sentía derrotada por no poder convencerlo, desde que me juntaba con Itachi mi grado de interés por los ninjas subió un poco más, no pensaba pedírselo a Minato-san con su trabajo como Hokage no creía que tuviera tiempo suficiente para enseñarme y mucho menos se lo pediría a Kushina-san ya que ella se emocionaría demasiado ya luego no podría quitármela de encima, además de que estaba embarazada y prefería que no se esforzara.

-Miko ya estoy en casa tebbane -la voz emocionada de Kushina-san se escuchó por toda la casa, no hice ningún movimiento.

-Estoy en la sala -le respondí para que no pensara que no había nadie.

-Traje dulces, sé que te gustan mucho así... -dijo entrando a la sala cuando me vio dejo de hablar y me miro extrañada- ¿Qué haces de cabeza Miko? -pregunto.

-Oh esto, me ayuda a pensar -dije manteniendo el equilibrio con mis manos sin ningún problema.

-No te fuerces tanto, ya sabes que el medico dijo que no puedes hacer cosas que te cansen físicamente -me dijo a forma de regaño.

-Y mira quien lo dice, la mujer que está embarazada y no puede hacer esfuerzos -la mire divertida a lo que ella se sonrojo, decidí cambiar de tema de inmediato- Era esto o colgarme de un árbol, supuse que no querrías verme colgada de uno por eso evite darte un disgusto -dije volviendo a poner los pies en el suelo.

-Que considerada creo... -su expresión de confusión hizo que la mirara confundida.

-¿Pasa algo Kushina-san? -pregunte interesada.

-No nada, nada tebbane -dijo ella de forma nerviosa- ¿Y qué pensabas? -pregunto dirigiéndose a la cocina para dejar las bolsas.

-Pensaba en una forma eficaz de sobornar a Kakashi-san -dije.

-¿Sobornar a Kakashi? -pregunto.

-Sí, no quiere pasar tiempo conmigo y por eso pensé que si lo sobornaba con algo aceptaría -mentí ya que esa no era la razón pero no pensaba decirle sobre mi interés de aprender a ser ninja- pero no se me ocurrió nada -suspire.

-¿Por qué tanto interés en Kakashi? Pensé que Itachi-kun y tú se llevaban bien, han salido a jugar mucho desde que se conocieron -me dijo.

-No es que no quiera salir a jugar con Itachi pero Kakashi-san me ha ignorado estas semanas así que quiero atraparlo -dije con una sonrisa.

-Ah ya entiendo -dijo riendo y sacando los productos de la bolsa- ve a lavarte las manos si quieres comer -me mostro una caja de dulces y otra de dangos, al momento se me hizo agua la boca y salí corriendo a lo que más daba para lavarme las manos.

Kushina-san me dio los dulces, y comí unos cuantos, también me dio la caja de dangos los mire por un instante y decidí comer unos pocos, estaban demasiado buenos, adoraba las cosas dulces, ella y Minato-san solían comprarme dulces una vez a la semana, era un trato para que me comportara tanto en la casa como en la calle ya que si no lo hacía no me comprarían más.

-Miko, si quieres puedes salir a jugar, la cena será en unas horas y yo tengo varias cosas que hacer y no puedo llevarte conmigo -me dijo ella, asentí sin ningún inconveniente.

-Está bien, volveré para antes de la cena -dije y agarre la caja de dangos, la cual aún contenía unos cuantos, ya sabía a quién se los daría.

Camine sin mucha prisa por las calles de la aldea, había un lugar donde varios niños se reunían a jugar, Itachi solía pasar por ese lugar justamente unas horas antes de la cena ¿Y cómo lo sabía? Es que era demasiado observadora, solía verlo cada que pasaba con Kushina-san, por alguna razón hacía el mismo recorrido de camino a su casa y últimamente siempre solo, llegue al lugar solo unos minutos después y mire a mi alrededor habían muchos niños, note la presencia de Itachi cuando una niña lo llamo para jugar, le mire con curiosidad, avanzo sin hacerle caso a la niña mientras los otros niños decidían que jugar luego notaron la presencia de Itachi y lo miraron.